Twenty four

1.1K 97 26
                                    

Ese fin de semana Farah había decidido ir a su primera reunión de el grupo de apoyo, Aiden la acompañó porque no quería sentirse tan sola, tan vulnerable con un grupo de personas con las cuales no tenía ningún tipo de confianza, solo tenían algo en común cancer.

Un círculo formado por sillas, como en las películas, su amigo se había quedado afuera de la sala por obvias razones, tomó asiento en una de las sillas cerca de la puerta por si quería huir podría hacerlo sin problema.

— hoy tenemos a un nuevo integrante — dijo el guía — nos podrías dar más información sobre ti

Farah sonrió sin ganas.

— amm Hola — se levantó — me ... me llamo Farah Walker, tengo 28 años y tengo tres tumores, uno en cada pierna y otro en la cadera ... metástasis ahora

— ¿quieres hablarnos más respecto al tema? Muchos aquí pasan por el mismo diagnóstico

— si, bueno en realidad no tengo familia, mis padres murieron y mi hermano está lejos, no me preocupa morir aunque en cierto modo si, tengo un amigo el cual es mi todo y conocí a un chico, quiero quererle pero bueno sé que no estaré mucho tiempo ¿para que?

Sintió un poco de culpa por toda esa verborrea, una chica delante suyo subió la mano, como en la escuela.

— dinos Nancy — el guía le dio la palabra

— ¿ya te dieron un estimado? — preguntó la chica

— 12 a 14 meses, hace ya más de tres meses

— me estás diciendo que ¿aún sigues pensando en estar o no con el chico? Amiga... son tus últimos meses en este planeta y te estás haciendo el sufrimiento aún más agónico, ve por él y no lo dejes ir, van a sufrir, pero tarde o temprano lo harían, porque terminan o por alguna otra cosa ... ¡disfruta!

La chica tenía el cabello muy corto, casi a rapa, su tez bastante pálida y los labios resecos, más tarde se enteró que tenía leucemia. Pero lo que le había dicho era parte ya de ella, no hacerse el sufrimiento más agónico, ¿por qué tener que alejar a Sebastian? Pero no le diría toda la verdad aún, no sin tener más estabilidad emocional.











— ¿mensaje de Farah? — cuestionó su madre cuando vio que este sonrió a su móvil 

— si, quiere verme — se encogió de hombros

— Sebastian, se bueno con ella por favor

— ay mamá obviamente, no quiero molestarla pero tampoco puedo alejarme de ella

— me gusta como se ven juntos, no te voy a mentir, hacen una gran pareja, entiende perfecto tu fanatismo

— ¿mi madre me está llamando loco? — le sonrió

— no fue eso lo que dije Sebastian

— era broma, entiendo a donde ibas ... iré a cambiarme para ir a su apartamento

— claro, tienes que impresionarla aunque a decir verdad creo que siempre te ves muy guapo

— normal, ¡eres mi mamá!

Después de cambiarse, paso por unas donas, sabía bien que a la chica le gustaba cuando él llevaba algo dulce para comer aunque no se negaba a las pizzas.

Toco el timbre un poco nervioso, aún no sabía porque tenía esa sensación de inquietud en el cuerpo.

— Señor Stan — sonrió más de lo normal

— señorita Walker — un gesto de ternura se mostró en su rostro

— pasa por favor

— gracia... — se interrumpió cuando vio una especie de cena romántica montada en la barra de la cocina — ¿que es ... que es esto?

— hoy hablé con alguien — se mordió el labio inferior — y me hizo ver que estaba haciendo las cosas mal ... Seb me estaba perdiendo de algo muy importante por miedo, entonces me decidí

— ok me estás asustando ¿a qué te decidiste?

— a ser feliz, quiero ser feliz junto a ti

Sebastian subió ambas cejas, sus ojos se abrieron grandes en señal de sorpresa y la mandíbula se abrió un poco.

— ¿quieres decir que tú y yo ...? — logró decir

— Sebastian Stan ... ¿quieres ser mi pareja?

Las mejillas de Farah se volvieron de un color carmesí, quería decir novio pero no quería implementar esa palabra, sabía que no le estaba diciendo la verdad y lo que implicaba estar con ella en una relación.

— ¿estás hablando en serio? — le sonrió como nunca lo había hecho — esto es un poco raro he de aceptar pero

— una chica puede tomar la iniciativa si eso es a lo que te refieres

— un poco si, tú sabes lo mucho que me gustas y bueno no me voy a negar a esa petición, sé que será difícil, ambos tenemos nuestras cosas pero claro, seamos pareja

— entonces Stan, me complacería muchísimo tomar tus bacterias y hacerlas parte de mi

Sebastian la atrajo de la cintura con una sola mano de manera lenta y cuidadosa, como si tuviera miedo a romperla, con la mano libre tomó su nuca para hacer que el beso tuviera más profundidad, sus labios se juntaron ... ni el primer beso, ni el de la cafetería algunos días atrás había sido tan lindo y especial como aquel beso, ambos lo disfrutaban por Farah podía sentir con totalidad lo que Sebastian tenía para darle, él la sentía segura ya no se tensaban sus hombros, ahora ya podían pertenecerse el uno al otro sin ningún problema o al menos hasta que Farah le contara la verdad.

— wooow en serio que no besas nada mal — dijo ella, lo hizo sonreír aún cerca de sus labios

— ¿me vas a decir eso cada vez que nos besemos?

— no se, ¿me vas a besar así de bien siempre?

— haré lo posible porque así sea

— prometo solo pensarlo ... ahora vamos a cenar — señaló la barra — hice ñoquis y un tiramisú

— oh, yo había traído donas — alzó la bolsa ya un poco arrugada — son glaseadas y unas rellenas

— uf suena delicioso — tomo la bolsa con alegría

— podemos comerlas mañana

— Stan ...

— cuando venga a verte, no esto sugiriendo nada de otra índole — arqueo una ceja — a menos que tú quieras que

— Stan ...

— ok está bien ya no sugiero nada — le sonrió — ¿vamos a cenar?

— claro guapo

Él se enrojeció enseguida, ella sirvió la cena, la devoraron lo más rápido posible, su madre le había enseñado muy bien el ámbito de la cocina, el postre decidieron que era mejor tomarlo viendo una película que ahora Farah escogiera, ella prefirió las donas antes que el tiramisú, Sebastian pudo con ambos postres.

— fue increíble, no me esperaba para nada esto de verdad — confesó Sebastian aún con su brazo rodeando a la chica — ahora podré cambiar el "señorita Walker" por un "señorita pareja mía"

— ¿por qué no sólo "novia"? — beso su mandíbula

— porque no es tan original, aparte tú dijiste "pareja" fuiste la primera que no dijo esa palabra

— punto a tu favor y en verdad "pareja" es mejor palabra

— así que desde ahora serás señorita pareja mía

El chico le levanto un poco la barbilla, sus ojos se encontraron, sonrieron al instante y tuvieron que besarse, de nuevo esa seguridad que Seb le proporcionaba.

— te quiero Farah

— te quiero Seb

Save Me Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt