Capítulo ☠️🏴‍☠️

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H.Lavoie y K.Lavoie.

»«

Runaan; continente de Waterland, isla de Valoran.

La voz del Capitán Shanks nos dio la bienvenida y mi hermano abrió la puerta, dejando ver una pequeña habitación, con el hombre de pelo negro sentado en una cama aparentemente dura y manchada de barro. El suelo era de tierra al igual que las paredes y el techo, estar ahí era como estar en una cueva, y literal, porque era algo así. Había columnas de madera oscura en algunos lugares específicos para que la habitación no se viniera abajo.

La habitación estaba compuesta por la cama anteriormente dicha, unos baules, aparentemente viejos y una mesa con un par de sillas sucias, unos platos vacíos y con restos de comida estaban encima de la mesa de madera.

-Me alegra que al final hayáis venido. Jenkins ya ha avisado a mi tripulación y pronto podréis ver mi pequeño ''Mundo'' -dijo con una sonrisa.

-¿Tú pequeño ''Mundo''? ¿A qué te refieres? -preguntó mi hermano alzando una ceja.

-A mi barco, por supuesto. Como tu preciosa hermana había dicho, soy Capitán de barco, soy un pirata, por eso me querían colgar, ya sabes, cosas de altar mar. -se levantó de la cama y señaló las dos sillas. -Por favor, pillar asiento, vamos a tener una larga charla.

Los dos nos sentamos tal y como había dicho, las sillas eran algo incómodas.

-¿Vais a venir conmigo? A mi no me importaría, os debo una y me hace falta más tripulación.

-Si, claro. A eso había venido, te lo iba a pedir. -dije sin miramientos.

-Directa al grano, eso me gusta. Pero lo que no me gusta es como te va a tratar la gente si te ve. No te ofendas, pero eres muy pequeña de tamaño. Los piratas te van a ver como un simple juego y no te van a tomar enserio. -habló con rapidez mientras estaba enfrente mía.

-No me ofendo, tranquilo. Podríamos hacer algo. -le dije con una idea en mente.

-Dispara. -dijo.

-Vestirme de hombre. -solté. Shanks me miró sorprendido y sonrió ampliamente.

-Me gusta como piensas. -se acercó a mi hermano. -Es una buena chica, ¿eh?. -le da un golpe amistoso en el hombro, lo cual hizo que se moviera hacia delante.

-Creo que podríamos hacer que me viera grande con la ropa indicada. -informé. -Y taparme la cara de alguna manera.

-Y la voz, es algo importante, la tienes muy chillona y adorable, eso no asusta. -llevó su mano al mentón.

Mi hermano que había estado callado todo el rato decidió hablar.

-Tengo un plan para lo de la voz. -los dos lo miramos, deseosos de saber lo que pensaba. -Mi plan es que cada vez que quiera decir algo me lo susurre y yo lo diga. Es algo tedioso, pero como yo no me voy a separar de ella puede funcionar. Siempre se puede decir que tiene la voz mal y tiene que hablar en voz baja.

-Me gusta... si... ¡Me gusta! Es un toque misterioso, si, si, perfecto. -habló Shanks. -Ahora queda el tema ropa. Tiene que ser grande. -le viene algo a la mente. -Creo que tengo algo perfecto para ti, querida salvadora mía. -fue hacia uno de los baules y mientras buscaba algo habló. -Por cierto, creo que no se vuestros nombre y si los sabía se me han olvidado. -confesó.

-Yo soy Hera, y mi hermano en Ken.

-Losey, ¿cierto?. -rió. -Fue la Brigada de vuestro padre quien me atrapó, me tienen un cierto odio.

-Ya no te va a molestar más, está muerto. -dije llevándome la mirada de los dos hombres. La de mi hermano era una estilo ''no digas esas cosas'' y la de Shanks era algo como ''increíble'' -Yo lo maté. -finalicé sin miedo.

-Increíble, fascinante, perfecto. Vas a empezar en el mundo de los piratas con buena reputación, y vas a estar en MI tripulación, me gusta. -se puso en pie dejando el baúl abierto mientras venía hacia mí con unos botines. -Creo que son de tu talla. -se arrodilló enfrente de mi. -Son altos y varoniles, respetarán tus pequeños pies a la perfección y te harían más alta. ¿Puedo?. -dijo mirando mis zapatos negros. Yo asentí y subí levemente mi vestido, dejando ver con claridad mis zapatos con tacón, aunque no era mucho.

Shanks me quitó los zapatos y me puso los del baúl, creo que eran del viejo Jenkins cuando era joven.

-Ya están. -dijo agarrando mi mano y colocándose de pie haciendo que me levantara.

Todo era diferente, definitivamente era más alta y los zapatos me venían a la perfección.

-Me gustan. -dije con calma.

Mi hermano se puse de pie, junto a mi, llegaba a su altura, pero aún así, Shanks nos sacaba unos centímetros a los dos.

-Es increíble, ¿puedes andar con eso? -dijo mirando mis zapatos. -Te hacen más alta y por alguna razón no delatan tu verdadera altura.

Shanks río.

-Es la magia de los Decianos. -habló Shanks. -Aún falta ropa, y también para ti, Kenny. No puedes ir como si fueras un chico de buena familia. -lo miró de arriba a abajo. -Y espero que sepáis que necesitareis otro nombre.

-Había pensado en eso. -confesó mi hermano. -Seremos los hermanos Lavoie, conocidos como H -me señaló. -y K. -se señaló. -Las iniciales de nuestros nombres.

-¡Espléndido! H.Lavoie y K.Lavoie. Me gusta. ¡Me gusta! Suena genial. -comenzó a reír Shanks. Este hombre estaba loco. -Necesito buscaros algo de ropa, la de Ken será más fácil, cualquier cosa le vale, pero para ti, Hera, será complicado, tenemos que esconder esos pequeños hombros y hacerte mucho más grande. -abrió los brazos. -Seréis unos temidos piratas. Juntos dominaremos las infectadas aguas de Waterseven, el océano lleno de marines. -finalizó con una sonrisa.

La Tierra de Runaan.Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora