𝐄𝐧𝐝 𝐨𝐟 𝐭𝐡𝐞 𝐝𝐚𝐲 │ Joshua Bassett

O2O. better man

Cuando la luz de el sol estaba a su máximo esplendor y la alarma de Daniela comenzó a sonar sabia de antemano que debía levantarse para evitar que Camila llegara y la jalara de los pies.

No sabia con exactitud si el resto de su familia seguía durmiendo, ya que habían regresado a altas horas de la madrugada. A lo lejos se escuchaba la melodía de un piano, y podía reconocer la voz, pero... Era imposible.

Se coloco sus tenis y en vergiza bajo a comprobar sus sospechas. Cuando llegó a la sala una sonrisa y unos ojos verdes la recibieron.

— ¿Harry? — pregunto la menor de los Félix con una mezcla de confusión y alegría

Esto parece una fic de wattpad, pensó la chica mientras se acercaba para recibirlo con un abrazo

— El mismo — dijo mientras la abrazaba — ¿como has estado?

— Demasiado bien, ¿y tu?

El chico miro el piano y toco algunas teclas — Bastante bien, dile a tu hermana que no me mire de esa forma

Camila miraba con preocupación a aquel chico de ojos verdes.

— ¿Seguro que nadie te vio?

— Estoy bastante seguro

Daniela estaba un poco incomoda ante la situación, sabia la historia de aquellos dos, así que podía sentir la tensión. Su mirada viajo entre los dos presentes.

Suspiro y dijo — Bueno, iré a desayunar

Camino hacia la cocina y busco algo, pero estaba vacía, literalmente.

— No hay nada en la nevera, si quieres pide algo por delivery — le dijo Camila extendiendo su teléfono

Daniela no tenia mas opción hasta que una notificación llego a su teléfono.

Lucas

— Bandaaa, Lucas me mando mensaje, me invito a desayunar — dijo mientras dejaba el teléfono de Camila en un sillón — se cancela todo, dile a mi mamá que no tardo nada

(...)

Narra Daniela

K pedo, fue la cosa mas incomoda de la vida.

Me cambie la pijama que traía puesta por unos jeans moms y una blusa cualquiera y le deje una nota a mi mama. Lucas me había mandado un mensaje sobra salir a caminar y eso, pero yo compraría algo para calmar mi hambre en lo que la tensión de aquellos dos se bajaba.

— ¿Estas segura de que no quieres sentarte? — Preguntó Lucas mientras me miraba comer unos tacos de canasta que había comprado en la calle

— Segura — tome un trago a la bebida que tenia — bueno, mejor busquemos un lugar.

Caminamos hasta un pequeño parque y nos sentamos en unos columpios, si seguimos siendo esos niños de 6 años que jugaban a las escondidas mientras sus padres tomaban y bailaban.

— ¿Seguro que no quieres una aspirina? Te vez de la verga — dije mientras le ofrecía de mi bebida, la cual era una Arizona 100% recomendada

— Gracias, pero no — dijo mientras tomaba de la lata

— Yo te dije que no tomaras, por muy mayor que seas esa madre te pega

— Ya se — dijo mientras se pasaba sus manos por su pelo — no lo vuelvo a hacer

Yo asentí mientras me terminaba mis DELICIOSOS tacos, que la verdad extrañaba

— Cambiemos de tema, ¿como vas con el que te gustaba?