Siempre mía, princesa 👑

Loved👑

Cuando llega a su apartamento, Zoe ya se encontraba ahí pero no estaba sola, Christian estaba con ella esperándola.
-¿Fiesta de bienvenida? -se sentía agotada por tantas emociones en una sola noche.
-Ali....
-Quiero disculparme con ambos por haberme distraído..-Zoe se le adelanta a Christian.
-Y yo necesito proponer algo...-dijo él observando a Ali.
-Ambos tienen un gran motivo para charlar pero no tengo ganas.-y simplemente los dejó solos en la sala.  "Si ambos supieran todo lo que sucedió.." 
-Ali...-Zoe se armó de valor y entró a su habitación detrás de ella.-¿estás bien?
-Zoe...-su voz cansada le advertía que no estaba de humor para eso.
-Sé que no deseas escucharme pero necesito que sepas que jamás te oculte que él volvió...-clava sus ojos  en Zoe.-¿porque te ocultaría eso?.-camina hacia ella y toma asiento en la cama a su lado.-por más que me dijeras todos estos años que no, sé que lo esperaste todos y cada uno de los días..-baja sus manos a las tiras de sus zapatos de tacón y empieza a desabrocharlas.
-Debiste verlo..-su voz sale en un susurro cansado y casi ahogado.-debiste ver cuando vio la cicatriz..-con fuerza cerró los ojos y se trasladó a ese momento en el que sus ojos azules ubicaron la cicatriz, en el que esos ojos azules mostraron tristeza, rabia e impotencia mezcladas.

-¡Oye! -su voz atrae su atención.-te ves tenso..-comienza a masajear sus hombros con aire seductor.-debes descansar.-una sonrisa se dibuja en sus labios.
-Sí, debería.-dijo antes de levantarse del taburete y bajar un escalón.-¿no vienes?.-le dijo a la pelirroja que prácticamente corrió hacia él para seguirlo. 

Una vez en su apartamento, ella lo acorrala contra la pared de manera "seductora" y empieza a besarlo con pasión.
-¿Puedo? -ni siquiera espera a que él le conteste, simplemente  arranca los botones de su camisa y la imagen de su torso lleno de tatuajes y perfectamente tonificado, se hace visible frente a ella.-Por Dios..-esta tan absorta por ese físico que se carga que ni tiempo de respirar bien le dio porque él  la atrajo hacia sí para besarla con pasión. "No pienses en ella..."  Bajó sus manos a sus piernas y las enredó en su cintura para llevarla con más facilidad a su cama.-esto es el cielo..-exclamó ella completamente embobada por el camino que iba dejando con su lengua desde su cuello hasta su pecho pero se detuvo en cuanto la imagen de ella se adueñó por completo de sus pensamientos.-¿porque te detienes?.-dijo con la respiración agitada. "¡Puta madre! ¿Justo ahora?"
-No estoy de humor para esto. -se aleja de ella y  toma asiento en la orilla de la cama.
-¿Es enserio?.-al ver que no contesta, comprendió que era muy enserio.-bien...-a regañadientes sale del apartamento dando un portazo.
-¿En serio tenías que aparecer justo ahora?.-se levanta de la cama y camina hacia la cocina en busca de whisky o ron o algo que lo haga olvidar esta noche o para ser más específicos, a ella.

-¿Mala noche? -pregunta Christian al verla con cara de haber comido una cebolla entera.
-Algo así. -coloca la carpeta que debe firmar frente a él.-debes firmar. -la cabeza le martilla horriblemente por haberse tomado un jodido Océano de golpe ayer por la noche.
-Señor...-Jenni asoma su rostro por la puerta.-una visita. -ambos estaban extrañados,  no habían recibido llamada alguna de nadie.
-Que pase. -le indico a la rubia que de inmediato salió.
-¿Visita? -dice ella sorprendida.
-Estoy igual que tú.-un golpe en la puerta interrumpe su conversación.-pase..-a paso lento pero seguro, Harrison entra y toma asiento frente a él.
Ambos están completamente sorprendidos ante su inesperada visita.
-Christian..-dice este con una sonrisa.
-Que sorpresa verte Harrison.-le devuelve la sonrisa.-no sabía que habías vuelto.-sus ojos azules suben hasta Alissa que aún esta de pie junto al escritorio de su jefe.-eso es todo, gracias Ali.-con un asentimiento de cabeza, comienza a caminar hacia la salida pero cuando esta junto a él, su mano se aferra a su muñeca con fuerza.
-Necesito preguntarte algo Christian.-un vacío se adueña de su  estómago al imaginar que había descubierto su plan.-y a ti también..-le dijo antes de soltarla para permitirle retirarse.
-¿Que es? -dijo Christian cuando Alissa había salido.
-¿Que asuntos tienes con mi hermana?-esa pregunta le bajó todo el terror que sentía.
-¿Asunto? -dice con una risa.-nada realmente.
-¿Nada? -pregunta alzando las cejas.-¿qué hacían juntos ayer en esa discoteca? Si no tenían "nada" importante.
-Solo tomamos un trago.-ese cuento no se lo tragaba ni el papa.
-¿Un trago? -una sonrisa se dibuja en sus labios.-muy bien...-dice antes de levantarse lentamente.-eso era todo, viejo amigo.-comienza  a caminar hacia la puerta.
-Harrison...-se detiene y gira el rostro para mirarlo.-me alegra verte. -le regala una media sonrisa o al menos eso parecía desde la posición de Christian y sale de la oficina. "Algo se trae este entre manos y voy a averiguar que mierda es." 

Comienza a caminar hacia el ascensor pero se detiene en cuanto recuerda que debía hacer algo más. "El motivo principal y lo olvido como el mas cabrón.."  Recorre con la mirada el lugar y la encuentra.
-Debo llevar el documento firmado por el jefe al correo y no sé cuánto tiempo me llevará ¿puedes cuidar el teléfono por mi?.-le dice a la rubia que esta al otro lado del mostrador. Gira sobre sus talones para caminar hacia el ascensor pero se detiene en seco en cuanto lo ve a dos pasos de distancia. Su traje hecho a la medida se acomoda tan bien a su cuerpo, que deja embobada a más de una en esa oficina pero y para su desgracia, él solo tenía su atención en ella.
Le hace un gesto teatralmente caballeroso con la mano para indicarle que irá tras ella. "Es que es un verdadero dolor en el trasero..."
-¿Sales?.-le pregunta cuando esta a su lado esperando que se abran las puertas de la caja metálica.
-Sí.
-Te acompaño.-clava sus ojos en él un poco molesta.
-¿Porque?
-Te dije que tenía algo que preguntar ¿no?
-Pregunta.
-Aquí no.-dice antes de entrar al ascensor.-¿no vienes?. "Este hombre me empezando a desesperar.." 
-¿Puedes hablar de una vez? Odio esperar.-una sonrisa se dibuja en sus labios por la desesperación que emana de sus palabras.
-¿Vas a trabajar en Gray Company?.-todo ese jodido misterio para esta torpe pregunta.
-¿Es enserio? ¿Todo esto para preguntar esa mierda?.-las puertas se abren y ella sale hecha una furia.
-¿Que esperabas que preguntara?.-dice a su espalda con aire divertido.
-Nada, ni siquiera esperaba volver a verte.-dice  sin dejar de caminar.
-¿Ah no?
-No.-dice girando con brusquedad para mirarlo.
-Pues yo sí quería verte.-camina lentamente hacia ella.
"¿Quería verme? ¿Porque?"  Su corazón comienza a palpitar al mil ante su mirada penetrante, su respiración se entrecorta al verlo tan cerca y sus piernas empiezan a sentirse pesadas entre mas se le queda mirando de esa manera fija.
-¿Porque? -dijo con voz neutral. No debe doblegarse o todo estará perdido.
-Ayer..-dice deteniéndose a un paso de ella.-me gustó tomar un trago contigo...-una sonrisa se dibuja en sus labios.-tener a una vieja amiga como compañera de copas es fantástico.-baja la vista al suelo con una sonrisa boba por su confesión.
-De nada..-lo dijo tan suave que creyó que lo había dicho más para sí misma que para él.
-Deberíamos repetirlo ¿no crees?.-pone una mano en su hombro haciéndola volver de golpe.  
El solo contacto con su cuerpo hace que una  corriente eléctrica recorra su espalda y lo haga dudar de absolutamente lo que se lleva en las manos pero debía cortarlo de raíz, debía borrar hasta el último sentimiento hacia ella y eso se podría lograr si solo eran amigos. "Tranquilo, solo es una amistad"
-Claro.-una respuesta vaga para una propuesta hueca.
Solo era una simple escusa para borrar todo lo que sentía hacia ella que, de alguna forma, se había metido en su mente nuevamente o quizás nunca salió.