Eran alrededor de las 15hr cuando entre latidos desesperados, sentimientos encontrados y pequeños cortometrajes que nublaban mi mente le escribí bájate y sal.
Cansada del trabajo pero más intrigada por la petición accedió, cada paso hacia el encuentro, disminuía la distancia, aumentaban los pensaminetos y desaforadamente la tensión, me sudaban las manos, hablaba entre cortado, ¿como es posible que en Julio tenga escalofrío? Con la piel de gallina me pregunté.
Una pregunta que 2 minutos después se torna apresurada, porque te vi, mas radiante que nunca, ya no sentía frío, a 20 metros de mi y aun sin verme me estaba congelando.
Te lleve al parque, vaya parque, habian miles de personas pero sentí que sólo éramos tú y yo, el frío se fue, ya no aguantaba el calor, me quemaba el pecho. ¡!No!, no era normal, ¡tenia miedo, tenia ansiedad!, tu abrazo fuerte y esa fragancia dulce, fueron un tranquilizante a mis latidos, fluidez a mi lengua, le otorgaste estabilidad a mis pupilas y sentidos a mis pensamientos.
BINABASA MO ANG
Memorias de dos corazones valientes
Short StoryEl sentimiento va mas allá de una palabra, la distancia, un instante o un beso. Es algo inefable que tratamos de describir y a medida que escribimos o hablamos nos damos cuenta que nunca habrán palabras suficientes para mencionarlo. se aprende a viv...
