|No, no es mi tipo.| •JJK & ___ • |

•16:Comenzó a seguirte•

Todo el camino hacia el paradero fue en silencio, uno incómodo, muy incómodo.

—Que lindo día ¿no?—preguntó en un intento de comenzar una charla.

—Sí, muy lindo... —Respondí sin apartar la mirada de mis pies moviéndose, queria seguir una conversación, el silencio me estaba matando, pero no podía.

—Oye, a propósito..—imitó mi acción y comenzó a ver sus pies—¿dónde vamos exactamente?

Se me escapó una pequeña risa.

—La verdad es que voy a secuestrarte Jeon... —finalmente ambos nos miramos a los ojos.

—¿Tu me vas a secuestrar?—rió—¿con esos brasitos?

—Ah, payaso—le di un puñetazo en el brazo derecho. A lo lejos observe como nuestro transporte se acercaba poco a poco. —Ese es nuestro autobus...

Ambos nos pusimos de pie y yo hice una seña con mi mano para que este se detuviera, lo cual fue un éxito. Jungkook pagó ambos pasajes, yo pagaría el de vuelta. Tomé asiento a en el lado derecho junto a la ventana, este tenía un asiento en ese lugar, así que Jungkook optó por sentarse atrás de mi.

Al principio de el recorrido ninguno dijo ninguna palabra, yo estaba mirando mis redes sociales.

"jjungkook_ ha comenzado a seguirte".

Me volteé y lo mire con una cara de "¿es en serio bro?", pero el tenía una sonrisa pícara en su rostro.

—¿No piensas seguime también?—acercó su cabeza a mi hombro izquierdo.

—No.

—¡Que mala eres! —su repentino grito hizo que me asustara un poco.

Las personas que iban en el autobus nos comenzaron a observar, logré escuchar algunas risas también.

—Cállate estúpido—golpeé su frente con mis dedos haciendo que su cabeza se echara un poco para atrás, él solo se quejó pero no hizo, ni dijo nada más.

—Que tierna es esa pareja—mencionó una chica a su amiga que se encontraba a su lado.

—Joder—susurre y tomé una postura encorvada.

El tiempo pasó y era momento de bajar del autobus, me puse de pie y nos dejó en el paradero, Jungkook solo me siguió el paso.

—Creo que es aquí...

Jungkook levantó la mirada y ante nosotros estaba la casa de Momo en todo su explendor.

—¿Dónde estamos ___? —preguntó Jungkook.

—En casa de los padres de una amiga...—giré un poco la cabeza—deberías esperarme aquí.

—Eso no va a suceder. —Apoyó su mano izquierda en mi hombro derecho y procedí a tocar el timbre.

Hana atendió y como me conocía me dejó entrar sin problemas.

—Tanto tiempo ___.

—Hana—la mire desafiante—dile a tus padres que vengan.

—Pues no va a poder ser cariño—se cruzó de brazos—están durmiendo.

—Ahora Hana. —Me acerqué a ella—no tengo ánimos para tus estupideces.

Realmente no tenía tiempo para sus caprichos de niña, en estos momentos lo único que pasaba por mi cabeza es lo que le dijo a Momo antes de que se vaya de aquí. Hana me fulmino con la mirada y fue en busca de sus padres.

—¿Estas bien?—preguntó Jungkook, se veía sorprendido, yo asentí con una sonrisa. Hana llegó unos minutos después junto a sus padres, ambos nos pusimos de pie.

—___ que sorpresa tenerte aquí, tanto tiempo—la señora Hirai me saludo con un abrazo. —Hola—saludo a Jungkook.

—Él es Jungkook, un amigo...

—Buenos días—saludó igualmente el señor Hirai.

—Mucho gusto—Jungkook saludo con una sonrisa dulce y de una forma muy educada.

—Si buscas a Momo ya no vive aquí. —Soltó Hana desde una esquina de la casa.

—Hana. —Le llamó la atención su madre.

—Lo sé—los tres Hirai me observaron—necesitamos hablar, tomen asiento por favor... Tu también Hana.

Ella obedeció y se sentó junto a su padre, Jungkook y yo hicimos lo mismo.

—Ayer su hija me contó todo lo que le hicieron y dijeron... Verán, no estoy aquí para ser comprensiva con ustedes, ¿saben? los respetaba mucho ¡pero eso se acabó en el momento que echaron a su hija menor a la calle! —apunté hacia afuera, todos me miraban impactados por mi actitud.

—No deberías meterte donde no te llaman. —Añadió Hana—no eres nada para nosotros.

—Lo sé—retomé mi postura—y créeme que no me interesa ser algo para ti cariño—le mostré una sonrisa burlona a Hana—y se convirtió en mi problema cuando mi amiga de años me llamó porque no tenía dónde pasar la noche.

—Eres joven, no entiendes lo que sentimos nosotros con la noticia que nos dio—comentó el padre—no tienes ni idea...

—No tiene nada que ver con que sea joven, se trata de tener la mente abierta, ya ven a Hana, es joven y aún así le dijo algo horrible a su hermana menor.

—¡¿Que quieres que hagamos ah?! —la señora Hirai explotó de rabia.

—¡Que acepten a su hija joder!—me puse de pie—ella esta mal, siempre fue muy apegada con ustedes, los idolatraba, pero también les temía... Ella sabía en el "problema" que se estaba metiendo al contarles... —mi voz se quebró pero no iba a llorar frente de ellos, no.—deberían agradecer que fue sincera con ustedes, maldición. ¿Creen que es fácil contarles a tus padres que eres lesbiana?

Jungkook notó que no estaba bien, se puso de pie y me dio un abrazo para consolarme, el cuál acepté sin problemas.

—Señores—habló Jungkook—no nos conocemos y no conozco a su hija, sé que es una buena persona—suspiro—estoy seguro que han pasado momentos únicos con ella, que les ha dado mucho orgullo... ¿En serio dejaran ir a una hija solo por su orientación sexual?

Me separé de jungkook y me coloqué mi mochila—Amor es amor y punto.

Fui en dirección a la puerta y Jungkook fue detrás de mi. Salí rápidamente de esa casa, estaba muy enojada y eso no era nada bueno.

—¿Sabes lo que me da más rabia? —observé a Jeon—que ni siquiera les importó que a su hija le pasara algo malo, estaba triste, sola, y cansada... Gracias al cielo que no pasó nada, pero que si no hubiera sido así ¿ah?

—Tienes razón—me abrazo nuevamente—es que no me cabe en la cabeza que hicieran algo así... —acarició mi cabello—¿Quieres hablar? Podemos volver caminando a casa.

Yo asentí y nos fuimos de ese lugar, de todos modos no estábamos tan lejos.

—¿A que universidad vas?—preguntó.

—A la... —me interrumpió.

—¡Espera! Déjame adivinar—lo pensó por unos segundos.

—Bien, adelante—reí.

—Si lo adivino tu...—se posicionó frente a mí y se agachó un poco para quedar a mi altura.

—¿Yo qué? —me crucé de brazos en espera de una respuesta probablemente estúpida.

—Si adivino me darás un beso...