Fall In Love ➳ Soobin/수빈

CAP. 21

Esperé a que Soobin y esa chica entren y cuando entraron al colegio, recién entré.

Tal vez suene tonto pero, no, no me gusta Soobin... Bueno tal vez un poco, no lo sé, pero él jamás se fijaría en mi y menos como yo lo trato.

Mis rodillas me dolían. Entré a mi salón, estaba dirigiéndome s mi lugar el cual estaba vacío, al parecer Soobin esta en otro lugar. Estaba a punto de llegar a mi silla y Cloe pasó chocandome  muy fuerte e hizo que me vuelva a caer. Mis rodillas sangraron nuevamente puesto a que había caído sobre ellas.

Risas y burlas se oían a mi alrededor me dolía mucho las rodillas puesto que mi piel en esa zona es delicada.
Me levanté y caminé hacia mi lugar, todos ya se habían calmado y ya habían dejado de burlarse de mi.
Estaba a punto de sentarme y una voz suave y tranquilizante se oyó atrás mío.

— Hola Rose —reconocí al dueño de esa voz al instante; era Soobin quien parecía estar alegre.

Él caminó más rápido que yo y se puso frente a mi. Pude darme cuenta que su sonrisa se borró al ver mis rodillas en ese estado.

— ¿Qué te pasó? —no le respondí y solo agaché mi cabeza.— Rose, ¿Estas bien?

Como iba a estar bien en todas las desgracias que me pasan. Intenté caminar para que él se quitase de mi camino pero no fue así.
Él se inclinó y me levantó en sus brazos como los esposos cargan a sus esposas en su boda pero claro, esta no era una boda.

Su oloroso perfume frutal me gustaba, jamás lo había tenido tan cerca de mi; así le miré a los ojos y él sonrió y guiñó.

Me sonrojé y bajé la mirada. Deseaba negarme a que el me tenga así pero no quería.

Soobin me llevaba hacia la enfermería.

Mi personalidad fría me gobernó y decidí hablarle a Soobin.

— Soobin, suéltame yo puedo caminar. Déjame aquí —le dije esperando a que lo haga.

— ¿Por qué siempre estas de mal humor conmigo Rose?

— ¿Por qué siempre finges que te importo? — él seguía caminando.

— Tú realmente me importas, Rose.

— ¿Me quieres ver la cara de estúpida?

Soobin sonrió, al parecer le causó gracia lo que dije.

— Algún día te darás cuenta, hasta mientas, disfrutaré de tus insultos.

Me quedé callada. No sabía que responder. Por alguna extraña razón, esas palabras me reconfortaban; él me quiso decir que esperará el tiempo que sea necesario para que yo lo perdone, logró confundir mis pensamientos tan fácilmente.

— ¿Por qué haces esto? —de alguna manera me daba esperanzas la respuesta.

— Le prometí a Yeonjun que te cuidaría, no te puedo dejar sola en este estado. —esa esperanza desapareció al oír la respuesta. Él me habló de Yeonjun y ese es mi punto débil.

Al llegar a la enfermería Soobin me sentó en la camilla; al parecer las enfermeras no estaban y él comenzó a curarme.

Su mano hacía suaves movimientos con el algodón. Mi piel pálida; en esa zona de mis rodillas estaba herida y roja.
Todavía estaba curándome mi herida y de pronto me miró fijo a mis ojos. 

Corazón, deja de latir tan rápido.