Changing our Colors - AU (Traducción Supercorp)

Capítulo 2 : La apertura

Kara llegó al restaurante el sábado por la mañana a las 6:00 a.m. Tenía más de doce horas hasta la apertura suave, pero estaba demasiado nerviosa para hacer otra cosa que comprobar y volver a comprobar la configuración. El personal de la cocina llegaría más tarde esa mañana y los camareros llegarían un par de horas antes de la apertura. Kara quería un poco de tiempo sola para revisar todo.

A eso de las siete de la mañana, Kara se sorprendió al oír que llamaban a la puerta del restaurante. Se acercó a la ventana y se asomó para ver quién estaba allí. Para su deleite, Alex y Eliza se quedaron afuera de la puerta. Se apresuró y la abrió.

"¡Sorpresa!" Eliza gritó y Alex se quedó allí sonriendo ampliamente y sosteniendo una bandeja con tres cafés y una bolsa de pasteles.

"Oh, Dios mío", dijo Kara, "entra, entra. ¿Cómo sabían ustedes que estaría aquí?"

"Supuse que probablemente llegarías antes de que saliera el sol", dijo Alex.

"No estás muy lejos", dijo Kara, "¿Eso es café para mí?"

"Sí, y también tenemos un poco de kolach de arándanos", respondió Eliza. "Sé que a pesar de que estás rodeado de comida te olvidas de comer cuando te pones nervioso".

Kara mordió el kolache y tarareó suavemente: "Wow, estos son realmente bastante buenos. La fruta es fresca. Esto no podría haber venido de una panadería en cadena ".

"Nunca aparecería en el día de apertura de su restaurante con donas de cadena de tiendas, incluso si son las favoritas de Alex", dijo Eliza.

"Culpable de los cargos. Dame un glaseado de Dunkins y estoy totalmente listo para irme ", respondió Alex riendo.

"Hay una panadería y cafetería local en mi vecindario donde te compré esto", dijo Eliza.

"Tal vez algún día podríamos ir juntos", dijo Kara, "me encantaría hablar con los lugareños por aquí acerca de dónde obtienen sus productos".

"O podríamos ir y disfrutar de una taza de café", dijo Eliza riendo.

"También me encantaría, Eliza", respondió Kara. A pesar de que Eliza la había llevado a su familia después de la muerte de sus padres, Kara nunca había llamado  su madre. No tenía nada que ver con su amor mutuo. Eliza había apoyado a Kara inequívocamente, incluso cuando Kara no estaba bien. A Kara le pareció que sería irrespetuoso con su madre. Todavía la echaba mucho de menos.

Alex deambulaba por el comedor revisando todo mientras Eliza y Kara conversaban. Estaba muy orgullosa de Kara. Ella trató de ayudar mientras Kara luchaba después de la muerte de sus padres. Kara siempre ponía una cara fuerte cuando estaban cerca de los demás, pero había muchas noches en que tenía que meterse en la cama de Kara para calmarla de sus pesadillas. Hubo algunos años en que Kara luchó tanto que Alex se preguntó si alguna vez saldría bien. Ver que el restaurante se veía tan hermoso en su ciudad natal llenó de alegría a Alex.

"Kara, este lugar es increíble", dijo Alex, "Es así como tú".

"¿Qué quieres decir con que soy yo?" Kara preguntó.

"Los colores, la decoración", dijo Alex, "es tan cálido y acogedor, pero aún se ve elegante y refinado. No puedo esperar para verlo lleno de gente esta noche ".

"Espero que la gente aparezca", dijo Kara.

"Kara, es posible que aparezcan demasiadas personas", dijo Alex, "todos en la ciudad han estado hablando de eso. No creo que te des cuenta de lo importante que eres.

"Estoy nerviosa", dijo Kara, feliz de poder hablar sinceramente con su familia.

"Kara, trabajas más duro que cualquier otra persona que conozco", respondió Eliza, "estoy segura de que estás preparado para esta noche. No tienes nada de qué preocuparte". Eliza jaló a Kara en un fuerte abrazo.