"Unending Love"

"Fare l'amore"

El olor dulce de la vainilla en toda la habitación inundó su nariz con mayor profundidad en el momento en que Yibo lo empujó hacia la suavidad de las sábanas de seda. Lentamente sintió como si perdiera el aliento mientras las manos del menor se deslizaban ágilmente hasta los botones de sus camisa y los desabrochaba uno por uno hasta dejar su pecho completamente descubierto. Cada vez su nivel de excitación subía más y más -¡Ah!- dejó escapar un exótico sonido cuando sintió los dedos del castaño rozar sus sensibles pezones. La erección entre sus pantalones ahora era completamente molesta.

Por su parte Yibo estaba completamente concentrado en estudiar y acariciar cada parte del cuerpo debajo del suyo, pero cuando escuchó el pequeño gemido escapar de los labios del contrario casi perdió el control por completo.

-Zhan-Ge, eres tan hermoso- le dijo entre besos que no se detenían.

El mayor solo puedo suspirar entre los labios del castaño y sonrojarse más de lo que estaba.

Llegando ya casi al límite del juego previo, Xiao subió las manos hasta el pecho del menor y comenzó a desabotonar su camisa negra dando pasó al increíble y bien trabajado abdomen de Yibo, su abdomen que había querido acariciar y tocar desde hace meses. Pasó su mano derecha lentamente por lo músculos rígidos frente a sus ojos, maravillado con lo sexy que era él joven hombre. Volviendo a besarlo hambriento, y dándose cuenta que estaba siendo despojado de su pantalón, quedando solo en bóxer. Sintiendo que no era justo hizo lo mismo con el contrario, bajando sus jeans y dejándolos caer al suelo.

Ahora ambos cuerpos sudados y excitados se besaban sin descanso, acariciandose entre sí, teniendo la ventaja el perteneciente a la constelación de Leo, por su naturaleza feroz y activa, regida por el elemento del fuego. Después de unos minutos Yibo decidió que era hora de quitar la última pieza de ropa que cubría el cuerpo de su amante, con delicadeza y sutileza poso los dedos en la orilla del inicio de la tela, muy cerca del ombligo de Xiao, esperando no encontrar ningún tipo de rechazo de parte de él.

Cuando comenzó a deslizar el bóxer sintió un leve temblor en el cuerpo del mayor, posando sus ojos de inmediato en su rostro le dijo -Confía en mí- con los ojos vidriosos casi cegados por el deseo, deslizó por completo la ropa interior hasta dejarlo completamente desnudó. Se levantó un poco para observar con más detalle el cuerpo de Xiao Zhan.

Las curvas al lado de su estrecha cintura, sus sutiles caderas, sus largas piernas, sus rosados pezones que subían y bajaban juntos a su pecho por la respiración agitada que tenía en ese momento, sus rojos labios, su miembro semi erecto, todo, absolutamente todo en él era perfecto.

Xiao notó como cada parte de su cuerpo se calentaba aún más con la vista atenta del menor sobre su desnudez -Confiare en ti, pero si me lastimas te pateare- le contestó finalmente, dando la aprobación final para no detenerse hasta saciar sus más íntimos deseos.

Con la cabeza nublada de pensamientos indecentes, Yibo tomó con una mano la virilidad del mayor llevándosela hasta su cavidad bucal sin previo aviso, saboreó el líquido pre seminal de su amante. Por su parte Zhan soltó un gemido ahogado más erótico que el anterior, tapando su boca en el proceso por la vergüenza que le causaba. Mientras tanto Yibo iniciaba un vaivén con sus labios succionando el miembro del peli negro con destreza, si bien era su primera vez haciendo algo como eso él se había masturbado antes, sabía que partes del pene eran más sensibles, además que había investigado mucho, mucho. Después de unos minutos Zhan llegó al climax en la boca del menor, por primera vez en la noche. En cuanto sintió esa corriente placentera pasearse por cada fibra de su cuerpo, supo que se volvería adicto a ello. Realizó que había dejado salir su semilla en la boca del contrario y trató de incorporarse tratando de disculparse y buscando algo con que limpiarlo.