❀𝓘 𝓛𝓸𝓿𝓮 𝓨𝓸𝓾 𝓜𝔂 𝓛𝓸𝓿𝓮 ❀

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Cuando escuchó eso Yoongi se quedó en shock por unos segundos, luego reaccionó y gritó —¡CLARO QUE SI! — Después de gritarlo se colgó del cuello de Jungkook, besando cada parte de su cara hasta llegar a sus labios y besarlos durante un tiempo, más lento y dulce.

Cuando el castaño correspondió el beso sintió como las manos del contrario se situaban en su cintura y la acariciaba con sus dedos lentamente sobre el buzo que llevaba puesto en esos momentos ya que estaban a inicios de Diciembre y lo que menos quería en esos momentos era pescar un resfriado.

—Me alegra...saber que ya... tienes confianza...en besarme —dijo Jungkook sobre sus labios sin dejar de besarlo.

Su agarre se hacía más fuerte como el olor de sus feromonas, escuchó un pequeño gemido de dolor por parte de Yoongi haciendo que se separara de golpe y aflojara sus manos de su cintura.

—Perdón, debo aprender a controlarme contigo. Salgamos del auto, dentro de mi departamento pedimos una pizza y vemos una película.

—Esta bien... —dijo Yoon sonrojado, estaba por salir del auto cuando sintió como abrían su puerta, y al ver que era Jungkook su sonrojo se hizo mayor.

Bajaron y empezaron a adentrarse hasta llegar a el elevador, entraron y Yoongi lo abrazó hasta que se abrieron las puertas.
Caminaron por el pasillo hasta quedar enfrente del departamento del menor. Sacó sus llaves y dejó entrar primero al mayor.

Unas semanas después.

Se encontraban Jungkook y Yoongi en la sala de grabaciones, los demás ya se habían ido excepto ellos con la excusa de practicar pero en realidad era porque ya habían pasado unas semanas desde que confirmaron su noviazgo y sus horarios de ensayo eran tan cansados que no tenían ni un momento a solas y solo se comunicaban por mensajes.

Una vez que el castaño comprobó que nadie estuviera cerca de la sala se acercó hacia el pelinegro abrazándolo por la espalda, enrollando sus brazos en la cintura ajena mientras sus labios descansaban en el cuello contrario.

—Bebé —dijo Jungkook sin separar sus labios de la piel del pálido. Ese apodo comenzó a utilizarlo a los pocos días que comenzaron a salir y como veía que no le molestaba, no dejó de llamarlo así —.Te extrañé.

Cuando el mayor sintió los brazos de Jungkook en su cintura, se estremeció y cuando empezó a dejar besos húmedos por la extensión de su cuello se recargo en su hombro y puso sus manos sobre las contrarias.

Se siente tan correcto. Pensó Yoongi.

—Yo también... Y mucho kookie... —dijo el mayor mientras sonreía como bobo.

—Amo cuando me llamas así —aflojó un poco su agarre para poder voltear a Yoongi y tener mejor acceso a sus labios —. Solo tu puedes llamarme así.

Unió sus labios con los ajenos, sintiendo al instante una corriente eléctrica recorrer toda su columna. Poco a poco el beso se fue encendiendo, cuando sintió la lengua ajena entrar a su boca y él hizo lo mismo con la suya. Inconscientemente se acerco más a el pálido haciendo que sus cuerpos llegasen a frotarse pero se detuvo al sentir como Yoongi se tensaba.

—Perdón —se alejó de él y lo miro directo a sus ojos—. No quiero presionarte, bien? Tengo algo para ti.

Se acercó a su mochila y sacó una caja pequeña, la cual contenía un collar de plata con sus iniciales unidas.

—Ten, espero que te guste.