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como estamos en septiembre, por lo que un mes como éste pero hace tiempo(aka 2017 pq en ese año publiqué esto) fue el primer beso de richie y eddie, por lo que este es un "especial" para agradecer todo el apoyo que he tenido de parte de ustedes. los amo mucho, no saben cuánto agradezco que me lean a pesar de que no actualizo muy seguido.
kisses contará sólo con 10 capítulos y un epílogo, así que pronto terminará esta historia.

la noche del 5 de febrero richie se encontraba sobre el techo de la casa de su novio, observando las estrellas con él sobre sus brazos.

la espalda de Eddie se encontraba recargada en su pecho mientras estaba sentado en su regazo, causándole a richie una delicada sensación que sólo era buena si venía de su parte.

tal vez era amor.

eddie definitivamente le había enseñado muchas cosas a lo largo de los años; la suma de fracciones, cómo copiarle en los exámenes sin ser descubierto por la maestra, lo bien que se puede sentir un abrazo cuando estaba en sus peores momentos, y el cómo se siente enamorarse por primera vez.

eddie era la causa de su felicidad a diario.

-¿en qué piensas?- preguntó al girar su rostro mirándole sobre su hombro, batía sus pestañas repetidamente logrando sacarle una sonrisa por lo bonito que se veía al hacer eso.

¿podía alguien dejar sin aliento a una persona sólo por lo precioso que se ve? porque cada que lo veía, richie sentía que dejaba de respirar y su corazón se detenía.

-la noche es bonita.

-lo es.- eddie se gira nuevamente hacia el frente, simplemente mirando el cielo sobre ellos.

richie no podía apartar la vista de él, quería quedarse todos los malditos segundos de la vida solamente observándolo, podría hacerlo y no se aburriría.

eddie era como una pequeña pieza de arte que pocas personas tenían el privilegio de verlo, porque todos querrían tenerlo con ellos.

-pero no tanto como tú.

al soltar ese simple comentario, las mejillas de eddie se tiñeron de un rosado bastante bonito. richie rió tiernamente al verlo así de sonrosado.

-¿por qué sueltas cosas como esas tan de repente?- se giró hasta quedar con sus rostros viéndose, sus piernas quedando a cada lado de los muslos de richie, aún sentado en su regazo causando un poco de fricción accidental.

-porque eres precioso, y mereces todo eso, y m-más, ah- jadeó al terminar su frase; eddie seguía moviéndose inquieto por el nerviosismo que le causaban las palabras de su lindo novio.

confundido, eddie ladeó la cabeza sin comprender porque richie soltaba esos sonidos. dejó de moverse un tanto preocupado, con la idea de bajarse de su regazo e inspeccionarlo por si su salud era la que estaba mal.

-¿todo bien, rich?

el muchacho de lentes asintió con un suspiro, sus manos estaban a cada lado de su cadera sobre el techo para no caer, y su cabeza echada para atrás, dándole una amplia vista de su cuello a eddie.

el menor aún no se bajaba, por lo que sintió un pequeño bulto apenas persibible debajo de él y comprendió el por qué de la actitud de su novio. de forma traviesa, se acomodó mejor y empezó a dar pequeños saltitos imitando un berrinche.

-richie, dime más cosas bonitas.- abultó su labio inferior creando un puchero muy lindo a la vista de richie, quien no sabía de las verdaderas intenciones de eddie.

-tú lo eres.- respondió entre jadeos, sus brazos temblaban detrás de su espalda sin poder mantenerse sentado y terminó cayendo sobre su espalda.

eddie rió dulcemente y se acostó sobre él, alcanzando su quijada para dejar pequeños besitos.

-sé lo que provocó en ti, richie, pero no haremos nada que tú no quieras.- aclaró en un susurro, batiendo sus pestañas una y otra vez, sonriéndole con adoración al chico debajo de él. su dedo índice bajando y subiendo demasiadas veces de manera lenta sobre su pecho, proporcionándole tranquilidad.

-¿entonces por qué me haces esto?

-me gusta sentirte.- confesó eddie, con mejillas rosadas y ojos brillantes, sin siquiera poder dirigirle la mirada por la vergüenza que le daba confesar tal cosa.

fue el turno de tozier de soltarse riendo, claramente burlándose de la timidez de su novio.

metió su mano por debajo de la camisa del menor y acarició su cintura desnuda, disfrutando de la suavidad de la piel de su novio.

-actuas tan tímido ante algo que ya me has dejado en claro muchas veces cuando tu madre no está en casa, eds.- sube y baja sus cejas de forma pícara, provocando que salga una carcajada de los labios del otro.

richie se le unió a los segundos, ambos abrazándose sobre el techo, bajo la presencia de las estrellas y la luna.

eddie paró de reír, deteniéndose para admirar a richie siendo feliz. él sabía que su corazón pertenecía ahí, sin importar qué o quién.

-¿pasa algo?- preguntó con una pizca de miedo, eddie simplemente se limitó a negar con la cabeza.

-te amo.

la sonrisa del chico de lentes se hizo presente en su máximo esplendor, su felicidad era tanta en ese momento que él podría jurar que nada más lo haría igual de feliz como eddie lo hacía estando a su lado.

-te amo más.- finalmente respondió, inclinándose un poco para poder alcanzar los labios de su novio y de forma dulce los unió, saboreando el sabor de fresas con chocolate que anteriormente habían comido antes de subir.

la noche era linda, pero la razón definitivamente eran ellos.


voy a editar esta historia antes de siquiera terminarla pq hay mucha redundancia ahre

por cierto, como estoy feliz por todo el éxito que está teniendo esta historia y aparte de q últimamente mi autoestima está un poquito altita he decidido que quiero que me conozcan jajs

q tal, mi nombre es Melina jajs y si quieren ser mis amixes pueden, con mucho gusto les responderé, aunq no muy rápido pero lo haré💜

LOS AMO MUCHO, MUCHAS GRACIAS POR LEER, VOTEN Y COMENTEN PORQUE ES LO QUE MÁS AMO
cuídense, mucha suerte en su escuela o trabajo, nos leemos después.
-mels.

KISSES キス REDDIEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora