Los Hijos de Las Highlands.

Capitulo 16: Vida

Castillo MacClairs.

El silenció se expandió por el castillo.

Los guerreros cesaron en su entrenamiento, los caballos dejaron de relinchar, las sirvientas soltaron sus cestos de ropa. Y todos, absolutamente todos, se quedaron mirando al grupo de mujeres vestidas de blanco, que atravesaba el patio principal del castillo.

La sensación de miedo recorrió cada rincón del castillo, de la aldea y de aquellas tierras. La última vez que las hermanas de la luz habían pisado su clan, una feroz guerra se acercaba y a pesar de ganar la batalla, de lograr vencer a la oscuridad, fue una lucha que se llevo a muchos por delante.

-Papa -Dougal bajo su espada, mirando tras su padre.

Niaj se dio la vuelta y observó a las hermanas, todas ellas caminando tranquilamente, con decisión. Miró al castillo y vio a su esposa asomada a la ventana, con la mirada perdida.

-Vienen por ella -Lachlan se paró tras su madre.

-Mama -Catriona entró a la sala y ambos se giraron hacia ella -Tengo que irme.

Sienna sintió las lagrimas agolpándose en sus ojos, pero se forzó a no dejarlas salir. El día en que su hija vino al mundo, supo que estaba destinada a hacer grandes cosas, pero también que llegaría el momento en que tendría que dejarla partir.

-¿Es por ella? -Lachlan pregunto a su hermana, sabiendo ya, que por algún motivo, su madre y él no podían ver a la hermana de la oscuridad.

-Viene por mi -Catriona miró a su madre y caminó hacia ella -mama.

-Vas a estar bien -Sienna se arrodillo, quedando ante su hija -Van a cuidar de ti.

-Lo sé -y la niña alzó la mano y la colocó en la mejilla de su madre -Volveré a casa.

Y se abrazaron, justo en el instante en que Niaj se paraba en la puerta de la sala, seguido por su segundo hijo. Miró a su esposa, abrazando con fuerza a su hija, vio su mirada, posándose en la de él y apretó los puños.

-No se la llevaran -Niaj dio un paso adelante.

-Deben hacerlo -Lachlan miró a su padre, con la tristeza reflejada en su rostro -Aquí no está a salvo papa.

-No -Niaj se acercó a ellas mirando a Sienna.

-Papa -Catriona se giró hacia su padre y tomo su mano -Tengo que irme.

En un absoluto silenció, los cinco salieron a los escalones principales del castillo y se pararon ante las Meigas, que los observaban en silenció. Una de ellas miró a Sienna y asintió, después dio un paso adelante y extendió la mano.

Catriona MacClairs, tomo su velo y lo alzo, tapando su cabello, después bajo los escalones y tomo la mano de la mujer, girando el rostro para mirar una última vez a su familia.

Y Sienna observó como su hija se marchaba, repitiendo su historia.

Pero sabiendo que regresaría a casa, después de haber cumplido su destino.

Niaj abrazó a su esposa, viendo como se alejaban, mientras las lagrimas descendían de sus ojos.

-La protegerán ¿Verdad? -preguntó en voz baja, apoyando la barbilla en la cabeza de su esposa.

-Lo harán -Sienna cerró los ojos con fuerza -Y ella las protegerá a ellas.

Montañas Dunaat Head

-¡Aidan! -Kyle entró a la cueva y se paró, viéndolos.

El resplandor de un rayó ilumino la cueva, solo unos segundos, para que después el fuerte sonido del trueno recorriera cada lugar.