El diario de Rita... ¿Loud?

Capítulo 9: una amiga diferente

Durante su turno en el trabajo de Rita, ella se mantuvo neutral a causa de su resaca detalle que logro disimular sin que nadie se percatara, aunque si fue complicado con el ruido, el único timbre que disfruto fue el del reloj de su colega que marcaba la salida, sin perder tiempo arreglo todo y fue a cambiarse despidiéndose de los demás, no paso mucho hasta que llego a la avenida en donde recibió un mensaje de Viktor quien le decía que se dirigiera a una esquina, sin perder tiempo fue y encontró el auto de su amante

—vaya llegaste muy deprisa

—es que tengo que salir con una amiga... - comento al cerrar la puerta, le pregunto donde la vería para llevarla

—veo que te llevas muy bien con aquella chica dime ¿realmente confías en ella?

—bueno ha sido la única que no se ha puesto a la defensiva conmigo luego de saber que soy madre de esas chicas

—interesante, por cierto ¿has pensado en mi propuesta? – el auto se detuvo a una cuadra del café donde se vería con teresa, la Loud estaba indecisa moviendo los dedos sobre sus muslos

—yo..., lo he pensado, pero... quiero saber algo Viktor – el chico la miro – ¿q-que buscas de mí? – el chico solo sonrió causando que Rita se sonrojara, la Loud se sintió como una adolescente a la cual parecía que se le iban a declarar

—oh querida... - la beso – lo quiero todo...

—todo... - pensó no supo cómo interpretarlo, ni cómo responder, lo único que hizo fue salir del vehículo y caminar en silencio al café en donde solo paso unos minutos para que apareciera su amiga con una sonrisa pícara.

Mientras tanto Viktor regresaba a su departamento, pero en el camino noto algo inusual en una calle cerca el restaurante donde el sr. Lynn trabajaba, noto la camioneta del hombrecillo y a él sentado mirando por la ventana hasta que distinguió teniendo que detenerse

—hola Viktor ¿cómo estás? – comento al verlo detener el auto

—bien gracias y ¿Qué haces aquí? Pensé que ya estarías en tu casa

—solo..., solo quise descansar un rato antes de volver, es algo agotador el tener que encargarse de un restaurante y luego una familia

—parecer preocupado por algo más, ¿hay algo de los que quieras hablar?

—bueno... - esto iba a ser irónico y el peor error que podía tener el sr. Lynn, confiar en Viktor solo porque su esposa e hijas confiaban en él, la influencia que su familia tenía lo hacía dejar poco a poco aquellas dudas sobre el chico – sé que esto sonara extraño y mal, pero... has visto algo inusual en Rita

—te refieres como siempre llegar cansada y toma café para perder el sueño en las mañanas

—¿ella haces eso? Oh vaya sí que está esforzándose mucho... - Viktor solo sonrió su pequeña mentira con algo de verdad había resultado, tenía al tipo vulnerable – pero me refiero a algo más, la has visto hablar con alguien ajeno a tu trabajo

—mmm... bueno una vez vino una mujer a recoger una especie de manuscrito, fuera de ello solo a tenido charlas con los pacientes ninguna fuera del ambiente laboral, además Rita es neutral con todos los odontólogos excepto con esa nueva amiga suya a veces en el almuerzo charlan por celular

—¿así...?, bueno... Viktor si notas algo raro... solo házmelo saber y...

—Lynn... no quiero ser alguien... cruel..., pero mi padre siempre decía, es mejor pensar mal de algo primero, así como evitar ilusionarte pues así evitaras que la decepción sea fuerte...