BEHIND THE BARS (SuperM)

CAPÍTULO 19

LUCAS P.O.V

BaekHyun y yo llevábamos más de una hora esperando a entrar en el juicio, en una sala dónde esperábamos mientras nos vigilaban unos cuantos guardas. Ambos llevábamos puesto un elegante traje, pantalones de vestir negros a juego con la americana, camisa blanca y corbata.

El ruido de reloj de pared me estaba poniendo de los nervios y BaekHyun caminando de un lado a otro no lo mejoraba.

-¿Paras, BaekHyun? – le pregunté sonando algo borde, pero no era mi intención, pero él me ignoró - ¿qué coño te pasa? Ni que te enfrentaras a un juicio por primera vez.

-El juicio me importa una mierda – me aseguró él.

-Entonces, ¿por qué das tantas vueltas? Estate quieto – le pedí en un resoplido.

Me estaba poniendo de los putos nervios.

-¿Estás enfadado por lo de Momo? – le pregunté, sospechando que era eso lo que le pasaba.

-No – dijo él con contundencia, y volví a suspirar, no había quién entendiese a ese chico – pero podrías habérmelo dicho.

-No sabía que te lo tenía que decir – me defendí yo.

-¿No sabías que tenías que decirme que vamos a ser padres? – me miró, acusándome de haberme inventado cualquier escusa, pero yo no sabía si Momo se lo iba a decir o no.

-Pues no, la verdad es que llegué a pensar que Momo no te lo diría, solo que era mío y punto, porque cuando me lo dijo no tenía ninguna intención de explicártelo.

-Da igual, Lucas, no voy a discutir contigo por eso – sacudió la cabeza, pero en ningún momento dejó de dar vueltas – solo estoy nervioso, y punto.

-¿Qué te ha dicho tu abogado?

-Que por ley no cree que me condenen a muerte sin antes condenarme a cadena perpetua – me explicó mirando el reloj que llevaba – pero que pueden hacer una excepción, porque hemos atacado al gran pez gordo, supuestamente.

Se quedó parado, a varios metros frente a mí, mirándome fijamente.

-Quiero que me des un abrazo – me pidió de la nada, eso no era típico en él.

Lo miré más fijamente a los ojos y entendí que no quería un abrazo como un gesto cariñoso, pero estábamos vigilados por los guardas, que estaban escuchando nuestra conversación y él parecía querer decirme algo que no podían oír.

-El niño quiere un abrazo – dije en un suspiro y haciéndole un gesto con la mano para que se acercase

-No podéis tocaros – nos advirtió un guarda.

-¿Qué no puedo? – lo reté yo agarrando la mano de BaekHyun y sentándolo en mis piernas – si mi novio quiere un abrazo, tendrá un abrazo. Y si quiere follar, follaremos, si te quieres unir, eres bienvenido, pero no me toques los cojones – dije enseñándole el dedo del medio para finalizar.

Yo rodeé la cintura de BaekHyun con mis brazos y él el cuello, le di un beso en los labios y después él escondió su cabeza en mi cuello.

-Tenemos que ponernos a cubierto – me dijo él cerca del oído – han contratado a un grupo de sicarios y en dos minutos estarán entrando por la puerta para matarnos a nosotros y a estos guardas, así parecerá un ataque a alguno de nosotros dos de parte de las clases bajas, como nosotros – me explicó.

Yo me separé para mirarlo con el ceño fruncido y le agarré la mejilla para taparle un poco la boca y así no pudiesen leerle los labios.

-¿Qué coño dices? – le pregunté yo.