10 Segundos

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Capitulo siete

10 segundos

Eleonor.

Ya es domingo, uno de los mejores días de la semana, pero también puede ser uno de los peores, ya que le da entrada nuevamente, a las clases, la secundaria es realmente aburrida, pero sin embargo me gusta estudiar allí. han pasado varios días desde la ultima vez que vi a Pol, me parece extraño el hecho de que no ah venido a visitarme, ¿Qué le habrá sucedido?, realmente estoy preocupada, el otro día fui a su casa y no estaba, quizás conoció a alguien mejor que yo, o simplemente salió con klebertt.

El día paso como de costumbre, solo que un poco mas lento, todo el día estuve pensando en Pol, pensando en que le habrá sucedido, o si esta bien, entre pensamientos, música y memes se hizo de noche, es hora de dormir, así que me puse mi pijama de Stich para dormir.

Al día siguiente.

Suena la alarma de mi celular, y me despierto de repente, me recuesto del espaldar de la cama maldiciendo al despertador por despertarme de mi sueño con Pol.

Ni crean que se los voy a contar.

Voy caminando como una zombi a cepillarme los dientes para después bañarme, mientras me cepillo los dientes miro al espejo y parezco una bruja, mi cabello esta totalmente desordenado y enredado, termino de cepillarme, me quito la pijama de Stich y mi cuerpo queda al aire libre, no me gusta para nada mi cuerpo, soy rellenita y estoy desproporcionada, entro a bañarme para poder vestirme nuevamente, al salir del baño veo por la ventana y ahí esta Pol, luciendo tan perfecto como siempre, el uniforme le queda realmente bien, combina con su cabello castaño oscuro. Lo vi un poco triste, pero ¿Por qué?, eso me hizo preocuparme aún mas, el se monto en su auto y salió rumbo a su secundaria, y recordé que yo también tenia que hacer lo mismo, entonces me puse el uniforme, me peine el cabello, y baje, tome el desayuno y me monte en el auto para ir a la secundaria.

Llegamos temprano, así que fui a sentarme en un banquito con mis amigas, a platicar un rato y pasar el tiempo. Entramos al salón y mi mente seguía pensando en Pol, ¿Por qué estaba triste?, Las ganas de ayudarlo me invadían, pero no podía hacer nada de momento, así que intente centrarme en la clase, el tiempo paso rápido, ya era hora de irse a casa, pero mis amigas me invitaron a ir a la plaza con ellas, a comer helados y a charlar, entonces avise a mi madre que iba a salir con ellas, y me fui.

Pol.

Los últimos días los he pasado realmente mal, aún no le he contado a nadie lo sucedido esa noche, ni a mis padres, ni a mis hermanos, ni a klebertt. Ahora casi ni como, el cambio en mi es evidente, últimamente solo pienso en esa chica, esa que me hizo odiarme a mi mismo, esa que me convirtió en lo que no quisiera ser. He estado vagando en mi desierto mental, buscando una respuesta, buscando una señal, que me diga que hacer, pero no he encontrado nada en especifico, lo mas relevante que encontré me dijo que debía contárselo y dejar de ser tan cobarde.

En eso se acerca a mi la chica que me entrega las cartas, al parecer traía una nueva después de tanto tiempo, pero no es momento para leer cartas de otras chicas, la única chica que quiero es a Eleonor. Ella me entrego la carta y simplemente se fue, como quien bota basura en un cesto.

Klebertt esta sentado a mi lado y me pregunto. - ¿No la vas a leer?.

Yo le respondí. – No, ya no me interesan las cartas.

Yo estaba pensando en tirarla pero el me la quito de las manos y la abrió, la carta decía. – Veámonos en la plaza en un rato. – Solo decía eso, entonces klebertt me dijo . – Tienes que ir.

- No quiero ir a ver a la chica, ya no me interesa.

- Entonces si no te interesa debes decírselo a la cara. – realmente no parece una mala idea, si lo hago puedo dar fin a esto, no quiero que en mi cabeza haya otra chica que no sea Eleonor.

- Ok, iré.

Entonces le avise a mi papa que iba a ir a la plaza, y Salí de la secundaria con camino hacia la plaza, me puse la capucha del sweater que llevo a la secundaria para que el sol no me quemara, en enserio detesto que eso pase. La plaza no esta tan lejos de la secundaria, así que no me costo mucho llegar hasta ahí, Me senté en un banquillo observando alrededor para ver si veo a alguna chica observándome, voltee a la izquierda y una chica se dirigía hacia mi con dos conos de helado, al parecer era la misma chica que vi el primer día de clases, las descripciones coincidían.

Se sentó a mi lado y me sonrió, luego me dijo. – Hola, soy Isabel. – y me ofreció uno de los dos conos.

Mientras tomaba el cono que me ofreció, me di cuenta de que sus mejillas estaban sonrojadas, se le nota porque su piel es muy blanca. – ¿así que tu eres la que envía las cartas?.

No quería parecer malo, pero no puedo ser dulce con ella, simplemente no me sale. Ella se sonroja aún mas, y se nota que esta avergonzada. – Si, esa soy yo. – No les voy a mentir, la chica es muy linda, sus pecas le dan un toque peculiar, y sus ojos color miel combinan con su cabello.

Ya, tengo que ir directo al grano, no puedo titubear. – Oye, de verdad aprecio el gesto, Las cartas, el helado, pero... - En eso escucho una voz detrás de mi que me destroza el alma.

Eleonor.

- ¿Pol?. – Dijo con una voz temblorosa mientras sostenía un cono de helado, voltee a verla, note que sus ojos estaban llenos de lagrimas, y su cara exigía una explicación, Y en realidad se la merece.

- Eleonor, déjame explicarte. – Ni siquiera termino de escuchar mi frase cuando se volteo, soltó su cono y salió corriendo convertida en un mar de lagrimas. Sentí otra vez ese sonido de ruptura que sentí aquel día en la fiesta, entonces no lo dude y solté mi cono para salir tras de ella.

Eleonor, ya se había ido, entonces comencé a buscarla por todos lados, luego de un rato buscando, recordé que nuestro urbanismo queda muy lejos así que ella debía tomar el autobús, entonces me dirigí a la parada, y ahí estaba ella, sentada llorando, eso me hizo sentirme aún peor. Entonces me senté a su lado en silencio, estuvimos así unos 10 segundos y finalmente decidí romperlo.

- Eleonor, déjame explicarte, ella y yo, no estaba pasando nada. – dije mientras mi voz se quebraba. – Solo quería explicarle que.. – De un momento a otro no me di cuenta de que estaba llorando. – Solo quería explicarle que ella no me interesa. – Eleonor estuvo en silencio viéndome llorar, entonces me rodeo con su brazo, y seco mis lagrimas, yo levante la mirada para verla.

Simplemente me dijo. – Te creo. – Yo la vi a los ojos y ella siguió hablando . – Estaba muy preocupada por ti, porque has estado distante últimamente, entonces al verte con esa chica me hizo pensar muchas cosas, lo siento. – Entonces Eleonor tomo mi mano, y la acaricio.

- Eleonor, Yo... - No me dejo terminar mi frase y me dio un beso, un beso que significaba, todo va a estar bien, no pasa nada, de repente comenzó a llover, el ambiente parecía de una película de amor, Pero.

No me dejo contarle lo que sucedió el otro día en la fiesta, quizás deba quedarse así, aunque no se si sea lo correcto, aunque no se si pueda soportarlo, lo intentare para no hacerle mas daño a Eleonor.

El autobús llego a la parada y los dos subimos para ir a casa, juntos.

En busca del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora