Capítulo 16: Momentos de amor

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Roxy envolvió a su novio en un fuerte abrazo cuando regresó con ella, estaba muy emocionada, hacía mucho que no se sentía así.

—Ha sido increíble.

—¿Te ha gustado?

—Me ha encantado. No esperaba veros actuar juntos así.

—Fue idea del profesor Peters. Decía que quería dar un gran espectáculo, y lo ha sido. De hecho, ha sido bastante divertido trabajar con él. —«Entiendo por qué las chicas lo alaban tanto» pensó. Era agradable trabajar con Peters, siempre escuchaba sus ideas y estaba dispuesto a probar cosas nuevas, además era bueno explicando y muy divertido.

Lizzy subió de nuevo al escenario para presentar, esta vez a Di en solitario, que cantaría la canción que había compuesto para Lex.

—Esta canción la escribí para alguien muy especial para mí —dijo el elfo desde el escenario—. Alguien que... —Se sonrojó— siempre me ha inspirado. Probablemente, sea una de las personas que más admiro y... aún me cuesta creerme que por fin sea mi novio. —La cara de Lex se puso completamente roja—. Bueno, esta canción es para ti.

Lex sintió ganas de llorar, el calor en su pecho casi lo abrasaba. Amaba tanto a ese chico. Sabía que él no le juzgaba, que le entendía, que veía más allá de sus errores y defectos... que lo amaba de verdad. ¿Cómo podía tener a una persona tan increíble en su vida? ¿Qué había hecho para merecerlo? No lo sabía. Pero tampoco comprendía cómo en un mundo tan cruel podía existir un ser de luz como Diligitis Witnefram. Aquel hermoso príncipe elfo, aquella luz que iluminaba su alma oscura, ahora era su novio.

«Te amo, mi príncipe» pensó admirando a su pareja con una sonrisa. Por fin.

Dustin se acercó a Merope cuando comenzó la canción y le tendió la mano.

—Señorita, creo que me debe un baile —le recordó.

Merope lo miró con algo de timidez y sonrió, tomando su mano.

—No me he olvidado.

En cuanto la mano de Dustin se posó en la cintura de la ninfa y sus ojos conectaron, una sonrisa iluminó su rostro, y sintió una punzada en el estómago.

—Vaya, debo estar dando envidia a toda la escuela.

Merope se rio.

—Eres un exagerado. No es a mí precisamente al que más de una anda mirando.

Dustin no apartó los ojos de ella ni un segundo.

—No me he fijado en nadie más —confesó más como un pensamiento en voz alta, que provocó que ambos se avergonzaran un poco.

Roxy se encontraba bailando con Lee, sumida en la calma y la alegría en aquel momento. De repente, se percató de que Morgan no paraba de mirar a Lizzy, quien también le devolvía la mirada disimuladamente de vez en cuando, fingiendo que toda su atención estaba en su amigo.

—Lee, ¿me disculpas un segundo? Vuelvo enseguida.

—Claro. ¿Pasa algo?

Roxy miró a sus amigas de nuevo.

—Pasa que todos merecemos un momento así. Ahora vuelvo.

Roxy le dio un beso en la mejilla a Lee y se acercó a León.

—¿Qué pasa pelirroja? —la saludó el tritón.

—Necesito tu ayuda.

—¿Para qué?

La magia de Avalon: Mestiza [Libro 2]Where stories live. Discover now