♚Heredero | Diabolik Lovers~Yaoi♚

🕆Capítulo 8🕆

Advertencia: Los personas de Diabolik Lovers no me pertenecen, créditos a los creadores de esta fabulosa y hermosa serie. Al igual que los personas, las imágenes y gif que aparezcan en la historia tampoco me pertenecen.

⚊⚊⚊⚊⚊⚊⚊⚊⚊⚊⚊⚊⚊

Pov. Hiroyuki

Mi plan no iba ser nada fácil, por lo que padre me ha contado mis hermanos se encuentran por todo el Instituto y va a ser complica hacer algo contra Yui, poco a poco voy ganándome la confianza de ellos, pero no lo suficiente para que no me vayan hacer algo cuando ataque a la humana sin valor.

Padre me había comentado sobre sus hijos adoptivos, sobre uno en específico que se dio cuenta del plan malévolo de la humana, ese Mukami sabe las intenciones de la humana y necesitaré su ayuda para el plan, está noche pasaré un buen rato con la humana.

♞FlashBack♘

—¿Los chicos saben del engaño de la humana?— pregunto Hiro arqueando una ceja

—No, todos están ciegamente enamorados de ella— gruñió Karlheinz con el ceño fruncido —Excepto Kou Mukami, uno de mis hijos adoptivos, él es el único que sabe la verdad de esa humana— contó

♘Fin del FlashBack♞

Debo de buscar a ese Mukami, necesito su ayuda urgentemente, pero antes debo de librarme de Reiji.

Estábamos en su salón, el profesor de ciencia estaba explicando algo que yo no entendía aún, pero que al parecer Reiji si entendía y prestaba atención, miraba a mi al rededor buscando a cierta persona, sé que está un Tsukinami en está clase, el hermano mayor de Shin era y ahí estaba definitivamente.

Carla Tsukinami, el mayor de su familia, un joven de al rededor de dieciocho años de cabello blanco con puntas rojizas y ojos ámbar brillantes, debo de admitir que es muy guapo y sexy. Por lo que tengo informado es una persona inteligente y razonable, a diferencia de su hermano, Carla jamás subestima a su oponentes o víctimas y se toma su tiempo para jugar psicológicamente con ellos, es un desacuerdo que tiene con su hermano menor. Me llama mucho la atención en como es de misterioso, frío y muy difícil de describir por todo el mundo, me llama mucho la atención.

Sentí la mirada ámbar del fundador sobre mi y sin darme cuenta teníamos nuestras miradas cruzadas, sonreí de manera coqueta y le guiño un ojo mientras que lo miraba detalladamente, vi como con su mano bajaba un poco su bufanda y me sonreía de una manera sexy, no pude evitar ponerme rojo como un tomate, o como la cabeza de menstruación de Ayato.

—¿Qué haces?— me pregunto Reiji en un susurró mirándome seriamente

—Sólo miro a un chico sexy~— sonreí de manera juguetona sin dejar de mirar a Carla

Escuche como Reiji soltaba un gruñido por lo bajo y seguía prestando atención, seguía mirando a Carla de una forma seductora, es muy sexy y es una pena que no tenga su misma edad o tener una edad cerca a la suya, ya encontraré una forma de crecer más rápido y terminar con todo esto.

Rápidamente me baje del regazo de Reiji y me escabullí por el salón, Reiji intentó tomarme de la muñeca para evitar que me fuera de su lado, pero fui más ágil y me escape, me escabullí hasta llegar a donde se encontraba Carla, quien me miraba con su mirada helada que me mata.

—Nos vemos cariño~— me despedí para luego escabullirme fuera del salón

Ya me libre de Reiji y aún faltan dos horas para que inicie el primer receso, ya estoy informado en como funcionan las cosas por aquí, padre si que sabe las rutinas de sus propios hijos, me dejó impresionado, pero bueno, después de todo no es un mal padre y a la vez lo es.

Ahora tengo un problema y es que no tengo ni idea en donde se encuentra el Mukami, comencé a pasear por los pasillos fijamente por las puertas si estaba el Mukami, pero no lo encontraba y tuve la mala suerte de que Ayato me viera, tuve que correr para esconderme y eso hice, me escondí en la enfermería.

—Estuvo cerca— murmullo por lo bajo aliviado

Me acerqué a una camilla para sentarme y descansar un poco, pero me quedé sorprendido al ver un papelito donde estaba anotado el número de Kou Mukami, reconozco esos números y sé que son de padre, gracias viejo.

—Muy bien, ahora llamar— susurró con una sonrisa

Marque el número del papelito y puse llamar, estuvo sonando un par de segundos hasta que atendio.

—¿Hola? ¿Quién habla?—

—Habla Hiroyuki, quiero hablar con usted en la azotea de la escuela, es sobre la humana de nombre Yui Komori— le explique para luego cortar la llamada

Guarde mi celular y me salí de la enfermería, me dirigí a la azotea y me costó encontrarlo, maldita escuela nocturna, me quedé sentado en el suelo esperando a que iniciará el receso, mientras tanto me tome una leve siesta.

{.../...}

Poco a poco fui abriendo mis ojos y al abrirlos me encontré con un chico mirándome curiosamente.

Kou Mukami, es el segundo de sus hermanos adoptivos los Mukami, un joven de al rededor de diecisiete años de cabello rubio y ojos celestes, que cuando lee el corazón de alguien es rojo brillante, es lindo. Parece ser un chico amable, pero también es alguien egoísta y todos los que lo rodean están a su merced, usa su atractivo como su principal herramienta, aunque llega a ser alegre y despreocupado, el único amor que llegó a conocer fue el amor fraternal, que es su amor y cariño hacia sus propios hermanos los Mukami, que dulce.

—Buenas, Kou Mukami— lo salude mientras me levantaba

—Are~Are~ ¿Qué hace un pequeño en un Instituto nocturno?~— pregunto con un tono juguetón y burlón

—Pequeño tu abuelo— gruñí —Como sea, no te llame para esto sino para hablar sobre la humana Komori— me crucé de brazos

Kou al escuchar las últimas dos palabras se puso serio y miro al menor, Hiro sonrió levemente al ver la seriedad del Mukami, ya tenía a un aliado para deshacerse de la humana, uno menos, faltan once vampiros para salvar.

█▆▅▃▂ ▂▃▅▆█

❛Todo después de un tiempo deja de doler o deja de importar.❜

█▆▅▃▂ ▂▃▅▆█