Egipto me llevó a ti

Pista 3

Hola, chicos. Aquí reportándome con este hermoso proyecto que hemos escrito entre varios y esperamos que sea de su agrado. A mí me corresponde traerles el capítulo tres, así que sin más que decir, los dejo para que lean ;)

Egipto me llevó a ti

Capítulo 3

Vaya día. No solo tuve que impartir mis clases y escribir parte del resumen sobre nuestra investigación de la princesa de Anatolia para enviarlo a la American Journalor Archeology... también tuve que suplir al profesor Yamada en su clase de iconografía, aplicar un examen por él... y corregirlos. Un suspiro abandona mi boca, estoy realmente exhausto...

―Espero que esos suspiros no se deban a mí.

Resoplo al escuchar su molesta voz. Eriol Hiragizawa jamás pierde la oportunidad de molestarme cada vez que puede. Estoy por creer que es una especie de fetiche que tiene.

― ¿Qué se te perdió por aquí, Hiragizawa?

―Deja de gruñir o no te daré lo que envió Naoko. ―Canturrea y sonríe con autosuficiencia mientras agita unos papeles en el aire con su mano.

― ¿La datación ya está lista? ―Eriol asiente con su cabeza.

―Los resultados son muy prometedores.

Me extiende los certificados del laboratorio y comienzo a repasarlos, sintiendo como la emoción crece poco a poco en mi interior. Hace seis meses habíamos descubierto una momia y sospechábamos que se trataba de un monje que había practicado el Sokushinbutsu exitosamente. La forma en la que había sido sepultado indicaba eso, pero por una extraña razón no fue sacado del sarcófago y expuesto como suelen hacerlo.

― ¿Trescientos cincuenta años? ―Eriol asiente con una sonrisa confiada.

―Sería el monje más antiguo que ha logrado practicar la automomificación.

Una sonrisa se forma poco a poco en mi boca. Esto definitivamente es algo grande.

―Llama a Naoko y dile que repita las pruebas de datación por triplicado. No quiero errores.

―Ya suenas como un jefe de departamento, el señor Kinomoto ha entrenado muy bien a su reemplazo ―dice con esa sonrisa tan molesta―. Imaginé que solicitarías eso al ver los resultados y por eso ya hablé con ella.

Inmediatamente, tomo mi celular y llamo a mi suegro para contarle la noticia. Esta es la primera investigación que yo estoy liderando y más allá de las felicitaciones o del reconocimiento, la oportunidad de contribuir a la historia es maravilloso.

La segunda persona a la que llamo es a mi novia. Sakura ha compartido conmigo todo esto desde que su padre me dio la oportunidad y es ella quien toma las fotografías de la investigación, pero extrañamente no contesta. Vuelvo a intentarlo sin éxito.

― ¿Habrá salido de compras con Tomoyo otra vez?

―Las mujeres son así, amigo. No pierden la oportunidad de renovar el closet.

―No conoces a Sakura ―digo, soltando un suspiro―. Ella odia ir de compras y solo va cuando su amiga la convence de ir... Intentaré con Tomoyo.

Al quinto repique, directo al buzón ¿Dónde están esas dos? Porque es obvio que andan juntas. Últimamente, Sakura anda muy misteriosa ¿Tendrá que ver con el jueguito de las pistas? Conociéndola como la conozco, es muy probable.

―Bueno, si ellas han decidido tener una tarde de chicas. Nosotros podemos hacer lo mismo.

―No lo sé... Estoy agotado.