Capítulo 11

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No va a conseguir nada lamentándose por lo que ha ocurrido, tiene que actuar cuanto antes para recuperar a su hija. Kate se fue a comisaría nada más echar a Castle, una parte se arrepiente por lo que hizo pero no tiene tiempo para pedirle perdón, los llantos de Ava no se van de su cabeza.

En comisaría...

- Espera, espera, retrocede.- Espo y Ryan no dan crédito a lo que su compañera acaba de contarles.- ¿Nos estás diciendo que la ex novia de Castle ha secuestrado a tu hija? ¿A nuestra ahijada?

- Por favor Espo, no tenemos tiempo para tonterías; hay que descubrir su paradero.

- Estoy de acuerdo pero...- Ryan es el único que pone algo de realidad al asunto.- ¿Cómo vamos a encontrarla? No sabemos nada  de esa mujer, sólo que estuvo con Castle, ¿no deberíamos pedirle ayuda a él?

- Después de cómo le traté, no creo que quiera volver a verme.- Lanie aparece por la puerta casi sin aliento, deja las cosas con brusquedad.- Cielo, ¿cómo estás? Javi me mandó un mensaje.

- Sólo quiero recuperar a mi hija  y traer a Martha de vuelta.- no la había nombrado hasta ahora, lo que provoca el asombro en sus amigos.- ¿Quién es Martha?

- La madre de Rick, ahora mismo estará protegiendo a mi pequeña.- Kate no puede más, primero la llamada de su hija, después echó a Castle cuando éste tan sólo quería permanecer junto a ella.

- Shh, cariño. Vamos a encontrarlas, ya lo verás.- Lanie echa una mirada a Espo y Ryan, los cuales se ponen a buscar información de Kyra rápidamente. Kate coge la foto que tiene de Ava en su mesa, fue a los dos meses de tenerla.

- Kate, no deberías estar aquí en este estado de nervios. Voy a llevarte a casa.- pero su amiga le detiene.- No, no puedo ir a mi apartamento; ¿puedes llevarme a otro sitio?

En el loft de Castle...

Tan sólo una luz tenue ilumina el enorme apartamento, Rick ha llamado a Kyra unas cien veces pero sólo escucha la voz del contestador; la última vez tiró el teléfono contra el sofá. Entra al cuarto de su madre, es una de las pocas veces, ya que respeta su espacio, pero ahora necesita sentirla cerca. Todas esas veces que le animaba cuando recibía críticas horribles, cuando las chicas le daban calabazas; ahora esos momentos cobran una fuerza especial. De repente escucha el sonido del ascensor deteniéndose en su piso, alguien llama a la puerta; disimula la sorpresa cuando es Kate la que aparece tras la puerta.

- Kate, ¿qué haces aquí? Creo que me quedó bastante claro que no quieres verme. ¿Has venido a repetírmelo?- Entonces la inspectora se abalanza a sus brazos y rompe a llorar; Rick se avergüenza enseguida por lo que le ha dicho. Deja que Kate se desahogue en su hombro, le abraza con fuerza para que sepa que no piensa abandonarla.

- Lo siento Rick, lo siento muchísimo. No quise decirte eso pero...cuando escuché a Ava...- Castle lo entiende perfectamente, él no escuchó a su madre pero sabe cómo debe de estar.- Tranquila Kate, conozco a Kyra lo suficiente como para saber que no les hará ningún daño.

- Pero Castle, ya lo está haciendo. De forma psicológica, eso es peor que una paliza.

- Tienes razón pero eres detective, ¿no? Creo saber dónde se encuentra Kyra, pero pienso que no será una buena idea el que vengas conmigo.- ambos se sientan en el sofá, Kate se apoya en el pecho de Castle, ahora, algo más relajada.

- ¿Sabes dónde vive?

- Creo saberlo, pero iré mañana a primera hora, ¿quieres que te lleve a tu apartamento?- Pregunta deseando que la respuesta sea una negativa, no le gusta estar solo en un apartamento tan grande.

- ¿Podría quedarme aquí esta noche? No me agrada la idea de volver y encontrarme el apartamento vacío.- dice de forma entrecortada, Rick asiente con una ligera sonrisa; rodea a Kate con sus brazos para protegerla.

- Las encontraremos, te lo prometo.- pero a Kate no le preocupa el que las encuentre, hizo una apuesta con Kyra; ¿y si tarda más de dos días? ¿Qué hará esa loca con Martha y con Ava? El cansancio se apodera  de ella, cayendo en un profundo sueño oliendo el perfume de Rick.

Su hija grita desesperadamente, pide ayuda desde algún rincón y Kate, por mucho que corra, no llega hasta ella.

- ¡Mami, mami! ¡Tengo miedo! ¡No, noooo!

-¡Ava! ¡Ava!- levanta los brazos para intentar cogerla, Castle le zarandea para despertarla; Kate abre los ojos, está llorando.- ¡Oh Rick! ¡Ha sido horrible! No podía hacer nada para salvarla.

- Sólo ha sido una pesadilla, mi madre estará cuidando de ella. ¿Quieres un poco de agua?

- Vale, ¡Rick!- éste se gira antes de salir de la habitación.- Muchas gracias, por todo.

- Siempre.

La fuerza del DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora