21. Hotel

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Me encontraba recién levantada

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Me encontraba recién levantada. Me había quedado quieta mientras me miraba en el espejo. Mis pensamientos inundaban mi cabeza, debía tomar una decisión, ya que había soñado con Jonathan.

Con más claridad, había soñado que hablaba con él y que ambos volvíamos a ser íntimos. Había leído múltiples veces que soñar con algo era signo de preocupación, como cuando sueñas con algún examen al no saber la nota de este. Tenía la dirección del hotel a donde estaba, y solo tenía clara una cosa.

No me importaba que ya no sintiera esos sentimientos románticos hacia él, solo sabía que necesitaba hablar, necesitaba recuperarlo, habíamos pasado demasiado juntos como para tirarlo todo por la borda.

—Nancy, mamá te ha llamado cien veces para ir a desayunar ¿Estás sorda?

La voz de Mike interrumpió mis nerviosos pensamientos, miré en su dirección y asentí con una pequeña sonrisa.

—¿Ha pasado algo con Robin?

Mi hermano a veces era muy dulce, no podía evitar sonreír cada vez que se preocupaba por mí, tampoco podía evitar darle un gran abrazo al recordar su apoyo con Robin.

—No, es Jonathan, se lo expliqué, pero no se lo tomó bien. Quería hablar con él antes de que se fuera.

—Sé la dirección del hotel, si quieres podemos ir, quería hablar con Will.

—Gracias, Mike

Los dos bajamos a desayunar, mis padres hablaban animadamente. Nosotros comimos algo y decidimos irnos.

—Antes pasaré por casa de Robin, me gustaría que ella también estuviera. Quiero ser sincera con él.

Mike asintió, parecía estar de acuerdo conmigo, arranqué el coche en dirección a su casa, la había llamado antes de salir así que, ya debía estar preparada.

Al verme llegar entró al coche, se disponía a darme un beso cuando vio que Mike estaba en el asiento de atrás.

—No te cortes— dijo Mike con una pequeña risa traviesa.

—Mike sabe la dirección del hotel, y me dijo que quería ver a Will.

Robin asintió pensativa, se había puesto un conjunto básico que le quedaba genial, siempre había pensado que Robin se veía bien con todo lo que llevara.

Arranqué el coche y fuimos al hotel, no era muy lujoso, lo contrario. Bajamos y decidimos entrar, parecía un lugar antiguo, bastante vintage.

—Jonathan tenía una habitación aparte, la 173— nos informó Mike.

Ambas asentimos y nos despedimos de él. Mike se bajó en una planta de ascensor diferente a la nuestra.

Al bajar noté como los nervios actuaban de nuevo.

—Tranquila Nancy, todo saldrá bien. Entras tú primera y luego yo.

La sonrisa de Robin consiguió que los nervios desaparecieran de mi cuerpo. Asentí y respiré hondo. La habitación parecía estar abierta, así que entré.

Eclipse azulado | RonanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora