CONDENADAS A ESTAR JUNTAS

49 - Interlude: Moving on

•Piper•

Nuestro día de descanso parece tardar años en llegar, y con Tank ahora en casa todo se ha vuelto una revolución.
Conseguimos combinar nuestros días de descanso para poder tenerlos el sábado las dos, puesto que ni siquiera hemos podido dormir juntas un solo día. Cuando yo debo levantarme para ir a trabajar es cuando ella llega a casa, y cuando yo llego a penas y tenemos tiempo de comer algo y comenzar conversaciones que se quedan a medias. Es una mierda tener horarios distintos, jamás pensé que odiaría tanto dormir sola aquí.
Despierto cerca del medio día totalmente cansada, está de más mencionar que tuvimos una mañana bastante enérgica, puesto que a penas Alex tocó la cama mis hormonas se dispararon y aunque ella estaba cansada por estar de guardia toda la noche, no pudo resistir y terminó dejándose llevar conmigo. Los rasguños en la puerta y los ruidos de lloriqueo de Tank hacen que me levante a regañadientes para dejarle entrar.
Salta sin parar al verme y me siento en la alfombra para acariciarle un momento, y a pesar de que Alex dijo que debíamos ponerle un límite y no dejar que se adueñe de nuestra habitación, yo le dejo subirse al sofá mientras vuelvo a la cama.

Mi chica sigue completamente dormida; su respiración pesada me hace no querer despertarla ni molestarla un poco, realmente le hace falta un buen descanso.
En éstos días ha estado actuando un poco extraña, la he descubierto perdida en sus pensamientos los pocos momentos en que estamos juntas e incluso a veces parece querer escudarse tras un libro para evitarme.
Observo su blanca piel de la espalda descubierta y algunas marcas que mi intensidad ha dejado en ella. Es tan hermosa que parece de mármol, aunque sé que es mucho más cálida.
Mas bien, parece un hermoso lienzo, una obra de arte digna del más famoso pintor.
Mis dedos pican por tocarla, por acariciar su espina dorsal con todo el amor que siento por ella.
Me muerdo el labio inferior sin dejar de admirar su perfecto rostro cubierto un poco por su cabello negro enmarañado y sus labios entreabiertos que hace unas horas rogaban por más.
Hacía ya tiempo que no disponía de unos minutos para apreciarla así, y me siento realmente honrada de poder ser yo quien pueda admirarla mientras está sumida en sus más profundos sueños.
Sin poder controlarme llevo un mechón de cabello despeinado tras su oreja para descubrir su bello rostro y me acerco a besar sus labios. Beso que de inmediato es correspondido con intensidad y finalizado en una sonrisa.

*Piper: -Buenos días, Al... No quería despertarte...- sus preciosos ojos verdes me miran con ternura.

*Alex: -Por fin podemos quedarnos un rato más en la cama, bebé... Juntas.- su sonrisa preciosa sigue pintada en ella, mientras mi mano acaricia su espalda.

*Piper: -Podemos quedarnos aquí todo el día, si quieres...-

*Alex: -No... En realidad planeaba invitarte a tomar un café...- su ceño se frunce y la sonrisa desaparece.

Definitivamente a mi chica le sucede algo.

*Piper: -Mmm... Bien, lo que quieras hacer, amor... Mientras pasemos el día juntas, no tengo problema... Aunque por la noche saldré con Polly...-

*Alex: -Desearía no tener que compartirte...- se queja.

*Piper: -Solo será un par de horas, te lo prometo...- Beso sus labios y vuelve a sonreír.

*Alex: -¿Quieres ir a ducharte conmigo?- pregunta mirándome directamente a los labios, parece que quisiera apoderarse de ellos sin una pizca de calma.

*Piper: -Deberías ordenarme que vaya a la ducha contigo, no preguntármelo...- le doy otro beso de manera juguetona  y me levanto siendo seguida por ella.