Se había quedado sólo, y eso lo hacía sentir bastante inseguro, esperaba que el otro llegara rápido.
Escucho como tocaban la puerta, no sabía si ir a abrir o no, sus inseguridades le ponían el peor escenario posible, pero a su vez pensaba que podría ser Horacio, sólo tomó el arma que siempre llevaba, porque los Santos siempre era una ciudad peligrosa, se dirigio a la puerta y observó por el pequeño hoyo que esta tenía, sólo pudo observar a una persona parada, era muy extraña aquella figurará, no podría definir si era mujer u hombre porque llevaba una capa demasiado ancha, esta era de un color rojo intenso.
—¿Quien es?
—Ten cuidado
—¿Cómo?, ¿de que habla?
—El peligro acecha
Y sin más se fue, Volkov no abrió la puerta por miedo, si en el trabajo demostraba ser alguien duró, pero no lo era al menos no demasiado.
Se encontraba paseandose por la casa, sentía algo de curiosidad por el chico de la cresta, en los pasillos observaba algunas fotos y cuadros, sin más que hacer se dirigió a donde estaba y el miedo luego llegó ¿quién era?, ¿me buscaban a mi? y si eso era ¿como sabían que estaba aquí?
Eran las preguntas que se formulaba el ruso, no llegaba a ninguna conclusión.
Pasado otro rato escucho la puerta abrirse, simplemente fue a ver, y se encontró con Horacio, aunque no iba sólo una chica de cabellos morados la seguía, y sabía bien quien era.
—¿Que haces aquí Paola?
🍥
Sino actualizo será xq
me maté): grasias
por su atención
También gracias x leer
