Capítulo 37

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Washington D.C

Agosto 31 2015

Eva estaba hermosa, su vestido blanco descotado y de corte de sirena la hacía lucir radiante. Andrew sonrió como tonto en toda la ceremonia.

Andrew iba vestido con su traje de gala del ejército solo que esta vez con una pajita negra en lugar de la tipa corbata de ese color. Cuando el sacerdote concedió la oportunidad de sellar su promesa de amor con un beso trato de ser lo más delicado y amoroso obviamente lo había conseguido.

- Por fin...Puedo lucirte como mi esposa, Sra. Walker

- ¿Qué esperas para hacerlo, Sr Walker? – Los recién casados salían de la pequeña capilla cuando varios soldados hacían una pequeña marcha de honor dirigidos por el padre de Andrew, se hicieron a cada costado y levantaron sus espadas

- Esto no lo había planeado

- Tómalo como regalo de bodas de tu padre

...

Amigos y familiares disfrutaron del banquete en general, desde una pequeña e ilustrada escena del rapto de la novia por parte de Ryan y Salvatore con Eva cargada en sus brazos mientras corría de Andrew.

Los novios yacían sentados en la mesa principal, ambos cansados y con ansias de escapar a su luna de miel

- Cariño

- ¿Qué pasa, mi querida Eva?

- Mira hacia tu derecha – Andrew vio una escena como para grabar, Salvatore con el rostro irritado y Alexandra tal vez insultándolo o algo parecido

- Algo me dice que este par terminaran igual que nosotros

- ¿Qué te hace pensar eso?

- Míralos. Están hechos el uno para el otro

- Claro, como no. No se te olvide que mi hermana anda con el senador Clark

- Ese señor está más muerto que vivo está tan enfermo, creo que el Alzheimer lo matará antes de tiempo

- ¡Andrew! – Eva me dio un leve golpe en mi hombro

- ¿Qué? Es la verdad, mejor vamos al hotel, ya me quiero ir

- Claro que no, deseo disfrutar un poco

- ¿Crees que iré al hotel contigo a dormir? Amo tu inocencia

- Claro que no, pero uno se casa una sola vez cuando se trata del amor de tu vida... Eso lo decía mi padre

...

Fui a la habitación del hotel con ella, mi amada Eva, tanto tiempo de estar junto ahora lo estaremos para siempre.

- Lo mejor de todo es que ahora puedo gritarle al mundo quien es mi esposa – la deposite en la cama

- ¿Por qué no iniciamos?

Comenzamos a besarnos apasionadamente, nuestras lenguas explorando nuestras bocas. Perdí la cuenta de cuánto tiempo nos estábamos así. Pero mientras mis manos, masajea su joven pecho, una fina capa de tela. Sus gemidos de placer se hacen más fuertes con cada pasada con cada toque de sus pezones endurecidos.

Finalmente, ella se retira su sostén diciendo.

- Ya no necesito esto

Agarra el vestido y se lo quita sensualmente, ahora desnuda delante de mí. Su belleza es realmente impresionante, ella es una diosa radiante. Luego, con una sonrisa, Eva se reúne conmigo, de nuevo para besar y acariciar más apasionadamente. En segundos mis manos continúan su masaje de su cuerpo. Sin una barrera delgada de la negligencia, mi toque es casi más de lo que puede soportar, su gemido se vuelve aún más fuerte. Comencé a besar su cuello y sobre su hombro sobre sus senos repitiendo las acciones que funcionan tan bien esta mañana. Cuando mi boca ocupa el lugar de mi mano, la uso para frotar con suavidad, pero con firmeza las costillas y la cadera. Le acaricio suavemente las nalgas y la acerco más a mí. Su pelvis hace contacto justo debajo de la línea de mi cinturón. Con ella presionada en mi piel siento su humedad

- Eso se siente tan bien

Sin esperar baje mis pantalones hasta el suelo y como pude desate mi pajita

- Te amo – Sin dudarlo me hundí en su interior. Inicie el ritmo con suaves embestidas que poco a poco fueron aumentando hasta venirme en dentro suyo

- Yo también te amo. Sra. Walker

Nos duchamos juntos, nos abrazamos y nos frotamos, nos besamos y nos acariciamos hasta el amanecer. 

Mi Capitán.Where stories live. Discover now