La Caótica Vida De Adelaine |Terminada|

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—¿Quieres bajar a comer? — oí de repente a Rodrigo desde el otro lado de la puerta

—No, gracias — respondí con un leve grito

—Escucha querida, lo siento mucho, sé que Max era muy importante para tí — pausó — si necesitas algo...ya sabes dónde estamos

No respondí
Yo seguía acostada y llorando.

—P-pero ¿qué le pasó?

—Es común que coman algún tipo de bacteria, generalmente, se encuentran en la calle o en la misma casa. O...

—O qué doctor?

El doctor se quitó sus lentes, para después suspirar

—Puede que haya consumido algún tipo de veneno

—¡¿Qué?!

—Es lo más fiable señorita, verá, lo estuvo lastimando poco a poco por dentro

🌸🌸🌸

El guapo de Juan
Lo siento tanto Adelaine, sé que lo querías mucho, pero ahora está en un lugar mejor. Te mandamos todo nuestro apoyo y te queremos

Vi mi teléfono.
Eran las 11:45, casi media noche.

Sequé mis lágrimas, me paré y me puse un suéter y mis tennis.
Salí del cuarto, al parecer ya todos estaban dormidos, bajé por las escaleras y salí de la casa.

Aún había algo de gente, era viernes y generalmente siempre salen los universitarios.
Y yo la verdad no tenía ánimos para ir a un lugar así.

Toc

Toc

Toc

Y ¿si no abría? Y ¿si no estaba y no llegaba?

Estaba por tocar otra vez cuando lo ví abrir la puerta, se le veía apurado.
Mi mano que había quedado al aire, poco a poco la fui bajando

—Adelaine... justamente iba a buscarte — comentó un poco más calmado — perdóname, apenas me enteré de lo de Max y yo...

Mis lágrimas empezaron a salir de nuevo, voltié a verlo, se le veían los ojos cristalinos.
Así que lo que hice fue abrazarlo, él al segundo me correspondió el abrazo.

—Lo extraño — sollozé

—Lo sé mi amor, lo sé — dijo para después darme un beso en mi frente — estaremos bien, lo prometo

Una hora después, él y yo estábamos acostados en la cama.

—Perdón — mencioné de repente

—No te disculpes cariño, yo tengo que hacerlo, me comporté como un patán — pausó — ¿quieres hablar de eso?

—El veterinario dijo que pudo haber consumido algún veneno

—¿Veneno? — preguntó preocupado

Asentí

—Pero es extraño porque Max no come nada de la calle, lo llevaba a correr conmigo y ...— pausé — y...no comía nada, yo lo cuidaba

—Lo sé, siempre lo cuidaste — dijo sereno mientras me acariciaba mi brazo  — ¿en tu casa no había algún veneno por ahí? No sé, de ratas quizás

—No, de hecho a mamá no le gusta poner esas cosas — suspiré mientras me tapaba la cara — no sé que voy a hacer

—Nos tenemos nosotros, lograremos salir de ésta cariño

Maratón 3/3