Mis chicos

Capítulo 18

Mitad de semana sin mayores novedades hasta hoy, por el momento no he quedado con ninguno de mis chicos, me gustaría ver a Liam, pero Cat me aconsejo que no era buena idea después que le contara todo lo que recientemente ha pasado en mi vida, la locura que fue la semana pasada, y lo que ella me insinuó que estaría pasándome.

Me encuentro a la espera que ella aparezca en mi puerta para sacar esta espinita que sembró en mí, cuando le llegue a la parte de los constantes mareos, náuseas y vómitos que he tenido, ni siquiera la opción había pasado por mi mente, Cat le agrego el hecho que la menstruación no se ha dignado a aparecer, Marilyn, mi ginecóloga dijo que algunas veces no me bajaba por el DIU, por lo que poco le tomo atención a eso al principio ni tenía regla, gracias a Cat pase una mala noche.

Independiente de que el atrapa bebes debería de funcionar, estoy de nervios con la situación, o sea lo tengo desde hace más de 4 años, la fecha exacta no la recuerdo, ya cuando valla ver a Marilyn me dirá cuando toca cambiarlo. Solo espero que no esté equivocada y la fecha de caducidad haya llegado antes de lo previsto, además no estoy segura si todas las veces que he estado con Nathan y Liam se han protegido como se los he exigido desde que empezamos los jueguitos.

Los nervios aumentan mientras mi mente procesa una y otra vez el hecho de porque estoy esperando a Cat y el que no llegue pronto.

Me paro ansiosa a abrir la puerta cuando siento unos golpes, veo a Cat del otro lado y agarro su brazo con brusquedad, pega un gruñido y tira su brazo para liberarse. Se supone que iba a pasar a comprar una prueba de embarazo hace más de 1 hora, no es como si las farmacias quedaran muy lejos, el tiempo que se tomo es excesivo.

-Tranquila fiera, pero que pasa contigo casi arrancas mi brazo- sigue gruñendo mientras se masajea el brazo y hace muecas de dolor, parece que me pasé con el jalón que le di.

-No hay tiempo para saludos ¿la trajiste? - pregunto ansiosa siguiéndola a la sala.

-Claro, porqué crees que tengo esta bolsita con el nombre de una farmacia- agita la bola que trae en la mano que no vi al entrar.

-Dime que hay una probabilidad que esto no esté pasando- le ruego pasando una mano por mi vientre para señalar lo que no quiero decir en voz alta.

- ¡Sofia del Carmen Sullivan! - chilla, solo ignoremos que mi mamá insistió en colocarme del Carmen como mi abuela. – la probabilidad la desconozco, no me iba bien en matemáticas, si contamos los síntomas debe haber una mínima-.

-No me llames así- pido arrojándome al sillón de mi sala -lo siento por tratarte así... pero- emito un gritito de frustración- cómo me está pasando esto- reclamo escondiendo mi cara con la almohada.

-No creo necesario decirte cómo, aunque si te hace sentir mejor sabes que te apoyare en todo y cualquier decisión que tomes de aquí en adelante, independiente de mis opiniones acerca de la vida de un bebé- levanto mi rostro y Cat me toma la mano arrodillándose delante de mí.

-Eres la mejor amiga que pude haber tenido, gracias- digo abalanzándome a ella sintiendo las lágrimas deslizándose por mi mejilla, me devuelve el abrazo y me sostiene mientras sollozo.

-Antes de empezar a lamentarte deberías hacer las pruebas ... compre 5 en total desde la más cara a la regular, no compre ninguna barata porque no confió en ellas- me pasa la bolsita mientras me arrastra al baño que está dentro de mi habitación.

-No tengo ganas de orinar- digo antes de entrar al dormitorio.

-Necesitas muy poco, de seguro saldrá algo- me empuja dentro hasta casi sentarme en el inodoro.