El renacer de un Dios.

Capitulo 4.

Todos estaban bastante impactados al ver cómo Issei interceptó la flecha con sus espadas con gran facilidad, pero entre todos Gabriel era la más impactada ya que ella era conocida como la mejor tiradora del cielo, era imposible que fallará, pero tal parecía que Issei estaba a un nivel más arriba que todos ellos, hasta Gran Rojo lo admitía.

Rías: Mi lindo Issei has regresado-Dijo derramando lágrimas e ir corriendo a Issei.

El mencionado solo se le quedaba mirando hasta que se puso en guardia, algo que desconcertó a los presentes.

Issei: Alejate de mi Gremory!-Dijo enojado

Rías: Pero Issei-Dijo nerviosa intentando acercarse a "su" amado.

Issei: No me importa lo que digas maldita-Dijo tomando a la niña dispuesto a irse.

Pero en eso un rayo pasa a lado suyo deteniendo su andar viendo que fue Akeno que estaba vestida con su traje de sacerdotisa.

Akeno: Ara ara Issei-Kun por desgracia no podemos dejar que te vallas.

Koneko: Ella tiene razón-Dijo pasando a su lado Nekomata-No podemos dejar que te vallas.

Issei solo veía como las demás se ponían a lado de esas 3 así que bajo a la niña la cual se escondió atrás de una mesa mientras veía lo que pasaba.

Issei: Miren podemos hacer esto por las buenas o por las malas-Dijo mientras sus espadas empezaban a prenderse en llamás.

Azazel: Y cual sería por las buenas?

Issei: Que yo me vaya en paz con la niña.

Zirches: Y las malas?

Issei: Que mate a cada uno de ustedes en este mismo lugar y después irme.

Ophis: O también la tercera, que te borremos la memoria y así puedas estar con nosotros-Dijo siendo apoyada por los demás

Issei: Conque así lo quieren?-Dijo serío

Al decir eso empezó a caminar hacia los líderes haciéndoles pensar que se iba a unir a ellos pero grande fue su sorpresa al ver que empezó a atacar al Clan Gremory si compasión alguna.