El diario de Rita... ¿Loud?

CAPÍTULO 6 AMISTAD OPORTUNA

El silencio del ambiente se mantenía intacto, en una gran sala podía verse no solo muebles y objetos lujosos sino también varias latas de cerveza acumuladas en la mesa, cigarrillo apagados y prendas tiradas en el sofá, cualquiera diría que hubo una fiesta y no estarían lejos de acertar, recorriendo un casi oscuro pasillo llegamos a las puertas de una gran habitación, mientras más no vamos acercando descubrimos que aquella dichosa fiesta era una más... privada.

El sonido de la cama sacudiéndose era opacado por los gemidos de cierta madura recostada y acorralada por su joven amante el cual tenia aferrada ambas manos de la mujer contra la cama embistiéndola ferozmente a tal grado que esto solo dibujaba una sonrisa en ella ignorando por completo el intenso parpadeo carmesí de la cámara que grababas sus actos, Rita solo se dejo llevar por el placer de la situación, tan orgásmico era que solo podía articulas una simple palabra "Viktor" con un tono cariñoso, pero ese placer y emoción se opacaron cuando al mirar a un lado noto aquel televisor de la habitación y como en este podía verse lo que la cámara grababa solo para palidecer al notar las palabras "en vivo"

—¡v-Viktor! La cámara ¡apágala! – su amante no la escuchaba solo continuaba con el acto – ¡alto, detente! – al mirar al frente vio a su amante con una máscara blanca en la cual estaba dibujaba solo una sonrisa y como poco a poco el lugar comenzó a llenase de gente que la miraban con celulares en mano - ¡alto!

—¿Qué sucede Rita?... – miro a su amante – no me digas que a una ramera como tú le preocupa que todos la miren...

—¡ah! – exclamo al despertar en su habitación, miro su alrededor confirmando que todo era real y no otro sueño, miro a su lado a su esposo aun dormido a pesar de la sacudida, miro su celular 5:36 am – solo fue una pesadilla... solo eso...

A pesar de ello se levantó y salió a la cocina a preparar su desayuno el aroma del café relajaba su mente cosa que no duro mucho apenas fueron las 6 am en donde sus hijas comenzaron a discutir por la fila del baño, algo que realmente la irrito tanto solo se dedico a sorber su taza para no gritarles, aunque esto complicado teniendo a Lola quejándose de su cabello, leni con su piel entre otras quejas de las hermanas

—buen Rita – comento su esposo quien de inmediato comenzó a preparar el desayuno

—buen día... - contesto solo para ayudarlo

—sabes Rita... pronto será nuestro aniversario y... eh pensado en que podríamos salir a cenar a aquel restaurante... - su esposa no se inmutaba con aquella propuesta siempre que llegaba su aniversario ambos iban al restaurante de su primera cita, el problema ahora era el dinero pues además de los gastos esenciales tenían sus otras deudas las cuales tomaban todo el dinero que ganaban con su trabajo así como de sus hijas las cuales pocas veces podían disponer del dinero que tenían quedando siempre con las manos vacías, pero otro problema era sobre dicha cena, Rita sabia lo morboso que era su esposo no por algo terminaron con 11 hijos

—mmm... - susurro mirando a su esposo el cual llevaba su bata verde cuya correa marcaba su barriga, su cabeza casi calva, también la gran nariz y el colmo eran sus pantuflas rosadas con un logo de sombrero de chef las cuales compro luego de que leni arruinara las anteriores ocultando la carne cuando ella y sus hermanas intentaron arruinar las cenas de la familia – me temo que no podrá ser posible... cariño

—¿qué?, pero...

—Lynn comprende que no estamos en situación de darnos gustos personales las deudas que tenemos... tristemente nos tomara... demasiado tiempo en pagarlas y eso si nuestras hijas dejan de asistir con la psicóloga, este año no podremos ir

—pero no podemos hacerle eso a Tim y los demás ellos siempre cuentan con nosotros en el restaurante y... - Rita le miro con molestia

—¿haces esto por hacerle un favor a un tipo que ni es de la familia y menos alguien con quien hables más allá de nuestro aniversario?