El alfa y el omega de Rivia.

VIII

- ¿Estás seguro?

- Es la tercera vez que me lo preguntas, Yennefer. Ya te he dicho que sí.

- Sólo quiero que sepas a qué te atienes, Jaskier.

El bardo suspiro por décima vez mientras se tallaba la cara frustrado. A este paso perdían tiempo y Yennefer parecía no darse cuenta de eso. Extendió la mano desesperado mientras los Winchester veían todo expectante y sentían la tensión entre el omega y el alfa.

- Nos ayudará a encontrar a Geralt, ¿no?

- Sí, pero...

- No necesito saber más -Dijo rápidamente el bardo mientras hacía el amago de arrebatarle el frasco a la alfa que sólo le gruñó en respuesta tornando sus ojos violetas al momento que lo apartaba. El omega se alejó más por instinto que otra cosa mientras veía a la alfa con el ceño fruncido.

- Jaskier...-Bufó tratando de calmarse antes de suspirar y tornar su expresión a una más suave- Tienes que entender qué hay dos alternativas de esta cosa y que no la hubiera sugerido si no hubiera una mejor opción -Susurro al tiempo que se acercaba al bardo.

- Castiel tuvo el instinto de interponerse, pero Sam lo detuvo. Eso era cosa de la alfa y el omega.

- Tienes que entender, Jaskier -Susurro mirándolo a los ojos- Que esta fórmula puede hacer que tu olfato se agudice lo suficiente junto con tus demás sentidos o...

- O que me maté por no poder soportarla -Añadió el bardo tomando el frasco. Yennefer lo soltó sin más- La condición para que esto funcione es...-Sus labios titubearon.

- Si eres su omega destinado -A completo la alfa sonriendo poquito- Realmente este pocima fue mi primera opción porque la creía la mejor y con más sentido -Le sonrió poquito.

- Creo que sólo estás buscando la forma de matarme -Dijo divertido mientras arrugaba la nariz dispuesta a llevarse la botella a la boca, Yennefer le tapó esta con la mano, deteniéndolo.

- Sí quisiera, ya lo estarías -Dijo de la misma forma la bruja sonriente antes de que su expresión se tornara seria- Geralt me mataría si dejara que le pasara algo a su omega -Añadió.

Y de alguna u otra forma eso le dió la confianza que necesitaba a Jaskier. Era lo que necesitaba de alguna forma. Él y Yennefer habían hecho las paces silenciosamente hace mucho y sabía que la hechicera no permitiría que le pasara algo.
Le sonrió un poco antes de voltear a ver al alfa y beta y sonreírles también.

- Hasta el fondo -Dijo para sí y se empino el pequeño frasco con contenido azul. Hizo una mueca- No fue tan ma...

Antes de que pudiera terminar esa oración Jaskier se llevó una mano a la garganta y comenzó a toser con fuerza. Sus rodillas temblaron y cayó sobre estas mientras los otros tres lo rodeaban preocupados.

- ¡Jaskier! -Grito el alfa de ojos azules tratando de sostener al omega, pero la misma mano de este lo detuvo. Jaskier aún permanecía con la mirada gacha sin dejar de toser.

- E-estoy bien, estoy bien...Sólo...Sólo estoy ...-En un momento se abrazó a las faldas de la alfa mientras esta le sostenía la cabeza para ayudarlo a pasar el cambio. Yennefer sonrió para sus adentros sabiendo lo que estaba pasando-... Adaptándome...-Susurró.

Jaskier levantó la mirada y los otros dos pudieron ver como un color antinatural plateado aparecía en los antes azules ojos del omega haciendo que el alfa y el beta lo miraran sorprendidos mientras Yennefer lo veía complacida.
Mientras el bardo parpadeaba varias veces sintiendo el picor arder en sus ojos y veía todo a su alrededor como si era la primera vez.
Y es que así lo era.
Jaskier veía lo que antes no veía y oía lo que antes no, arrugó su nariz al percibir los olores nuevos.
Era un omega recién nacido llorando ante la luz de la noche que la entrada del bosque les ofrecía.
Volteo a ver a la alfa con una ligera sonrisa.