Capítulo 8: El Príncipe Comprende El Plan De La Noble Mujer

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Después de que la tetera comenzó a hacer ruido sobre el fuego de la lámpara, virtio el agua caliente en la tetera que ya contenía algunas hojas de té. Luego, volteo el reloj de arena, Rachel cubrió la tetera... antes de hurgar en una de sus cajas de madera.

"Tengo un problema. ¿Debería comer galletas, o debería ir con pastel seco?"

Colocando el dorso de su dedo debajo de sus labios, Rachel comenzó a preocuparse y hacia que su rostro se viera bien presentado, la fría mirada del Príncipe Elliott se detuvo.

"....Rachel. En este momento, ¿Eso realmente es un problema?

"¡Mi alteza! Estando en está etapa de vapor, ¿Acaso hay algún otro problema más urgente?"

Habían pasado algunos días, y lo que vio Elliott cuando regresó a la prisión con la cabeza fría fue a Rachel preparándose elegantemente para la hora del té.

No importa cómo lo mires, ella no estaba reflexionando en absoluto.

"De ninguna manera, ¿no tienes nada más en que  pensar?"

Hacia las palabras del Príncipe, Rachel se llevó la mano a la barbilla y pensó por un momento.

"¡Ah! ¿Todavía no he elegido una taza?"

"¿No me importa eso en absoluto?"

"Ah, esto no es bueno, toda el agua ha caído mientras estaba pensando"

"¡No pierdas el interés en mi pregunta! ¿No puedes escucharme correctamente?"

Cuando escucho los gritos del ignorante Príncipe, Rachel hizo una sonrisa alegre cuando el aroma de sus preparaciones le hizo cosquillas en la nariz,  probó un pedazo de pastel de chocolate de un solo bocado, cargado con muchas frutas secas, y suspiró placenteramente después de servir y beber una taza de su té recién hecho.

"Después de todo, las nueces y las bayas junto al té de león es lo mejor para comerlo con pasteles... un gran acompañamiento"

"Oye, voltea a verme cuando estés satisfecha. Bastarda, ¿hasta qué punto piensas ignorar mis comentarios?

Al escuchar las palabras de Elliott cuando su tono se convirtió en magma hirviendo, Rachel miró al Príncipe con el tenedor todavía en la mano.

Rachel se tragó lo que tenía en la boca, erizando las cejas, y luego señaló intensamente a Elliott con el extremo de su tenedor.

"Su Alteza... ¡No debe permitir que sus asistentes se burlen de usted por eso! ¡Tales tipos groseros deben ser intensamente señalados, y corregidos! Lo entiende? ¿Se lo prometes a Onee-san?

"¡¿Quee!?"

Mientras le predicaba a su ex novio con una cara engreída, Rachel se sirvió una segunda taza.

Hacia la inusual respuesta que obtuvo, Elliott quedó atónito y luego, cuando sus sentidos volvieron a él, una vena azul apareció en su frente.

"¿Debería un prisionero estar teniendo un estilo de vida para sí mismo donde pueda parlotear una línea de estupideces tan extremadamente elegante ¿¡Eh!?"

"¡Pues bien! Te haré saber que estoy bien despierta. Incluso si estuviera dormida hablando, los gritos de Su Alteza serian suficiente para despertarme"

Rachel regresó por cada comentario.

"¡Ya es suficiente, bastarda! ¡No solo has intimidado a Margaret desde las sombras, sino que ahora eliges tontamente negarte a reflexionar sobre tus acciones, ¿Acaso eres una idiota?"

"¡Tu eres el idiota! mientras estoy aquí encerrada en una prisión, ¿Por qué tendría que seguir jugando al juego de la heroína y la villana por cada cosa que Su Alteza dice? ¿Por qué la carga de la desgracia del Príncipe está siendo puesta en una prisionera? ¿Acaso eso esta bien? ¡Sea consciente de las palabras y las cosas inapropiadas que Su Alteza hace y dice, ¡¿No debería usted tener más cuidado con tu entorno!?

La Relajada Vida en Prisión de la Villana Comenzó con su Compromiso RotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora