Jungkook estaba en la misma situación por quinta vez.
Cerró la puerta del baño detrás de él, caminó hasta el lavabo dejando reposar la pequeña caja azul. Después retrocedió dos pasos para ver esta desde lo lejos.
Si las miradas mataran, la pobre caja ya estuviera cinco metros bajo tierra por la forma intensa que el pelinegro la miraba.
Lo que no sabían, es que estaba rezando por dentro.
Empezó a morderse las uñas a causa del nerviosismo que estaba sintiendo.
No es fácil estar tranquilo cuando piensas que estás embarazado, ¿verdad?
Hace unas semanas Jungkook empezó a sentirse mal, dolor de estómago y mareos. Al principio pensó que los camarones que se comió si le habían afectado.
Pero se asustó cuando el día en que se supone entraba en celo, no sucedió.
Eso alarmó por completo al Omega, vamos, ya tenía cinco hijos y cuatro embarazos. Ya sabía muy bien lo que pasaba.
Pero realmente no entendía el porqué, siempre ambos tenían mucho cuidado con eso. Habían aprendido a la fuerza lo importante que eran el uso de los condones y supresores anticonceptivos.
Tres de los cuatro embarazos no fueron planeados. No quería otro.
Lentamente tomó la caja, la abrió y sacó el bendito test de embarazo. Lo observó por unos largos minutos procesando todo y pensando que haría si le daba positivo.
Después de todo, era su cachorro, con solo pensarlo se le ponían los pelos de punta. Incluso su lobo estaba gruñendo.
Cuando por fin se decidió a usar la prueba, la puerta fue abierta, dejando ver a Taehyung.
—Todos los niños están durmiendo— Cerró la puerta tras él. — Jimin no quería dormir hasta que le di su biberón. ¿Ya hiciste la prueba?
Jungkook negó, mostrándole el pedazo de plástico entre sus manos. Taehyung rio nerviosamente y tomó de la cintura al Omega, acercándolo más a su cuerpo para darle un beso en los labios.
—Al menos espero que esta vez sea una niña. — Como respuesta tuvo un golpe con un poco de fuerza en su hombro.
—Cállate.
[...]
Y ahí estaban de nuevo, sentados en el piso del baño a un lado del otro mientras esperaban a que pasaran los minutos para saber los resultados de la prueba.
Como las veces anteriores, apoyándose mutuamente sin importar que.
Jungkook apoyaba su cabeza en el hombro de Taehyung, jugando con los largos dedos de su esposo para distraer sus nervios. El Alfa miraba un punto fijo en la pared pensando en todo, pero a la vez en nada. Hasta que rompió el cómodo silencio entre ambos.
—Sabes que no importa si es positivo ¿verdad? Nosotros saldremos adelante. — Enredó sus dedos con los de Jeon dando un pequeño apretón.
—Lo sé—Dijo en su pequeño susurro cerrando los ojos y absorbiendo la esencia del Alfa para relajarse.
—Además, no es tan malo tener un hijo más. —Jungkook levantó la cabeza observándolo con los ojos entrecerrados y cejas fruncidas.
Claro, como él no era el que paria ni los cargaba por nueve meses.
—Tengo una mejor idea ¿Por qué no vamos a que te corten el pene? Así ya no hay más cachorros. —El rubio lo miró con horror.— Es una idea muy buena.
—Oye Kookie, no creo que sea la mejor ide...—La alarma que habían programado sonó por todo el baño poniéndolos alerta, parándose del suelo a los segundos.
Jungkook tomó la prueba y miró a su Alfa, quién le ofreció su mano como apoyo y no dudó en tomarla. Contaron hasta tres y voltearon la prueba.
Una línea rosa.
No estaba esperando.
Ambos soltaron el aire retenido por la tensión.
—Yo quería una niña—Taehyung hizo un puchero, diciéndolo con un tono en broma. —A la próxima será entonces.
Jungkook soltó su mano de golpe y se alejó del Alfa, frunció el ceño poniendo sus manos en las caderas.
—En verdad es buena idea lo del corte del pene. Iremos mañana mismo. — Y sin más abrió la puerta para salir.
En ese momento, Taehyung sintió el verdadero terror.
—Bebé, era mentira~ Jungkookie~—Al no recibir respuesta salió detrás de su esposo. —¡Jungkooooooooook!—Dijo en un tono de berrinche, como los que hacía Seokjin.
Ah, pobre de Taehyung.
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