Capítulo 33: Rastreando al objetivo

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Habían pasado ya un par de horas desde que los hermanos se vieron obligados a prescindir de sus planes sobre el rescate de su compañero que yacía cautivo en los calabozos del inmenso castillo, habían llegado con la idea de colarse a la edificación en pleno sigilo, pero se vieron obligados a disfrazarse de aliados bajo fachadas estúpidamente convincentes... a pesar de tantos contratiempos jamás pensaron que el asunto fuera capaz de prolongarse con una facilidad tan abrumadora.

Los hermanos estaban ya en el lugar donde se les había indicado que comenzarían con su primer trabajo de servicio comunitario: una pequeña plaza que actuaba como el corazón de la ciudad, cuyo acceso se volvió restringido por las autoridades locales para permitirle a los pokemon designados el trabajar en la limpieza y mantenimiento que se vio comprometido con la protesta de los ciudadanos.

La pequeña plaza no era capaz de vanagloriarse con lujosas y llamativas edificaciones que resaltaran por alguna inherente excentricidad estructural o algún contexto histórico por detrás de su construcción que fuera suficiente para clasificarla como una ubicación con relevancia sociocultural... absolutamente nada, sencillamente consistía en un parque cuyo perímetro rectangular no iba más allá que ser solamente césped verdoso distribuido en toda la área... Ocasionalmente un par de bancas de acero oxidado distribuidas esporádicamente en algunas esquinas y zonas intuitivas... y en el centro, una gigantesca fuente de piedra cuyas imperfecciones habían sido pulidas para su construcción... en medio de la base circular de la fuente y por encima del agua, yacía una estatua de la antigua gobernante del país... Vespiqueen, la cual se inclinaba levemente hacia adelante mientras que extendía con elegancia ambos brazos, un gesto muy común en la nobleza que ambos Scizor identificaron inmediatamente por su propiedad... de las yemas de los dedos de Vespiqueen saltaban las gotas de agua que caían no sin antes verse levantadas escasos centímetros por la fuerza en la que era expulsada.

Scizor shiny estaba desconcertado, recargaba todo el peso de su cuerpo sobre el concreto de la fuente y únicamente se enfocaba en tratar de encontrarle un sentido a todo... no pudo evitar lanzar su pregunta al aire.

- No entiendo porque esta es la plaza de la ciudad capital... es un poco deprimente, a lo mucho hay una iglesia al fondo y una infinidad de puestos de negocio ambulantes distribuidos por todos lados... ¿acaso no tendrán permitido llevarse sus puestos? –

- Bueno... No sé... según lo que se, esta es la plaza de la ciudad porque esa es la iglesia a la que asistía la reina antes de ascender al poder... luego de que la reina muriera levantaron la fuente en su honor y la declararon como la plaza en honor a ella, pues supuestamente declaro que cuando era niña la iglesia era su único hogar – Respondió Scizor, el cual por su parte, cargaba entre sus pinzas un par de botellas de poderosos químicos y un cubre bocas... las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos en cuanto disperso una cantidad ínfima de las susodichas sustancias en las bancas para comenzar a borrar los grafitis.

Su hermano no se vio muy complacido por la explicación, por lo que se puso de pie y camino hasta la banca que se ubicaba a escasos metros de la famosa estatua.

- ¿Tan fuerte huele esa cosa? ¿Qué químico es? – Scizor Shiny lanzo su cabeza hacia atrás instintivamente en cuanto su nariz percibió el olor penetrante.

- No lo sé... Pero odio a estos malditos manifestantes y a nuestra suerte... Solo llegamos a rescatar a Lucario, pero ahora tenemos que limpiar los desastres de un colectivo de idiotas y parece que la suerte no deja de ponerse en nuestra contra, mientras más tardado sea todo esto corremos más el riesgo de que nos descubran... preferiría terminar con esto de una buena vez para rescatar a Lucario a más tardar hoy en la noche... solo tenemos ese margen de tiempo para hacerlo... Después de que haya pasado una semana ya estaremos en todos los medios del país y será más difícil abandonarlo porque luego vendrán las repercusiones... el problema es que parece que ni esta basura de químico es capaz de quitar la mugrosa pintura que usaron...

Gallade y la LunaOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz