Fuego En El Otoño

Problemas en la ciudad

Era de noche, en el bosque no se escuchaba ningún ruido todo era tranquilo, entre la oscuridad de las sombras que proyectaba la luz de la luna una persona encapuchada con un estuche en mano sale de esta y se encamina por un sendero tal parece que a caminando por bastante tiempo.

Cercas de ese bosque se encuentra la gran ciudad de Vale, cuna de la escuela de cazadores más importantes de todo Remnant, Beacon, dirigida por el director Ozpin, pero esto se verá más adelante, ahora centremos nuestra atención a un lugar en particular una tienda de Dust, el instrumento para pelear contra los Grimms, en ella habían entrado varios matones entre ellos destacaba uno en traje claro mientras los demás en trajes oscuros.

- ¿Sabes lo difícil que es encontrar una tienda de Dust a estas horas? - Pregunta el que era jefe de los matones.

- Lle-llevanse el dinero - Dijo el cajero de la tienda

- No estamos aquí por su dinero.... Traigan y guarden todo el Dust - Ordenó el jefe y los lacayos obedecen

De uno en uno fueron guardando contenedores con piezas de Dust en ellas, al igual con el polvo de Dust en la pared.

Uno de los matones se percata de que hay alguien en la tienda trata de afrontarla pero tenía audífonos, el matón le apunta con el arma y una sonrisa confiada aparece en la persona.

- ¿Me estas asaltando? - Pregunta la chica con los ojos plateados.

Mientras afuera hace algunos segundos, y metros, se encontraba la persona que estaba en el bosque, él estaba apreciando la ciudad, viendo la vida que se sentía aún estando de noche, el aroma de la comida que salía de los restaurantes de la zona, todo era tranquilo hasta que fue golpeado por algo saliendo de una ventana.

De ella salió un hombre en traje negro y con el una mancha roja que al detenerse se pudo ver a una chica con una capa roja y una guadaña, esa escena quedaría a la historia pero unos quejidos sacaron de su aparición dramática a la chica con el arma.

- Oh perdón, ¿Te encuentras bien? - Pregunta la Caperuza al chico.

- Solo me aventaron a una persona no es tan grave - Dice el muchacho.

La chica solo hizo una cara extrañada con una muy leve risa pero ambos miraron la dirección del sonido de unos cristales rotos provenientes de la tienda de polvo.

Eran los matones que estaban acercandose a los dos con armas en mano ya listos para liquidar a ambos jóvenes pero los asaltantes solo vieron sus vidas pasar y con ellas dos estelas de luz roja y dorada acompañada de líneas negras y blancas como sombras.

- Wow... - Es lo único que pudo decir al ver al chico moverse de esa manera.

Él solo había desecho todo el grupo enemigo solo y sin ayuda alguna, demostrando un gran combate mano a mano, en eso se escucha el sonido de unas palmas chocando una vez tras otra formando aplausos.

- Bueno, me encantaría charlar más con ustedes y quedarme un poco más pero.... Aquí nuestros caminos se separan.... - Dijo el jefe

Dijo para lanzar un petardo con su arma la cual era un bastón, el petardo impacta la espalda del chico para lograr quitar a la chica de ese impacto, mientras la confusión el jefe había escapado dirigiéndose a la cima de un edificio por las escaleras de emergencia.

- ¿Le molesta si vamos por él? - Preguntan ambos recibiendo una negación del dueño de la tienda.

Con rapidez subieron a la par, segundos después de que el sujeto subiera y se parará justo al filo de la cornisa, la chica le apuntaba con su arma y el chico estaba listo para comenzar un combate mano a mano.