En el ojo de la tormenta || Kacchako

2.Lluvia sobre el pavimento

Los días se convirtieron en meses y esos mesen en años, en donde su relación fue a más, las pequeñas peleas no importaban pues ambos tenían un carácter fuerte pero sabían reconocer sus errores y lo solucionaban lo antes posible, tampoco habían quitado su atención en sus objetivos, convertirse en heroes profesionales y lo estaban cumpliendo juntos, el nombre de Uravity y Ground Zero resonaba fuertemente. Sin importar que tan duro fuera el trabajo conseguían equilibrarlo, como el momento en que tuvieron su primera vez.

Dos años y medio después de graduarse de la academia de héroes y ambos en una agencia para la cual trabajar se veían ocasionalmente en días libre o después del trabajo, ese día Bakugo había conseguido salir temprano después de una misión exageradamente agotadora, quería descansar y que mejor manera de hacer que en los muslos de su novia que solía usar como almohada, la idea de sacaba una sonrisa, sabía que ella estaba en el apartamento donde vivía pues era su día libre, él no había podido avisarle que la visitaría pues había roto su celular el caer del edificio hace unas hora, pero imagino que no habría problema, llego al recinto abriendo la puerta con la llave que tenía, las luces están encendidas pero no veía a la chica, se detuvo en la entrada a sacudir su ropa de las gotas de agua que habían caído ligeramente cuando comenzaba a llegar, escucho la risa de la castaña en la cocina junto a otra risa que detestaba tanto reconocer.

-Basta... Deku-kun- se reía intentando escapar del chico de pelo verde que le hacia cosquillas mientras salían de la cocina

Se quedó estático ante la escena, nunca espero verlo.

-Kac...chan-dijo Midoriya al darse cuenta de que estaba parado en la entrada mirándolo con los ojos llenos de ira

-¿Bakugo-kun...?- hablo la chica mientras voz se apagaba

Lo normal cuando el rubio se molestaba es que empezara a gritar cuanta cosa se le viniera a la mente, pero esta vez era diferente estaba quieto con los ojos sombríos y el cuerpo notablemente tenso, Uraraka supo que algo estaba mal, muy mal, una alerta de peligro se encendió en ella.

-¿Qué mierda haces aquí?- miro a Deku al hablar con una voz casi gutural

-Deku-kun sal por la ventana de atrás, yo lo distraigo- susurro la castaña

-¿De qué hablas? Ese no parece Kacchan ¿Cómo me voy a ir?- respondió el chico

-No me hará nada, vete mientras puedas- susurro la chica

Una explosión se escuchó en el puño cerrado del rubio que se había estampado contra la pared cercana. Ambos temblaron. Izuku miro a Uraraka y asintió, salió corriendo a la venta escuchando los fuertes pasos de Bakugo detrás de él, logro mirar mientras activababa su One for all para escapar, como Ochako se aferraba al chico frenándolo de que él también saltara.

-¡Suéltame, Maldición!- le grito a la chica

-No, comenzarás una pelea- lo sujeto más fuerte de la espalda, él se seguía removiendo para que lo soltara- Tienes que calmarte-

-¿Calmarme? Y una mierda-

-Creí que ya habías superado eso- le dijo ella comenzaba a molestarse

-¿Superado?- se quedó quieto- ¿y tú? ¿Ya lo hiciste?-

Ella no respondió solo lo soltó, él se giró para mirarla y de inmediato supo la respuesta.

-Te dije que no sería segunda opción de nadie- dijo, con un tono que ella nunca espero escuchar en él, se notaba el dolor y la frustración

Bakugo paso de largo sin mirarla saliendo a toda prisa con las manos hechas puños en sus bolsillos mientras su mandíbula se apretaba con fuerza, ni la lluvia fría calmaba el calor de la ira creciendo dentro de él, quería explotar lo primero que se le cruzara en frente, absorto por completo en sus pensamientos que le daba vuelta una y otra vez a las imágenes que acaba de presenciar, ¿Por qué se torturaba así? Sintió unos brazos apresarlo con fuerza por la espalda, se detuvo de inmediato

-Suéltame- dijo frio

-...No- escucho la voz quebrada de Uraraka a la par que sus manos se aferraban temblorosas a él

-Tenías que ir al otro lado, te equivocaste de persona-

-...No, no lo hice- notaba su aflicción-...lo siento... lo siento- decía contra la espalda del chico

-¿Por qué? ¿De qué te estas disculpando?-

-Por todo... por lastimarte tanto tiempo... lo estoy intentando...realmente lo hago- decía entre sollozos- tu siempre queriéndome y yo siempre intentando... pero... sé que esto es real, lo que siento por ti es real Bakugo-kun... te quiero tanto-

Se quitó las manos de la chica y se giró para mirarla hecha un desastre, con la misma ropa ligera con la que estaba antes en su departamento, sin zapatos y empapada por la lluvia, haciéndolo sentir una mierda por hacerla llorar así pero al mismo tiempo sintiéndose extrañamente feliz por provocar tantos sentimientos en ella.

-Repítelo- le dijo

Ella se quitó las lágrimas de la cara junto a la lluvia que la mojaba.

-...Te quiero Bakugo-kun... te...- su voz no daba mas

La abrazo, con firmeza mientras ella se acurrucaba contra su cuerpo en busca de calor.

-Eres una tonta- le dijo

Se quitó el abrigo colocándoselo a la chica para cargarla de regreso al departamento, la castaña se abrazó con fuerza al cuello de su novio dejando ligeros besos en este y parte de la barbilla. Al llegar poco le importo quitarse los zapatos, o que estuvieran mojando todo el suelo, nada le interesa más en ese momento que la mujer que llevaba en brazos prácticamente lanzándola a la
cama para después colocarse sobre ella.
-¿Sabes lo que va a pasar ahora?- pregunto mirándola temblar

-No, no lo sé, ¿Por qué no me enseñas?- intento sonar atrevida pero haber llorado tanto no se lo permitía

Bakugo la beso demandante de sus labios, le quitó el abrigo que ya había mojado gran parte de la cama y acarició el cuerpo de la chica, desde los muslos pasando por su cintura, el abdomen, sus hombros y llegar a hasta su rostro, ella le quitó la playera, no se dejaría vencer tan fácil.

-Después de esto ya no pensarás en nuestro ningún hombre que no sea yo- sentenció

-Espero que seas tan bueno como dices- desafío la chica

-¡Me asegúrate de que mañana no camines!- amenazó confiado quitándole la blusa

Y así, con sus cuerpo calentándose después de fría lluvia fue la primera vez que hicieron el amor, la primera vez que Uraraka escucho un "te amo" de la boca de Katsuki y pudo corresponderle, también fue la primera vez que la castaña entendió que no era bueno provocar al rubio antes de sexo pero aún con eso no lo dejaría de hacer, igualmente fue la primera es vez que le escuchó susurrarle "Ochako" y debía admitir que se oía muy bien en la voz del chico, así fue como ella también le dio muchas primeras veces a él, sin miedo a lo que pudiera venir pues sabía que estaban juntos y lo afrontarán de igual forma.

Desde ese momento las cosas se movieron mucho más rápido de lo que esperaban, como Bakugo siendo colocado como el héroe número dos pero por encima de Izuku, aunque debajo de Shoto, ya era un logro muy importante, cosa que cambio el siguiente año pero ya no es como si al rubio le interesara mucho. Igual el mudarse juntos pasó sin mayores contratiempos, una tarde donde estaban los dos juntos en el departamento de la chica mirando una película romántica que tanto le gustaban a ella, Bakugo dijo que sería conveniente vivir juntos así compensaría el tiempo que no podían estar juntos por el trabajo a lo que la castaña asintió aceptando, sin darle mucha importancia pues tenía toda su atención en la película que veía acostada en las piernas de su novio, lo siguiente que supo es que al día siguiente ya están guardando sus cosas para mudarse al departamento del chico.

También vino la parte de conocer a sus padres, primero los de Bakugo que se resumió en una bonita plática sobre que Mitsuki quería nietos lo antes posible y el agradecimiento a Ochako por soportar a su temperamental hijo, después los de Uraraka donde ella esperaba que Katsuki llegará con su padre y le dijera "Su hija también me dice papi" como en la amenaza dicha un día antes, cosa que no paso, sólo tuvo a un Bakugo muy sereno hablando de con mucha confianza frente a ellos, sorprendente.