III - Naturaleza Inflexible

1.9K 308 44
                                    

«¿Fidelidad? No hay hombre que sea realmente fiel. La atadura del matrimonio es inútil por la naturaleza cambiante del pensamiento y los sentimientos. Puedes tener a la mejor esposa de todas, pero la ansia de estar con alguien que te satisfaga más es... Tan tentadora que acabas cayendo.»

Jin no cree en la fidelidad, sin importar que ahora deba cumplirlo para que Namjoon no lo abandone.

«¿El hombre? Es más propenso a esa infidelidad. No podemos mantenernos quieto cuando algo bello y deseable se nos exhibe. Por eso Seunghyun no para de engañar a Hwasa... la tentación está para dejarse caer, no evitarla. Es incluso parte del amor... saber que te han sido infiel y perdonarlo porque lo necesitas; necesitas su cariño; su contacto, el solo efecto que te provoca saber que le resultas tan atractivo como para caer en dicha tentación.»

Tomó y acarició la flor llena de espinas hasta el punto de hacerse sangre. Por qué estaría pensando en eso justo en este momento... Bueno, sea como sea, es mejor que pensar en el hambre tan bestial que tiene en este instante.

Sus mejillas están un poco más delgadas al igual que su cuerpo en sí. Le da un aire mucho más esterilizado, pero si seguía así llegaría a un punto en el que no contaría con dicha suerte. Jungkook le ha ofrecido tanta comida que luce apetitosa y la ha rechazado cada vez; ya sin poder inventar una excusa a ello.

Solo dice "No".

—Tengo... mucha hambre...—murmura encogiéndose hasta quedar acuclillado en el suelo, mareado.

Si esto seguía así, acabaría por ceder.

...

La risita suave hizo eco en el amplio lugar, como si solo estuviera en su mente. Por el contrario a su objetivo de confundirlo, pudo encontrar a quién propició el melodioso sonido. Compite con la voz de Jimin y eso es todo un logro. Tras pasar una gran roca acorralo a la persona que se había escondido y ahora luce divertida.

—Mi señor me encontró, quién lo diría. Me esforcé mucho por esconderme.

—No lo suficiente. Haces escándalo.

—La idea es que me encuentre, no permanecer eternamente en espera—acaricia el rostro pálido de Jungkook y este no varía al indiferente expresión—. Mi austero e hipócrita señor. —ronronea antes de llegar a su labios y darle un beso.

Iu -Mente-, siempre ha estado danzando de un lado a otro en el Averno, Jungkook la ha perseguido muchas veces, pero por tener otras cosas en mente pierde el interés relativamente pronto. Esta vez logró cacharla sin mucha dificultad como ha querido hacerlo en muchas ocasiones. La tierra cercana al río está blanca y por ello no molesta a la ninfa cuando al recuesta.

Con una mano jala el corto y descuidado peplo que usa, como una inexperta prostituta que busca a quién seducir y lo hace mediante la exposición desmedida de su piel. La presionó contra el suelo, ensuciándola de la tierra. Ella gime aferrándose a él y abriendo más las piernas para conseguir que él entre más profundo.

Como ambiente deshabitado por seres propiamente vivos, no es extraños que nadie fuese testigo de lo que pasó. Iu se contonea con suavidad para acoplarse al ritmo del dios de los muertos; Jungkook la muerde con fuerza, le deja enormes morados y gruñe muy entre dientes con el entrecejo fruncido. Es brusco, muy suelto y por un instante vislumbra ese pequeño y monótono anillo que lo hace saber cómo casado.

—Mi señor...

Lo ignora deliberadamente... en esta ocasión... y en otras muchas...

Tanto así que ni siquiera pudo reprimirse cuando ocurrió en un sitio muy cercano a su palacio, a poca distancia del invernadero donde Jimin pasa cortos ratos y que en esta ocasión se encontró con semejante sorpresa y como si nada.

Blossom in the Abyss | KookMin || BOOK 3#Where stories live. Discover now