Tras los eventos ocurridos en DMC5, Nero es enviado a otro mundo (El de Tate no Yuusha) debido a un libro mágico. Ahora, Nero tendra que luchar contra las olas de la calamidad junto a sus compañeros y amigos para salvar a un reino que lo desprecia.
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Ya había pasado una semana desde que Nero había sido invocado como uno de los cuatro héroes legendarios, para salvar a un mundo al borde de la destrucción, debido a las olas de la calamidad, pero luego de haber sido inculpado de un terrible crimen, Nero perdió todo el apoyo y el respeto del reino de como el héroe del escudo.
A pesar de eso, no fue impedimento para que Nero pudiera realizar misiones de cacería de monstros, entre otros trabajos para ganar algo de dinero y experiencia, ya que al pelear con su revolver y su espada, no muchos sabían que el era el héroe del escudo. Nero aprendió a realizar medicinas usando hierbas curativas que encontraba durante sus misiones de cacería, gracias a las habilidades que le otorgaba su escudo. Además, que con cada monstro de derrotaba, Nero usaba sus restos para que su escudo lo absorbiera y así ganara nuevas habilidades, haciéndolo más fuerte de poco a poco.
Un día, durante la noche, Nero caminaba por una calle oscura, cuando de pronto escucha una voz que provenía de tras de él.
– Oye, tu, el peliblanco. –
Nero volteo la mirada y vio a tres hombres, y uno de ellos le pregunta. - ¿tú eres el héroe del escudo?, ¿verdad? –
- Si, ¿Qué quieres? – Pregunto Nero.
– Tu Dinero, dámelo ahora. – Respondió el mismo hombre.
– No lo creo amigo, ¿pero que tal si bailas un poco para mí?, quizás si me entretienes lo suficiente, te de una moneda. – Respondió Nero de manera burlona señalando al hombre con su dedo.
- ¿¡Que has dicho!? – Dijo el hombre molesto, el cual saco un cuchillo y se lanzó atacar a Nero.
Nero esquivo su ataque con suma facilidad y le propino una patada tan fuerte al hombre que lo lanzo a seis metros atrás de los otros dos hombres que lo acompañaban.
- Vamos, ¿quién es el siguiente? – Preguntó Nero de manera desafiante s lao otros dos ladrones.
Al ver la fuerza de Nero, los otros ladrones salieron corrieron asustados al ver la fuerza de Nero.
- Hasta Nico tiene más huevos que esos cabrones. - Diría Nero, recordando a su amiga y armera.
De pronto, Nero comenzó a escuchar una riza que provenía desde un callejón oscuro cerca de él. Nero centra su mirada hacia ese sitio, y Nero vio a un hombre de baja estatura con un sombrero de copa y un bigote salió de entre las sombras del callejón y dijo. – Valla, al parecer los rumores sobre el demonio blanco del escudo son ciertos, estoy impresionado. –
- ¿Y tú quién eres?, ¿un hobbit?, ¿también quieres problemas? – Dijo Nero mirando al hombre de baja estatura.
– No héroe del escudo, yo le ofrezco una solución a su problema. – Dijo el enano frotándose las manos.
- ¿Problema?, ¿cuál problema? – Le pregunto Nero al enano bigotón.
- Me refiero a su problema de compañeros, Héroe del escudo. Usted, uno de los héroes legendarios, no debería de luchar solo. Yo le ofrezco algo de compañía. – Dice el hombre con sombrero.
