7. haremos una fiesta

5.7K 318 507
                                    


¡Hola estrellitas!

Enserio espero disfruten este apartado. Por favor, déjenme su más sincera opinión y que les está pareciendo la trama hasta ahora. 

¡Les deseo un día increíble! ¡Y una hermosa semana! Por favor, recuerden mantenerse a salvo, y si saldrán de sus casas recuerden siempre usar mascarilla. ¡Los adoro!

Y sin más que decir, aquí os dejo con el capítulo siete de CYL. Espero lo disfruten, ¡besos! ♡


Capítulo 7; "HAREMOS UNA FIESTA"

Te he estado observando por un tiempo

No puedo dejar de mirar esos ojos oceánicos

Ciudades en llamas y cielos de napalm

Quince bengalas dentro de esos ojos oceánicos.

(...)

Narra Harry;

"¡Sólo tu nombre es mi enemigo! ¡Porque tú eres tú mismo, seas o no Montesco! ¿Qué es Montesco? No es mi mano, ni pie, ni brazo, ni rostro, ni parte alguna que pertenezca a un hombre. ¡Oh, sea otro nombre! ¿Qué hay en un nombre? ¡Lo que llamamos rosa exhalaría el mismo grato perfume con cualquier otra denominación! De igual modo Romeo, aunque Romeo no se llamara, conservaría sin este título las raras perfecciones que atesora. ¡Romeo, rechaza tu nombre; y a cambio de ese nombre, que no forma parte de ti, tómame a mi (...)"

Mis ojos se encantaban a sí mismos con tan atrayentes palabras moldeadas en un verso perfecto. Y sentía tanta envidia de ellos porque, ni mi mente, ni corazón, ni yo mismo podíamos encantarnos al igual que ellos lo hacían.

No se trataba de que no disfrutara Romeo y Julieta, sí lo hacía, pero simplemente desde esta mañana he divagado, he pensado, y creí haber alucinado. Hoy al despertar, creí que todo lo vivido anoche fue sólo una pesada broma de mi imaginación, y pensé que mis últimos recuerdos lúcidos fueron vomitar encerrado en mi baño, recostarme en mi camilla y, bueno dormir.

Pero no, todo fue real. Lo supe en cuánto vi el cuerpo de Louis durmiendo en el sillón, tan arropado entre mantas y almohadas como un niño pequeño. Se me hizo adorable.

No hay mucho que decir sobre qué pasó después. Él despertó, me deseo buenos días, observó la hora y supo que ya debía marcharse. Fue muy dulce, me agradeció por todo lo de anoche cuando en realidad, yo debía agradecerle a él. 

Y se despidió, incluso me llamó "cariño" antes de irse. Creo era una costumbre que había adoptado conmigo. Pero, a mí me gustaba que me llamara así. Se sentía lindo.

Se sentía lindo hablar con alguien fuera de este hospital, y se sentía lindo que alguien te tomara aprecio por tus conversaciones, tu personalidad y tu manera de pensar. No por tu físico o por una enfermedad que te consumía día a día.

"— P-pero, ¿volverás?

— ¡Claro que sí, cielo! Mañana mismo volveré aquí. Y al día siguiente, y al siguiente. Hasta que logres salir de este lugar. Y cuando eso pase podríamos ir a un parque de verdad, ¿no crees?"

Sólo, se sentía lindo tener compañía.

— Nanna, ¿puedo hacerte una pregunta, por favor?

— Ya la hiciste, pequeño — río. Dejó mi bandeja con desayuno a un lado y volteó a verme. Aún carcajeando un poco. — Sólo bromeo. ¡Anda, dime!

change your life. (en proceso)जहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें