Cruda Realidad

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En el despacho del castillo Lucifer, se encontraba Sirzechs revisando varios documentos y libros... y me preguntarán, de que o para que?... Pues la respuesta es sencilla, el Maou Carmesí estaba buscando en esos documentos y libros algún método, hechizo u objeto que lo ayude a salvar la vida de su hija y de su esposa, por ese motivo no había dormido en varios días, pero su búsqueda fue inútil... nada en los archivos demoníacos podría ayudar a su familia... se puso a pensar, no podía dejar morir a su esposa, pero tampoco quería dejar morir a su hija. Y así hubiera seguido más tiempo de no ser por una visita inesperada...


-Vaya... si que estás de lo peor, no? Sirzechs?- el que dijo eso fue un hombre de mas o menos 1,80 de altura, con el pelo negro a excepción de su flequillo que era rubio, de ojos violetas y que llevaba un traje negro con camisa morada sin corbata y desabotonada quedando un cuello tipo V, y que llevaba zapatos a juego.


-Azazel?!...- la cara del demonio de clase suprema estaba anonadada. Nunca espero ver al gobernador de los Ángeles caídos en ese lugar y preciso momento...



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-Si ese es mi nombre, no lo malgastes- dijo el gobernador con un tono arrogante pero a la vez de burla... característico de él.


-Que haces aquí?- pregunto Sirzechs dejando de estar sorprendido y volviendo a revisar los documentos por tercera vez.


-Bueno... Vine a ver a un viejo conocido para tomar unos tragos... pero veo que no estás de buenas para eso... dime, que sucedió?- Azazel podría ser a veces muy irritante y molesto pero era un buen amigo y se preocupaba por los demás, aunque no lo expresaba de manera abierta.


-Bueno, veras...- así, Sirzechs le contó todo lo que sucedió a Azazel, el cual, solo se quedó pensando mientras miraba al suelo.


-Bueno... tal anormalidad en tu próximo hijo es de mucha preocupación, y me dices que ya verificaste en todos los archivos demoníacos?- Azazel solo recibió un asentimiento de parte de Szirsechs.


-Ya veo... bueno, por experiencia propia al haber sido ángel anteriormente, Michael no tiene algún hechizo u objeto que pueda ayudarte y nosotros, los caídos, tampoco...- Sirzechs bajo la mirada con una expresión amarga y triste, las palabras de Azazel hicieron que perdiera esperanza por ayudar a su familia...


-Pero sabes... Dios si tenía un objeto capaz de curar cualquier herida, enfermedad o anormalidad en las personas, mientras no sea regenerar algún miembro apuntado...-

El amor de un Dragón EmperadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora