Amor y odio (Gray Fullbuster x reader) [ACABADA]

Epílogo

La llegada al gremio fue una celebración a lo grande por todos los de Fairy Tail. Lucy y Erza habían preparado una fiesta sorpresa junto a todos los demás (mandando Erza a todo el mundo para que saliese bien) y, a su mismo tiempo, Juvia quiso intentar hacérsela solamente a Gray y así enamorarlo de ella (al final sus planes no salieron los que esperaba).

Me encontraba comiendo algo de pastel que Wendy había traído de una pastelería a la que ella y Titania iban frecuentemente con los más cercanos a mí en todo el gremio cuando noté unos golpecitos en mi hombro.

Giré mi cabeza a mi derecha, donde un serio Natsu me miraba fijamente. Con un gesto me pidió que lo siguiese, cosa a la que asentí.

Nos levantamos y comenzamos a caminar fuera del gremio.

-Natsu, ¿ocurre algo malo? -El chico de fuego no respondía. -Hey, fueguitos, ¿estás bien?

Llegamos a un pequeño apartado de hierba algo cercano a Fairy Tail y Natsu dejó de caminar de golpe, cosa que provocó que diese un respingo al asustarme.

- ¿Natsu?

El peli rosa me miró algo sonrojado, y notaba como me iba confundiendo más y más a cada segundo que pasaba.

-Escucha, __. -Asentí otra vez en silencio. -Yo... llevo un tiempo pensándolo y... Bueno, yo... Tú... -Se calló de golpe y frunció los labios. -Me gustas, __.

Me quedo estática ante sus palabras.

¿Qué? ¿Que le gusto a Natsu? ¿Desde cuándo? ¿Por qué? Casi nunca habíamos compartido muchas palabras, me llevaba bien con las chicas del gremio y tenía aquel antiguo odio hacia Gray por lo que me acerqué al de la magia de fuego por tal de saber sus debilidades, pero Natsu tampoco fue cercano a mí. Por mis amistades había hablado con él de vez en cuando pero nunca había sido más allá.

Por no hablar de lo que había comenzado a sentir.

¿Qué narices debía de decirle ahora para no dañarlo pero no ilusionarlo?

Cojo aire y estoy a punto de responder cuando una fría y grave voz no me permite ni comenzar:

-Perdona, Natsu, pero no puedo dejar que me robes la poca oportunidad que tengo con __. -Me giro sorprendida a ver a aquella persona, quien se encontraba vestido únicamente por un oscuro pantalón y tenía colgado del cuello su habitual collar, mirándonos a ambos seriamente. Tras mantener interiormente un duelo mirándome fijamente acabó optando, al parecer, con la decisión de agarrarme la mano y llevarme con él bien lejos del gremio.

- ¿Gray? -El chico no responde a ninguno de mis llamados hasta que llegamos al lugar que al parecer era su objetivo. - ¿Qué hacemos aquí? ¿Qué está pasando contigo de repente?

-Yo... -No se dignaba a mirarme aún y cuando había interrumpido la confesión de Natsu y me había arrastrado tras decir unas palabras tan confusas sin darme tiempo ni a poder pensar claramente. -Bueno... Es que...

-Gray, ¿podrías mirarme al menos? -Pido aún confusa. -Ya que me has, básicamente, arrastrado hasta aquí, podrías intentar contestar mis preguntas sin darle más importancia a una pastelería.

El chico de oscuros cabellos dirige sus gélidos ojos a mí y, a pesar de que estos expresan esa frialdad como el hielo que lo caracterizaba a causa de su magia, logra ponerme nerviosa.

- ¿Por qué no me has dejado responder a Natsu? ¿Qué hacemos aquí?

-Perdona por no haberte dejado responder a Natsu pero quería que, antes de que le diese tu respuesta tuvieses en cuenta también mis sentimientos. -Lo miro confusa, nerviosa, no podía ser que se estuviese refiriendo a lo que yo creía, ¿o sí? -__, me gustas, desde hace tanto tiempo que se me hizo imposible no hacerte caso desde que volviste a Magnolia y formaste parte de Fairy Tail. -Lo miro sorprendida. Bien, las últimas palabras que pensaba que iba a decirme y las primeras que ansiaba escucharle acababan de salir de su boca. -Estoy loco por ti, pero no... Después de lo de Url nunca me atreví a ser sincero contigo, y no tienes idea de lo arrepentido que estoy por culpa de eso. Desearía poder volver atrás en el tiempo y poder protegerte, no provocar que me odies y mucho menos que tus sentimientos estén en una constante lucha.

- ¿Tú qué narices sabes sobre mis sentimientos, Gray? -Me mira con sorpresa ante mi pregunta. Lo veo apretando los labios en un intento de aguantar las lágrimas, el sin camiseta iba a hablar pero le corté: -Llevo casi toda mi vida enamorada de un idiota nudista que era uno de los favoritos de mi propia madre, mi hermana me odió casi toda mi vida, y el otro estudiante favorito se volvió un increíble idiota. Tuve que aguantarme todos los sentimientos de afecto hacia ti para poder buscar una manera de vengarme por mamá, por lo idiota que habías sido. Siempre te eché la culpa de lo de mamá, Gray, pero mi corazón no quería creer mis palabras, por lo que me encontraba a diario en una continua discusión. ¿Y crees que conoces cómo me siento ahora mismo? ¿Te atreves a hablar de esa manera? -Enfadada le doy un cabezazo y dejo mi adolorida frente apoyada en la suya, de puntillas. -No sabes lo difícil que es tener que rechazar a alguien que no te ha hecho nada malo y con el que puedes llegar a tener una fuerte amistad por estar enamorada de otro idiota que nunca sabe leer el clima.

- ¿Eso significa que... ?

- ¿Qué esperas que signifiquen mis palabras, Gray? -Apoyo mis manos en sus frías mejillas sonriendo contenta por la situación en la que nos encontrábamos. -Pues claro que me refiero a que te quiero, cacho de idiota.