La chica de los ojos verdes #Albalia

22 - QUEEN

Natalia

La noche nos sorprendió allí tumbadas en mitad del bosque, las horas habían pasado volando al lado de Alba. Ella tenía el poder de que el tiempo se esfumase a su lado. Recogimos todo lo que habíamos traído y volvimos a la moto, allí nos montamos y volvimos por el mismo camino que habíamos llegado. 

Mientras conducía no podía parar de pensar en todo lo que había pasado ese día, habíamos hablado de muchos temas, Alba me había contado alguna cosas de sus relaciones anteriores, sus manías y sus miedos. Yo también le conté las cosas de mi pasado y el por qué era así ahora, mi forma de ser se había ido formando por todo lo que había vivido. 

También nos habíamos estado besando, algunas veces eran besos tímidos y otras veces eran besos salvajes buscando que nuestros cuerpos ardieran de deseo. Pero tampoco queríamos montar ningún espectáculo en mitad del bosque.

Aparqué la moto delante de su portal y la ayudé a bajar, nos quitamos el casco y se me quedó mirando.

Natalia: Ha sido una tarde/noche increíble. Mucho mejor de lo que me imaginaba... Haces que a tu lado las horas pasen volando. 

Alba: Gracias por enseñarme ese lugar y por hacer de esta tarde, una tarde inolvidable. ¿Te gustaría subir? Podemos pedir pizza para cenar.

Natalia: Habrá que pedir permiso a Queen a ver si te quiere compartir un poco. 

Alba: Seguro que le caes bien, tranquila. 

La verdad es que no quería separarme de ella todavía y eso de pasar unas horas más a su lado me parecía el mejor plan del mundo. Así que subí detrás de ella a su piso, nada más abrir la puerta apareció Queen por el pasillo, se notaba que la había echado de menos. Normal, era imposible no echar de menos a la rubia.

Me agaché para saludarla, la gata no paraba de olerme. La acaricié, era muy suave, parecía un peluche. Era totalmente gris y tenía los ojos igual de verdes que su dueña.

Alba: Me parece que ya la tienes ganada. Porque normalmente cuando viene gente, se esconde. 

Natalia: Entonces la tengo igual que a la dueña, aunque se haga la dura estás loca por mi huesos. 

Alba: ¡Qué flipada eres! 

Me estuvo enseñando un poco el piso, allí donde íbamos Queen venía con nosotras, después nos sentamos en el sofá, y Queen se puso entre las dos. No paramos de darle mimos hasta que se quedó dormida. 

Pedimos unas pizzas, una de cuatro quesos y otra margarita. Que no tardaron nada en llegar, se notaba que teníamos hambre, porque apenas hablábamos. Después de cenar, recogimos las cosas y después Alba me dijo que me quedará a ver un capítulo de una serie. 

Me tumbé en el sofá, mientras Alba iba al baño, cuando llegó se tumbó encima mía. 

Natalia: Me encanta que me aplasten. 

Le empecé a acariciar la espalda, ella tenía apoyada su cabeza en mi pecho y tenía los brazos a ambos lados de mi cuerpo. Nuestros cuerpos encajaban perfectamente. Así estuvimos hasta que vimos aparecer las letras que anunciaban el final del capítulo.

Bajé la mirada y la observé, ella seguía mirando la televisión sin darse cuenta de nada. Era preciosa. Ella levantó la vista y me pilló mirandola. Nuestras bocas estaban muy cerca y poco a poco se juntaron hasta fundirse en un beso. 

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¿Os ha gustado este capítulo?

¿Cómo acabarán estas dos?

¡ESTOY MUY FELIZ POR TODO EL CARIÑO QUE LE ESTÁIS DANDO A ESTA HISTORIA! Mil gracias de corazón, esto anima un montón a seguir escribiendo. 

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