Protecciones (♦*♦)

6 0 0
                                    

A lo largo de mi vida, he notado que muchas personas, incluyéndome a mí,suelen rechazar cualquier tipo de "protección" que se suele dar por personas cercanas, generalmente mayores, que tienen índole religiosa o similar.

Honestamente, es normal llegar a rechazarlas, por muchos motivos, que si no crees en ese tipo de cosas, o que si te parece algo absurdo.

Siempre y cuando tus propias creencias y convicciones te lo permitan, estaría bien aceptar cualquier protección que te intenten dar, sean bendiciones, algún tipo de imagen sagrada o "amuletos".

¿Por qué?

Si es que no funcionan ese tipo de cosas, o en realidad son algo poderoso y útil,es bastante poco relevante.

Es bueno aceptarlas no por lo que son, si no por lo que representan.

Éstas no son protecciones contra el mal, o contra la brujería o cualquier cosa de esas, representan la buena voluntad de las personas que te dan está protección, siempre implica aunque sea un pequeño esfuerzo en cualquier aspecto de parte de esas personas, y significa que dentro de lo poco o mucho que te pueden llegar a dar, siempre van a apoyarte, a estar ahí contigo, esas protecciones son su buena voluntad y su convicción por apoyarte, o al menos por demostrar interés genuino en tí.

Si vienen de tus padres, de tus familiares o de personas cercanas, está bien.

Pongamoslo en otras palabras.

Digamos que alguien te regaló una caja de chocolate blanco sin tener conocimiento de tus preferencias, tú no comes chocolate blanco, a ti no te gusta el chocolate blanco.

Tienes dos alternativas, puedes rechazar la caja, amablemente o no, diciendo que tú no comes ese tipo de chocolates y cualquier otro argumento que tengas.

O puedes aceptar la caja, podrías dársela a alguien que si le guste el chocolate blanco o incluso darle una oportunidad, si te gusta o no, ya pasa a segundo plano.

La importancia de esto no es que te guste o no el chocolate blanco. Es que ese alguien tiene interés en ti, y busca darte algo que te pueda gustar, que te pueda hacer sentir bien, aunque sea un pequeño momento, no es como si te estuviesen dando una caja de chocolate blanco por joder, nadie regala el chocolate y mucho menos el dinero.

Es casi lo mismo con las protecciones, independientemente de la religión o creencia de donde provengan.

Y bueno, eso es todo, ustedes son libres o no de seguir estos consejos.

Niskerz, fuera.

Por Amor De Dios, No Leas EstoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora