Hilo rojo

Soy tu presente y posiblemente tu futuro

Una chica en la escuela, contestando un examen mientras el profesor observa a qué nadie se copié. La chica se levanta y entrega el examen con una mueca, no se acordaba de mucho de lo que habían visto, su mente estaba en otro lugar y sabía que no sería nada bueno. El maestro observa como sale del salón sin quitarle la mirada, sin notar que dos alumnos ya estaban copiando, regresa su vista a los demás.
Aquella chica de cabello oscuro fue por una botana, tenía hambre y no había podido comer bien en el recreo por intentar repasar sus apuntes, el profesor con quién tenía examen era el mismo que le pidió declarar y armar una poesía para decirla el 20 de noviembre, ya la tenía escrita, sin embargo, no podía aprenderse la de memoria y más con los exámenes presentes
- Verónica, regresa a tu salón. - le dice un prefecto

- Están en examen y yo ya terminé prefecto, me dejaron salir por un momento. - dice de manera respetuosa - Regresare ahora, solo quería comprar algo de comer

- Bien, no quiero tener que llevarte con el director, porta te bien.

La chica regresa y ve a la mayoría fuera, solo suspira y entra por su celular
- Verónica a la una nos vemos para ensayar, espero que ya te sepas la poesía. - dice de manera seria

- Si, está bien

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Al poco rato, los dos se vieron cerca del laboratorio de la escuela, la chica respiro profundo y empezó a recitar la poesía mientras el profesor la iba siguiendo con una hoja donde venía todo escrito hasta que ella quedó en blanco y dejo de hablar
- Solo has dicho la mitad de la poesía, si no puedes, di me y haré que alguien más lo haga Verónica, falta poco para que sea el homenaje - dice serio

- Lo siento, es que los exámenes me han hecho que confunda todo. - suspira - Quiero hacerlo, pero tener problemas en casa, los exámenes y... - confirmar que usted me ha estado gustando desde que entramos a segundo es mucho para mí pensó Verónica haciendo una mueca

- ¿Y?... Mira, entiendo que estos días no sean los mejores pero di me desde ahora sí vas a seguir o le doy el lugar a alguien más, ya te dije porque te escogí, no quiero que sigan escogiendo al mismo alumno para representar nos, siempre es ese chico y se que tú declamas hermoso Verónica, tal vez no ganaste en el concurso pero se que lo hiciste bien. - la mira a los ojos - Escuchar a los maestros lo bien que lo hiciste, que saliste de tu zona de confort, tienen y tengo una gran expectativa tuya, sabemos que llegarás lejos...

- ¡Lo haré! Vamos de nuevo. - Verónica agarro aire y se puso a recitar sin ningún error

- ¡Bien! - aplaude el profesor - Es hora de comenzar de hacer los ademanes - sonríe

Verónica abrazo al profesor pero este la separó de inmediato, haciendo que está acción le rompa el corazón
- El director me vigila mucho, a todos, no quiere que haya contacto afectivo con alumnos. - dice con una mueca - Iniciemos ahora, creo que deberías de hacer este movimiento...

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Meses más tarde, Verónica se encontraba en clase, con aquel profesor quien ahora andaba dando indicaciones a su clase
- Bien, el que termine esta actividad puede ir saliendo de mi clase. - dijo mientras se ponía a hablar por su celular

Todos se pusieron a trabajar, el maestro se paró para ver si todos estaban haciendo su actividad, aquella chica, se encontraba mejor y ya no se sentía triste pero si sola a pesar de tener amigos y amigas. Verónica se paró de su asiento y alcanzó al maestro en la parte de atrás, lugar donde se sentaban los chicos más relajosos de su salón.
- Ya termine. - dijo Verónica entregando su libreta. El maestro la reviso y lo firmo - Nos vemos profe - se volteo pero...

- Ah, no te vas a despedir de mi. - el profesor le había puesto el cachete para despedirse de beso en cachete pero ella se avergonzó porque todos se quedaron mirando, así que solo lo beso rápidamente y fue a guardar sus cosas. - Hasta el lunes Verónica...

Muchos momentos fueron los que convivió con ese profesor durante la secundaria pero lo que rompió ese lazo que ella creía que era fuerte se desvaneció el día en que tuvieron relaciones sexuales
- Así que eso paso con mi profesor y mi primo pues solo fueron fajes. - menciona toda sonrojada Verónica - Sabías que no era virgen pero quería que supieras como fue que perdí algo valioso para mí, en alguien que no se lo merecía

- Cariño, no me importa, para que entiendas no juzgarte tus acciones de antes, lo que hayas hecho antes no importa, me importa lo que hagas ahora mientras estoy contigo. - dice su novio con tranquilidad y junta su frente con la de ella mientras mira a sus ojos. - Eso ya pasó, no te niego que es algo molesto e incómodo pero eso tú lo hiciste y yo también he hecho cosas que tal vez te molesten pero, ¿Que le vas a hacer? ¿Vas a volver al pasado y cambiarlo? Claro que no, me alegra que me lo cuentes porque así te conozco un poco más pero no te voy a dejar por eso. Soy tu presente ahora y posiblemente tu futuro, te amo

La chica abre sus ojos a más no poder, el primer te amo, ella quería hacerlo primero, hoy lo iba a decir ella misma pero Gael se le adelanto de una manera única
- Yo también te amo. - tomo a su novio por las mejillas y le plantó un beso intenso y cargado de amor puro, no había lujuria, solo amor.

Los dos se agarraron de la mano y se pararon de los escalones, estaban en la entrada de la iglesia donde se conocieron por primera vez y quién sabe, a lo mejor algún día se podrían casar en esa misma iglesia en dónde surgió el amor a primera vista, el destino los ha unido...