Manchame de tí

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Eran las nueve de la mañana cuando Natalia se encontraba en su cama dando vueltas de un lado para otro debido al frío que tenía. Finalmente se levantó y se puso una bata para ir a hacerse un café calentito, no sin antes dejar un beso en la cabecita rubia que dormía plácidamente.

Por suerte, la mañana había empezado bien. Tenía varios mensajes de Virginia comentándole que el productor quería hablar con ella sobre el disco. Natalia llevaba tanto tiempo soñando con eso que había compuesto demasiadas canciones y sabía perfectamente cuales quería para el disco.

Fue a contestar a Virginia cuando salió su hermana de la habitación.

-Hola, ¿Qué haces despierta?- preguntó Elena medio dormida rascándose un ojo con el puño de la manga

-Lo mismo te digo

-No tengo sueño- contestó sentándose en la mesa junto a Natalia

-Tu cara no dice lo mismo- dijo antes de dar un sorbo al café

-Eee...si bueno...no se, tengo la cabeza en otra parte

-¿En otra parte?¿Ha pasado algo?- arqueó una ceja

-No- dijo tan bajito que no sonó nada convincente

-Elena...- exigió

No contestó.

-¿Sabes que puedes confiar en mí para todo verdad?

-Lo sé

-Pues dime qué te pasa

No sabía cómo contarle a su hermana que el motivo por el que estaba despierta desde tan temprano era porque no podía dejar de pensar en la conversación que tuvo con Marina aquella noche. Le costó mucho soltarlo pero lo consiguió, aunque no le dijo exactamente quien era la persona.

-Pues...resulta que me gusta alguien

-Anda, que bien- se alegró Natalia

-Es una chica

La mayor se sorprendió puesto que no se esperaba eso para nada.

-Bueno, no pasa nada si es eso lo que te preocupa

-No es eso, digamos que no nos conocíamos de nada pero empezamos a hablar y nos vimos algunos dias y justo en uno de esos días le confesé que me gustaba y le besé, y parecía que ella sentía lo mismo porque no dijo lo contrario, pero al día siguiente no quiso saber nada de mí.

-¿Y eso?

-Es mayor que yo, tiene 20 años, y vivimos un poco lejos la una de la otra

-Ala, pues que marrón, pero solo te saca 4 años, tampoco es tanto, suena un poco raro porque ella es mayor de edad y tú no, pero cuando lo seas ya no será tan raro

-Eso le dije yo

Hablarlo con Natalia le hizo sentirse más libre, se sentía agradecida de poder contar con su hermana para este tipo de cosas.

-Y ayer volvimos a hablar y quedamos en intentar volver a estar como antes pero sinceramente, no se si será posible, Nat, tengo miedo de que vuelva a alejarse de mí

-Si te quiere, estoy segura de que no se irá de tu lado

-Eso pensaba la última vez y se fue- rodó los ojos

-Pero volvió

-Porque vosotras la trajisteis aquí- masculló

-¿Qué?- preguntó la morena al no entenderla bien

-Que no se, Nat, ha vuelto pero puede irse otra vez, además, no podemos estar juntas porque como ya te dije antes, no vivimos nada cerca

-Hay relaciones a distancia- dijo levantándose para dejar la taza en el fregadero

-Creo que esta no funcionaría- bufó Elena

Justo apareció Alba, envuelta en una manta.

-Hola- dijo acercándose a Natalia para  darle un abrazo

-Buenos días, bebé- contestó Natalia correspondiendo al abrazo y dándole un beso en la cabeza

-¿De que habláis?- preguntó

-De...- Natalia miró a su hermana confusa en sí contarle lo que recién le había contado Elena o callarse- bueno en realidad nada importante, Elena me contaba como le iba en el instituto

Elena suspiró tranquila porque Natalia había sabido guardar el secreto.

-Ah ¿Y qué tal?- se interesó por el tema

-Bien, le va bien- respondió a su novia

Salió de la habitación la única persona que no se encontraba en ese salón.

-Buenos días- dijo Marina con la voz algo ronca de estar recién levantada

A Elena se le electrocutó todo el cuerpo. Le encantaba su voz, podía llevarse horas escuchándola hablar. Pero jamás la había escuchado así y le había encantado.

De repente una bola peluda salto encima de la mesa, causando q se asustasen.

-¡No, Queen!¡Bájate de ahí!- le gritó Alba a la gata, quien inmediatamente se bajó de la mesa

-Jo, me encanta tu gatita, Alba- dijo Elena acariciándola

-Gracias, pero hay que enseñarle que no se puede subir donde le de la gana

-¡Por cierto!- gritó Natalia acordándose y asustando a las otras

-Joder, Natalia, que puto susto- se quejó Alba

-Hoy me reúno con el productor para hablar del disco

-Muy bien, mi amor- la rubia se acercó a darle un beso

-Voy a vestirme que he quedado con él dentro de un ratito

Y eso hizo, se fue al cuarto a cambiarse y Alba aprovechó para ir al baño. Las dos hermanas de las protagonistas volvieron a quedarse solas y por mucho que no quisieran,  había cierta incomodidad entre ellas.

-¿Cómo has dormido hoy?- rompió el hielo la menor de ellas

-Bien, ¿y tú?

-Bien... -Marina frunció el ceño por la respuesta- no podía dejar de pensar, necesito una respuesta ¿qué va a pasar con nosotras cuando acabe esta semana?¿Volveremos a estar sin hablar? No quiero eso, te quiero mucho y quiero que volvamos a estar como antes- terminó el discurso con una mueca de tristeza, lo que no sabían es que Natalia había terminado de vestirse y había salido de la habitación justo cuando había pronunciado ese "quiero que volvamos a estar como antes".

Esto dejó confundida a la morena que tosió para que las otras dos chicas se dieran cuenta de la presencia de esta en el salón.

Se miraron asustadas sin saber cuánto tiempo llevaba allí parada y cuánto había escuchado de la conversación.

-¿Ya... Ya te vas?- logró preguntar Elena algo nerviosa

-Si

Se despidió de Alba y salió de aquella casa con miles de preguntas sobre lo que había visto. De repente su cabeza hizo "clic" y entendió todo. Tendría una larga charla con Elena...

*  *  *
Pues parece que Elena se ha soltado con su hermana, aunque no haya dicho exactamente de quien hablaba...aún así, por lo que hemos visto, parece que Natalia está sospechando ya algo...¿Qué pasará?
🧡