🏮Juguemos como solíamos hacerlo, Amane🥀

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También lo amaba... Amane también lo amaba.
Eso significaba que correspondía sus sentimientos, ¡qué feliz estaba!

Tsukasa lo besó, pero esta vez era diferente, se sentía mucho más diferentes a los mil besos que le dió durante muchos años.
Introdujo su lengua tocando todos los dientes de Amane, quería memorizarlos y tener el recuerdo en su mente que durara para siempre.

Amane por primera vez contestó el beso sin sentirse presionado u obligado, los leves toques que sus lenguas experimentaban eran suficientes como para alimentar el extasis que Tsukasa empezaba a sentir dentro de si.

-Amane...¡estoy muy feliz! ¡Por fin correspondiste un beso!-

-Se sintió extraño p-pero sí, lo hice por ti Tsukasa.- no iba a mentir a pesar de que sentía acorralado.

Debería estar feliz, muy feliz.

-Eres horrible mintiendo, Amane- su mirada disfrazada de una fingida felicidad retomó la expresión que tuvo todo el día -Estos labios ya no son míos, la besaste Amane, la tocaste como a mi nunca hiciste , tú aceptaste su declaración, TU la tocaste, TU LA BESASTE- su juicio nublado por la ira no me permitió ver como conforme su frustración aumentaba el agarre en el cuello de su gemelo también.

No pensaba matarlo, oh no
Le mataría de otra forma

-Amane, eres realmente malo, mira lo que haz hecho- liberó su cuello y con delicadeza agarró su mano para llevarla a su entrepierna. -Eres muy lindo Amane, ese es el motivo del porqué los demás no pueden tenerte- con la mano de su hermano comenzaba a aumentar la velocidad de su fricción.

Decir que estaba asustado era una mentira porque asustado es un sinónimo muy pequeño a lo que sentía en estos momentos.

Sintió como su hermano bajaba su pijama, no podía hablar, por más que quisiera su voz no salía, apuesto que Tsukasa estaba disfrutando de su expresión, su indefensa expresión mientras bajaba su ropa interior.

-Amane, ¿recuerdas cuando nos bañábamos juntos de pequeños? Siempre quise agarrar esta parte de ti, pero nunca pude hacerlo al sentirme juzgado por la mirada de nuestra madre. Ella siempre me repetía que tocar las partes de mi hermano estaba mal ¿piensas que está eso mal?- mientras contaba esta anécdota iba subiendo al regazo de su hermano y frotaba con incesante lujuria su trasero con su parte baja desnuda de su gemelo.
-J-joder, quien diría que serías mi postre favorito, eres realmente delicioso- con una sonrisa completamente excitada agarró el pene de su hermano para estimularlo

-N-no, y-ya basta Tsukasa, mi hermano no haría esto, él n-no me tocaría así- traba con todas sus fuerzas empujarlo, se sentía sucio que lo estuvieran forzando a estar desnudo y dejarse tocar, mas si es tu familiar, tu amigo, tu hermano, tu gemelo.

Tsukasa masajeaba con más insistencia, casi como si quisiera lastimar al mayor. Lo confundían las palabras de Amane, tal vez él en serio no quería que lo tocaran, pero entonces por qué le decía cosas muy lindas? Debía estar mintiendo, claro que correspondía su amor, era lógico.

-Oh A-amane, puedo sentirlo, estás igual o más excitado que yo en estos momentos. Tu amiguito está muy duro ¿qué tal si comenzamos con la diversión? Sería muy egoísta que no me dejaras a mi divertirme- sonriendo depositó otro beso en su mejilla, uno suave pero que daba a entender sus intenciones. Tsukasa bajo su pijama y su ropa interior también. -La situación ya no es tan incomoda cierto? Ahora estamos iguales- se acomodó alineando el miembro de su hermano con su entrada y poco a poco comenzó a introducirlo en sí-U-uh, e-espero no lastimarte Amane, a-ntes de venir intenté prepararme lo mejor que pude.