💙 Rubegetta 💜

El Trauma De Vegetta

Vegetta seguía a Rubius con mucho esfuerzo, se sentía una carga para este pero a la vez le gustaba recibir tanta atención, pues siempre estaba solo en su isla. Le gustaba que el osito estuviera con él, se sentía la persona más afortunada a su lado. Llegando a la cocina Rubius le dijo que si calentaba agua para los fideos, Vegetta asintió silenciosamente, había un silencio muy incomodo, pero Vegetta no se daba cuenta de eso porque estaba perdido en sus pensamientos, en cambio Rubius si, se preocupaba porque Vegetta estaba muy callado, terminaron de hacer la cena y Rubén la sirvió en unos platos qué había encontrado y sirvió vinito de Luzu en unas copas para acompañar la cena. Vegetta jugueteaba con la comida en silencio y no se la comía

Rubius: ¿No qué tenias mucha hambre?

Vegetta: Emm... si

Rubius: ¿Por qué no comes?

Vegetta: Por... ehh... solo me aseguraba de que no estuviera muy caliente -dicho esto llevo la comida a su boca-
El pelinegro abrió los ojos como plato y se quedó paralizado

Rubius: ¿Vege?

Vegetta: Este... es... el espagueti... MÁS DELICIOSA QUÉ EH PROBADO

Rubius: Por dios no está tan buena, aparte si te sabe tan bueno será porque me ayudaste a hacerla

Vegetta: No, reconozco que mi espagueti es muy bueno -Dijo con orgullo- pero este tiene un sazón incluso más bueno ¿Qué le pusiste?

Rubius: No se de que me hablas :/

Vegetta: Bueno pero luego me enseñaras como preparas el espagueti
(aclaración: Vegetta nada más ayudó calentando el agua, todo lo demás lo hizo Rubius)

Seguido de sus palabras devoró el espagueti, y pedía platos y platos de este hasta que se lo acabo

Rubius: Yo pensé que íbamos a comer esto mañana como sobras

Vegetta: Perdón, pero estaba delicioso :³

Rubius: Ya qué, mañana voy de nuevo al pueblo de compras y te preparo otra cosa

Vegetta se levantó de la mesa como pudo, intento disimular su dolor lo cual se le daba muy bien y subió a su cuarto. Rubius acomodo unas cuantas cobijas y almohadas dispuesto a dormir en el sofá. Habían pasado como 30 minutos y no podía dormir cuando escucho a Vegetta gritar su nombre, el subió a la habitación del mencionado para ver que necesitaba

Rubius: ¿Qué pasó, Vege?

Vegetta: ¿Dónde estabas? -miro aliviado-

Rubius: En el sofá

Vegetta: Ah bueno, ¿Y ya te vas a dormir?

Rubius: En eso estaba

Vegetta: Pero pensé que te dormirías a mi lado -hace mirada triste-

Rubius: ¿Quieres que me duerma contigo?

Vegetta: Chi, a menos que tu te quieras dormir en el sofá

Rubius: Bueno será mejor que me duerma contigo, claro por si necesitas algo

Vegetta se movío a la orilla de la cama para qué el castaño se acostara a su lado

Vegetta: Buenas noches, Rub

Rubius: Buenas noches, Veg

Media noche:

Vegetta se despertó gritando, llorando y sudando. Lo que preocupo al oso

Rubius: ¿VEGETTA? ¿TAS BIEN?

Vegetta: uff... si, solo una pesadilla

Rubius: ¿Qué soñaste?

Vegetta: No me acuerdo -dijo mientras desviaba la mirada-

Rubius: Bueno, ¿Quieres agua?

Vegetta: No gracias, ya me voy a dormir de nuevo

Rubius: Ok boomer

Se volvieron a acostar y Rubius sentía una respiración muy agitada a sus espaldas, obviamente era Vegetta asustado, así que se volteo quedando en la espalda de Vegetta y lo abrazó. El pelinegro comenzó a calmarse y a quedarse dormido, Vegetta era como un bebé, por eso necesitaba el apoyo del oso. Estas noches se repetían muy seguido, y eso preocupo a un más al castaño quien le preguntaba su estado a Vegetta el cual siempre cambiaba el tema o decía que estaba bien y ya.

Rubius: Vegetta... tenemos que hablar

Vegetta: ¿Qué pasó Rub?

Rubius: Cómo tú no me quieres contar nada de lo que te pasa, te llevaré con un psicólogo

Vegetta: ¿Pero qué dices? Como si estuviera loco

Rubius: ¡Samuel! -gritó en un tono serio-

Vegetta se quedó callado por unos segundos al escuchar que el oso lo llamó por su verdadero nombre

Vegetta: Esta bien, iré -Le hizo una cara de poco amigos y se fue a la puerta principal de la mansión-

Rubius: Vege...

Vegetta: ¿Qué? -dijo enojado-

Rubius: Te quiero, por favor no te enfades

Vegetta: Esta bien -Le hizo una sonrisa y salió a su isla-
(aclaración: Vegetta ya se encontraba mejor físicamente)