Caminos Tortuosos

1.2K 140 92
                                    

❤️

Busqué una mesa alejada del escenario, no necesitaba afectar mis oídos. El club de fans había llegado y gritaban de miedo y eso que la banda no estaba presente, no quería imaginar despues.

Una joven muy hermosa vestida con un traje muy original, nos entrego el menú. Two ni siquiera lo miro, pidió como si ya supiera el menú.

- Queremos dos bebidas dulces y el pescado marinado "Pinco" que es muy famoso aquí, uno de mis amigos me dijo que tenían el mejor servicio, le faltó agregar... Hermosas damas - le sonrió arrugando la nariz, casi vómito, olvidaba que sus trucos de seducción apestan. La chica debió estar desesperada pues en ella funcionó.

- ¡Oh! Visitantes nuevos, déjenme recomendarles la mesa de enfrente, les aseguro que les gustará el espectáculo, además las bebidas corren por cuenta de la casa por su visita, esperamos que disfrute de nuestra atención. - estoy jodido.

- ¡Hurra! Gracias hermosa...

- ¡Muy amable! - dije. Nos llevo a la mesa frente al escenario, no estaba nada de acuerdo, ver a Two tan emocionado no me dejo más opción.

No tardaron en atendernos y eso me sorprendió, Corea era famosa por su rica comida y también por qué su servicio era lento, en este caso todo llegó muy rápido. Probé el pescado marinado, no pude evitar compararlo con él de "Don Perfecto" sabía casi igual, parece que aquí todos cocinan con la misma receta, no importa estaba delicioso.

Two estaba tan animoso que pidió que le trajeran soju, nunca lo ha probado, hoy se sentía valiente y quería hacerlo, yo le advertí que lo tomara con calma pues era fuerte, el señor se justificó diciendo que estaba comiendo, eso le ayudaría a mantenerse bien. ¡Anda pues! dije entre mí.

Al terminar la comida, la misma camarera dispuso de un ayudante para que nos desocapara la mesa, sugirió un postre que era una delicia según ella y que no debíamos perdernos. Two no lo dudo ni un momento pidió para los dos, junto más soju. Al parecer él único sensato fui yo, un capuchino frío es lo único que tomaré.

- Es domingo, no puedes tomar algo más fuerte que café, estás arruinando mi reputación...

- Para que después despierte en medio de la playa en ropa interior, no gracias. Ya aprendí la lección. Al menos uno de los dos debe ser responsable, tú dejas mucho que desear...

- ¡Maldito rencoroso! Yo terminé peor que tú, no te sirve de consuelo - lo fulmine con la mirada - Un trago tampoco te hará mal...

- No me apetece, mañana tengo una conferencia y tengo que estar al cien.

- Amargado, olvida lo que dije. Mira parece que ya van a salir los de la banda - es vergonzoso ver a Two emocionarse como las fans, por suerte las ubicaron lejos de mí.

Un chico alto de cabello azul fue el primero en salir, se sentó junto al teclado, las chicas que estaban al otro lado del escenario como agrupadas, empezaron hacer un poco de alborotó, el segundo en aparecer fue un rubio de sonrisa traviesa, aventando besos a las chicas logrando alborotar de más, era el baterista enseguida tomo su lugar.
Salieron dos más, uno castaño, el otro traía gorra y cubre bocas del mismo color negro, lo que evitaba que pueda verlo bien. Los dos no saludaron a las chicas, ellas si que gritaron como locas al verlos, él más alto saludo a sus compañeros y empezó acomodar sus hojas en el atril, parecia que era el cantante. Él que estaba completamente cubierto tomó la guitarra y empezó afinarla, parecía que la banda está completa, el de gorra de repente dejo la guitarra y salió del escenario dejando un griterío tras de él, parecía ser el que provocaba todo el desasosiego que estaban armando las chicas.

Kilómetros de AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora