Escondiendo soles

5.1K 635 32
                                    

Muy tarde o muy temprano? No sé pero si se que esto lo van a amar y odiar....... disfruten tal vez?
.............
Las cosas en su hogar eran preocupantes, ella lo sabía, así que ayudo en lo que pudo a sus padres, enseño a su hermano a cuidarse y protegerse, más ella aprendió medicina, toda la que podía, si bien sus padres estaban seguros por ser del parte médico de la secta ella veía como los altos mandos los mandaban a lugares muy peligrosos, con pocos luchadores o incluso ayuda y asistencia, medicamentos o incluso poca comida.
Sus padres estaban siendo empujados a la muerte.
Y ellos no podían hacer nada más que escapar furtivos.
O eso intentaron.
Wen Qing miró a su madre empacar todo y cada uno de sus utensilios, libros, esquemas, semillas, dinero y joyas, había ido en la noche a cercanías de Yiling, un lugar tan lleno de energía resentida que asfixia a los cultivadores.
¿Quién pensaría que allí había un tesoro?
Así que su padre oculto todo con ayuda de su madre, sellos y solo Wen Qing sabría dónde estaba a parte de ellos, Wen Ning aún era demasiado joven, los primos de los niños Wen estaban lejos con su familia a salvó de las demandas del líder que parecía enloquecer a cada paso por codicia y ambición, reflejando este comportamiento en sus hijos que abusaban del poder.
Debían proteger a su hijo, un Doncel.
Un Doncel que daría hijos poderosos a su esposo sin importar el nivel de cultivo de él.
Su hija juro proteger a su hermano.
Siempre.
Hallar un buen hombre para él y sin duda ayudar a quien pudiera, ¿qué importaban las absurdas leyes de Wen RouHan? Eran médicos y su trabajo era salvar y curar.
Sus padres aliviados regresaron y así pasaron semanas sin incidentes, pero no bajaron la guardia.
Y eso fue lo que logro que tanto Wen Qing como Wen Ning lograrán huir.
Sus padres no corrieron con la misma suerte, dejando a su hermano en sus brazos, la chica de 15 años corrió lejos, sobrevoló en una espada robada algunos kilómetros antes de agotarse, lograron que un campesino los llevará cerca de Yiling.
Allí ella le pidió a su hermano esperarla, ella iría por comida, ya sin las ropas blancas con soles rojos encima ella pasaría desapercibida, lejos de miradas indiscretas, más a su preocupación se agregaron que después de 5 días sus padres no habían regresado, no habían ido por ellos, lo que confirmo la sospecha de que ellos habían muerto en el ataque.
Puedes, aunque parezca increíble, llegar a odiar tu propio apellido con verdadera fuerza.
***
Ella solo se había ido unos momentos, los suficiente para hallar comida, ropa y un lugar donde dormir, más no espero que su hermano menor estuviera comiendo con un niño más o menos de su edad, ambos comían y ella llego sintiendo miedo.
Miedo de perder al último miembro de su familia.
- ¡¿Qué haces con mi hermano?!
- ¡No, hermana! ¡Él me dio comida! -. El pequeño Wen se acercó calmando a su hermana.
- ¿Quién eres? - el niño estaba solo, muy solo, se veía que había caminado lejos, era como ellos?
- ¡Soy Wei Ying! ¡De cortesía Wei WuXian! -. Sonrió.
Ella admiro la sonrisa tan pura que le daba incluso con el cansancio y el hambre que tenía.
A veces solo hay personas amables en este mundo.
- Gracias....ven no tienes donde dormir, ¿verdad? -. El niño negó.
- ¿Puedo quedarme con ustedes?
- Si, pero no es una casa......estamos......en una situación complicada. -. El niño asintió comprendiendo.
***
- ¡Jie Jie! -. Wen Ning reía mientras Wei Ying le arrojaba agua, ambos juguetearon chapoteando en el agua, Wen Qing se permitió una sonrisa.
Ya habían pasado tres semanas desde que Wei Ying se quedará con ellos, el pequeño era muy activo y motivo a Wen Ning a no ser tan tímido, eran como dos hermanos que jugaban, Wen Qing cuidaba de ambos, así que solía corregir la actitud traviesa de Wei Ying a la vez que intentaba que su hermano no siguiera al oji-gris en sus travesuras.
Más la gente del pueblo se reía y disfrutaba las risas de los niños, en el pueblo no había muchos jóvenes y mucho menos doctores, así que la llegada de los hermanos fue una bendición, les regalaban dulces, comida que podían, incluso les dieron madera para un futuro hicieran su casa
Contando bendiciones Wen Qing se dio cuenta que si bien la perdida de sus padres fue dura aún tenía mucho que hacer.
Estudiaba los libros, enseñaba a escribir y leer, Wei Ying les mostró unos libros de cultivo y enseño arquería y un poco de esgrima.
Aunque debían aprender más y practicar en un futuro.
Debían tal vez buscar un cultivador deshonesto que pudiera darles clases.
Suspiro, entrar a una secta nunca era buena idea, su estancia allí llamaría la atención y provocaría una batalla por ellos.
Mejor ser simples cultivadores deshonestos.
Los niños terminaron de lavarse y corrieron con ella para cambiarse, fue cuando noto la estructura de Wei Ying que era muy parecida a la de su hermano.
¿Podría ser...?
- Wei Ying. -. El niño la miró con la túnica interior ya cerrada. - Voy a revisarte, hay algo que debo confirmar. -. El niño está algo curioso así que asiente.
Esa misma noche la joven se percata de la verdad y desde ahora más que nunca, no dejará que alguien lastime a los dos niños que están bajo su cuidado.
***
Las semanas corren, nadie esperaba -al menos en el pueblo de Yiling- que los cultivadores de QishaWen llegarán, un hombre de poderosa aura llega acompañado de dos niños, ambos miran con asco el lugar.
El hombre que se presume es el líder va directo donde está la taberna, destroza la mesa más cercana al entrar por qué estorbaba su paso, todos dentro se aterrorizan y buscan apartarse de él hombre.
- Busco un par de mis discípulos, ellos huyeron con un precioso tesoro que debe ser devuelto a mis tierras. -. Habla claro y fuerte, los aldeanos se estremecieron por la presión que generaba tal hombre. - Seré generoso y les pagará si los traen ante mi o si saben de su paradero. -. Con un chasquido suyo un sirviente trajo bolsas de oro.
Pero ningún aldeano se movió, ellos sabían que ese hombre mentía, que los niños huían por miedo a morir y que él los mataría por desertar.
Nadie se movió.
- ¿No saben nada? -. Los aldeanos negaron, el posadero miró por la ventana y un niño asintió desde fuera, huyendo del lugar sin ser visto, para todos él había evita caer por la fuerza del hombre.
- Bien, en ese caso me retiro. -. Se fue como si fuera un dios en la tierra.
Los aldeanos suspiraron de alivio.
***
Wei Ying de inmediato informo a sus amigos de la llegada de ese hombre, sus ojos habían visto la crueldad de la que su mirada desprendía.
- Nos ocultaremos aquí, no nos hallará mientras....
- ¿Mientras que? -. Wen RouHan jalo a Wen Ning del tobillo y sus hijos detuvieron a Wei Ying de defender a su amigo.
- ¡A-Ning! -. Wen Qing trato de entender que había pasado.
Lo vio era…la espada de su madre que estaba allí.
Su madre ocupo su sangre para las barreras y talismanes, su espada era una herramienta poderosa que podía guiar al portador a donde había puesto las antiguas protecciones.
- Me imagino que tú les ayudas. -. Wen RouHan miró a Wei Ying que se debatía entre los brazos de un cultivador. - Muy inteligente, usar al niño como mensajero. -. Wen RouHan sonrió cruel, Wen Ning trataba de respirar aún con el fuerte agarre de Wen RouHan en su cuello y Wen Qing sintió el filo de la espada en su cuello.
- Vienen conmigo o.…bueno estamos cerca de los túmulos funerarios, saben lo que pasará si los arrojó allí, ¿verdad? -. La voz sedosa y llena de crueldad hizo que todos los presentes se horrorizaran.
- ¡Líder!
- ¡Hay que arrojarlos!
- ¡Den el rollo de la inmortalidad!
- ¡Silencio! -. Los ojos de Wen RouHan entonces se enfocaron a Wen Qing.
Y ella sintió su mundo volverse patas arriba.
Él…él......
Wei Ying mordió al cultivador que lo soltó el cayó y empujó contra Wen RouHan que soltó a Wen Ning.
El hombre se levantó.
- ¡No tenemos tal cosa! -. Wei Ying miró los ojos del hombre y sintió su corazón enfriarse.
¡Él no estaba consiente! ¡Alguien manejaba a este hombre!
Eso lo enfureció.
Alguien que era usado así....
¿Quién...?
Su cuello fue atrapado por una mano arrebatándole la posibilidad de respirar libremente.
Escuchó vagamente como ordenaba alzar el vuelo a los túmulos funerarios.
***
Por si mismo era difícil respirar, sus intentos por huir eran infructuosos, Wen Ning estaba en brazos de otro cultivador inconsciente y Wen Qing lloraba silenciosamente.
¡No! ¡Él no se rendiría!
¡Él no podía!
- Hasta nunca. -. Fue dejado caer a las profundidades de la montaña.
- ¡¡¡¡A-Ying!!!! -. Desesperada trato de agarrar a el niño que caía, miró alrededor Wen Qing trato de hallar a quien controlaba al líder de QishaWen, nadie era de los presentes al menos, lloro por el pequeño que cayó dentro de ese horrendo lugar, posiblemente la caída lo matará…y su alma se quedaría allí para siempre.
Que cruel era hacer que el líder de QishaWen hiciera algo así.
Lloro junto con su hermano.
- ¡Wei Ying!
- ¡No tengo nada! -. Wen Qing miró a Wen RouHan.
No podía ayudarlo.
- Entonces mueran. -. Ella fue empujada y Wen Ning arrojado junto con ella.
Sus gritos resonaron como los de Wei Ying.
***
Las espadas se alejaron de allí, los aldeanos más tarde buscarían a los niños sin éxito, murmurando de la crueldad del señor de la ciudad sin noche los rumores se propagaron, un desalmado hombre había arrojado tres niños a los túmulos funerarios por codicia, los habitantes de Yiling rezaron por las almas de tan amables jóvenes que apenas vivían, fue en una noche, un año después una flauta empezó a sonar por los alrededores.

Luna Blanca de YilingWei Where stories live. Discover now