R O S A S •TaeKook•

•033•

Advertencia: Capítulo largo.

Se dice que el momento más oscuro de la noche es antes del amanecer y para la vida de los implicados en ese cruel tablero del destino necesitaba cuantos antes el tan insiado amanecer, por que ahora alguien sumamente peligroso estaba devuelta para llenar de penumbras y desesperación las vidas de todos.

TaeHyung se encontraba observando la oscuridad de la noche desde su despacho de pie ante la ventana —Hijo de Kim YoMi y Kim Yoo, me da escalofríos verte —Apartó la mirada de la ventana observando a NamJoon y a HoSeok ante él, el primero con una sonrisa ladina —La última vez que nos vimos fue hace doce años. Eso fue cruel Tae, ese día no dejaste de pisotear mi cuerpo hasta que casi se convirtió en polvo —Cruzó sus brazos —Me tomó doce años recuperarme. No, debería estar agradecido por la vitalidad de los purasangre para sobrevivir a algo así —Tae permanecía imperturbable, pero ciertamente en esos momentos tenia la mirada de un asesino —Ah, hablando de eso, la desaparición de mi prometido BaekHyun hace que me sienta más relajado. Aunque quisiera hacerlo sumiso como la madre de este chico parece que no lo habría conseguido sin importar cuánto esperara —HoSeok parecía horrorizado por lo que con tanta normalidad acababa de decir ese sujeto.

—Me alegra —La voz de Tae era fría —Puedo estar tranquilo sabiendo que no has cambiado, Jeon JoongKi. Así no tendré dudas en matarte.

Un cuchillo que tenía sobre la mesa se levantó y a la velocidad de una bala iba directo a la cabeza de NamJoon pero Jung se interpuso de inmediato haciendo que el purasangre menor detuviera el arma —¡Lo siento, no dejaré que lastimes a Nam! —Gritó —¡No dejaré que este chico sea una víctima de sus conflictos!

—¿Entonces te has puesto del lado del Consejo? —TaeHyung estaba enfurecido aunque mantenía su apariencia serena.

—Sí, es una forma de decirlo —Ciertamente su abuelo era quien lo estaba obligando a proteger a ese ente maligno que ahora habitaba en el cuerpo de NamJoon.

—Ya veo... —Murmuró.

—No te preocupes, Tae no podrá matarme —Avanzó un paso hacia adelante colocándose frente a HoSeok donde aun el cuchillo apuntaba a su cabeza —Por ahora déjame usar su habitación. Cuento contigo, presidente Kim —Dijo burlesco. El arma término clavada en alguna parte del techo, el castaño estaba a punto de ignorar el hecho de que ese no era su verdadero cuerpo y despedazarlo en ese mismo lugar.

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—TaeHyung —Llamó JungKook haciendo que el mayor lo girara a ver. Kook lo había citado frente a la fuente donde el se le declaro de forma clara y directa —Aún no me has respondido —Estaba confundido ahora no solo soñaba con esa mujer, sino que ahora con un niño que le decía con una peculiar pero linda sonrisa rectangular "una vez cada doce años"— ¿Tienes alguna relación con mi pasado? —Tae se limitó a escuchar —Lisa me dijo que me estas protegiendo. ¿De qué? ¿Algo va a sucederme? —Las manos del menor terminaron en los hombros del purasangre —Respondeme, te lo suplicó —Pero un fuerte pitido en sus oídos lo hizo caer de rodillas sosteniéndose la cabeza. El purasangre se arrodilló velozmente frente a él.

El menor temblaba y sus ojos estaban fuertemente cerrados. Ahora no solo eran voces, ahora eran una serie de imágenes. Paredes repletas de sangrey una mujer tirada en el suelo sobre un charco carmín.

" Tengo miedo. Hay mucha sangre"

"Vi una rosa que solo florece una vez cada doce años"