Capitulo XXIII

1.7K 147 14
                                    


Cuando Inuyasha y los demás llegaron al lugar dónde Naraku tenía a Rin y a Shippo se encontraron con una mujer conocida para todos

Inuyasha: Kagura!
Naraku: Como puedes ver Inuyasha, pude revivir a Kagura, ahora, entrégame a Kykyo y Aome o Kagura matará a los mocosos
Inuyasha: Estás loco infeliz! Viento cortante!

Cuando los demás iban a ayudar a Inuyasha, Kagura se interpuso, haciendo que Miroku y Kykyo pelearán con ella e Inuyasha y Sango pelearán con Naraku.
Mientras la pelea se llevaba a cabo Aome y Sesshomaru llegaron a la época antigua

Aome: Sesshomaru! Siento el aura de los chicos muy alterada
Sesshomaru: Naraku está cerca, vamos mujer!

Aome fue corriendo por su arco y flechas al igual que su espada, para así salir corriendo junto con Sesshomaru en dirección a Naraku

Jaken: Amo Sesshomaru! (Alcanzandolo) Amo bonito, secuestraron a los mocosos
Aome: Se supone que deberías cuidarlos (mirándolos enojada)
Jaken: Amo bonito! Si no me mata usted, está chiquilla lo hará
Sesshomaru: Hmp!

Cuando Aome y Sesshomaru llegaron al lugar de la pelea se dieron cuenta de la presencia de Kagura, algo que los dejo un poco intrigado. Sesshomaru se dirigió hacia Naraku el cual aún peleaba con Inuyasha, y Aome se fue a auxiliar a Kykyo, ya que Sango y Miroku estaban heridos
Kagura estaba por atacar a Kykyo cuando una flecha sagrada paso rodando su mejilla, dejándole una quemadura por la energía sagrada

Kagura: Ha! Maldita
Aome: No, no lo harás (lanzando otra flecha dándole en una pierna)
Naraku: Vaya vaya, miren quien está aquí, Aome, Kykyo, yo sé que no quieren ver morir a esos mocosos, entreguense por su cuenta y ellos vivirán
Aome: Kykyo (susurrando) confias un poco en mi?
Kykyo: Que debo hacer?
Aome: Mira (señalando con la mirada el campo de energía dónde ahora se encontraba Kagura con Shippo y Rin). Trataré de distraer a Naraku, lanza una de tus flechas para romper la barrera de Kagura, Sesshomaru se encargará de lo demás (mirándolo, el cual entendio el plan)
Naraku: No tienen que pensarlo, salven la vida de esos niños inocentes (burlándose)
Aome: Por que quieres a Kykyo si puedo ir yo? Ahora soy más poderosa y lo sabés
Inuyasha: No Aome! (Ella solo lo miro y sonrió)
Naraku: Está bien, ahora tira tu arco y flechas (sin darse cuenta de la espada)
Aome: Está bien (arrojando el arco y las flechas)

Cuando Naraku estaba por tomar a Aome con uno de sus tentáculos se escuchó una leve explosión y un grito de Kagura, Naraku volteo y vio como Sesshomaru y Kykyo atacaban a Kagura

Aome: No te distraigas Naraku (lanzando energía sagrada con su espada)
Naraku: Maldita!
Inuyasha: Viento cortante!
Naraku: Esto no se quedará así (huyendo como siempre)

Inuyasha y Aome se dirijeron hacia donde estaban los demás con Kagura, que había sido más rápido que ellos y aún tenía a los pequeños

Kagura: Sesshomaru, te entregaré a la mocosa y vete, esto no es contigo
Sesshomaru: Hmp! Devuelve a los dos (atacando con su látigo)
Kagura: Porque te importa ese zorro (esquivando el ataque)

Sesshomaru se volvía a mostrar frío, con esa mirada que parecían dos cuchillos apuntandote, se volvía a mostrar como el perfecto asesinó que es.

Aome: Kagura! Suelta a mis hijos! (Lanzando otra flecha dándole en el brazo)
Kagura: Maldita! Te matare! (Avalanzandose hacia ella para un ataque directo)
Sesshomaru: Lárgate (poniéndose frente Aome y clavando sus garras en Kagura). Si atacas a mi mujer te mato con mis propias manos, además de que secuestraste a mis cachorros
Kagura: Mujer? Cachorros? (Arrodillándose)
Aome: Vete Kagura, si no te mata Sesshomaru está vez lo haré yo, a mi puedes atacarme, pero a mis cachorros no los tocaras
Kagura: Te mataré maldita, a ti y a esos mocosos, Sesshomaru será mío (usando su pluma para escapar)

Todos se sorprendieron por las palabras de Aome, era obvio que Sesshomaru estaba influyendo en su actitud, así como ella en la de él
Más tarde cuando ya se encontraban en la aldea y Shippo y Rin estaban dormidos. Una chica de cabellos azabache estaba parada frente a un Inuyokai y un pequeño y verde sapo mientras los miraba muy enojada. Una cosa era segura, el Lord del Oeste solo le temia a una sola cosa, y era elm carácter de su hembra cuando estaba enojada, más ahora que ya había sentido su energía sagrada y ella se había dado cuenta de que sus cachorros no estaban con Sango y Miroku  y que no les habían dejado una sola indicación a ellos como el le había dicho.

Adivinen a quien van a regañar y este se va a desquitar con su fiel sirviente?

siempre fuiste túWhere stories live. Discover now