Por un beso -♡Ae Y Pete♡

Capítulo 33 (Secuestro)

Narra Pete:

¿Por qué Ae no me contesta los mensajes?

Lo llamo, y no atiende.

Le pregunté a Pond sí estaba en su apartamento, y él me dijo que no, que no había vuelto de la universidad.

Estoy sentado en el sofá tratando de pensar en donde estará Ae, él y yo nos enviamos mensajes cuando llegamos a nuestros apartamentos después de la universidad, y no entiendo por qué no me responde.

¡¿Mi padre tendrá algo que ver con esto?!

Sí me entero que ese hombre le hizo algo a Ae, juro que no se lo voy a perdonar.

(Abren la puerta principal)

—Hola, Pete — la voz de Tin me saca de mis pensamientos, y cuando observo hacia la puerta ahí estaba, viniendo hacia mi con una sonrisa forzada.

—Hola, Tin... — lo saludé mientras él se sentaba a mi lado en el sofá.

—¿Como estas? — me preguntó con la misma sonrisa demasiado falsa.

—Yo estoy bien, pero tú te miras como sí acabaras de cometer un delito, y tratas de aparentar que no pasó nada. ¿Que me estás ocultando? — me coloqué de lado en el sofá para encarar a mi mejor amigo que ahora estaba tragando seco.

—Nada, mi mejor amigo que quiero tanto... Y que sabe que yo nunca le haría daño — dijo pellizcando mis mejillas con un poco de fuerza.

Esta bien, eso fue demasiado extraño.

—Tin... Antes cuando decías una mentira lo hacías como sí nada, ahora parece que no aguantas la presión.

Me quité sus manos de mi cara, y lo miré con mucho enojo.

—¿Que hiciste, Tin? Habla ahora — dije acercándome más a él en el sofá.

—Traga seco — nada... Sabes... — me miro como sí quisiera decirme algo.

Me estaba tratando de decir algo.

—Ae, te ama mucho — me dijo dándome una palmadita en el hombro.

Por alguna razón sus palabras me hicieron sospechar que Ae tiene que ver con la actitud de Tin.

—Será, mejor que me des una explicación de lo que te pasa, o sino yo mismo la buscaré — dije ya con mi paciencia llegando a su límite.

No tengo mucha paciencia.

¡¿Que es lo que me oculta?!

—Pete, ¿Tú...?

(Suena su teléfono)

—Jejeje... Tengo que contestar — me dijo con una sonrisa, agarrando su teléfono de su bolsillo, y yendo hacia fuera de mi apartamento.

Por un momento, miré la pantalla de su teléfono, y cuando leí de quien se trataba, sentí un dolor en mi pecho.

Era Ae.

Así que él llama a Tin, pero a mi no me responde los mensajes, ni llamadas. Eso significa que miró mis mensajes, más no los quiere contestar.

—¿Hola? ¿Ae?

Aunque no lo crean, estoy escuchando la conversación de Tin, a través  de la puerta del apartamento.

—Si... Estoy hablando con Pete... ¡¿Cambio de planes?!

¿Cambio de planes? ¿A que se refiere con cambio de planes?

¿Tin y Ae tienen un plan?

—¡Idiota! ¡¿Estas loco?! ¿Quieres que tu noviazgo con Pete termine? Porque eso es lo que vas a ganar con ese trato que hiciste... Si... ¡No! Olvídate de mi.