•𝐄𝐥𝐥𝐚 𝐞𝐬 𝐦𝐢 𝐋𝐮𝐧𝐚• [PAUSADA] [𝐉𝐢𝐌𝐢𝐧] [Temporada#02 MPM]

☬ 38장

Acababa de despertar más temprano de lo usual. Y aunque, el interior de la cabaña comenzaba a iluminarse, parecía como si nadie la ocupara en lo absoluto.

Todo estaba muy silencioso, incluso más que ayer en la mañana, considerando de que ahora habían visitas.

La morena se levantó frotándose los hombros y parte de su cuello, por la tensión que su cuerpo retenía, pero eso, no fue inpedimento para que recordara lo que había sucedido en la madrugada, sintiéndose inevitablemente satisfecha por haber confirmado por cuenta propia, el gran efecto que tenía sobre su licántropo.

Porque sí, era su licántropo, y después de todo lo que había escuchado por parte de él, su lobo y Wendy, no tenía más dudas sobre eso. Él era suyo quiera o no, y pasara lo que pasara.

Era hora de aceptarlo.

Aún con pijama, se lavó la cara y cepilló sus dientes. Se moría por una vaso de agua justo ahora para borrar el estrés y despejarse un poco. Y como parecía no haber nadie abajo, creyó que no estaría mal, si iba solo un rato a hidratarse.

Arregló su moño y salió en silencio. Y efectivamente, como lo había supuesto, no había nadie en el pasadizo, mucho menos en la sala, ni tampoco en la cocina.

Fue directamente por un vaso y se servió agua de la tetera sin hacer tanto escándalo. Tal vez, más rato bajarían todos a desayunar, pero ¿Qué hora era?.

Ella se fijó en el reloj de la cocina y apenas, era cuarto para las siete.

Sí que era demasiado temprano. Hizo una pequeña mueca y se culpó un poco, por no haber dormido un poco más.

Un enorme bostezo se escapó de su boca, seguido después de un gruñido desde su estómago. Intentó servirse un vaso más de agua, para llenarse un poco y así aguantar para comer con todos, pero justo en ese momento, fue cuando el sonido de la madera rechinar llegó a sus oídos, a tan solo unos metros de ella. Cuando se suponía que todos estaban durmiendo aún.

Era fácil percatarse de algún ruido cuando el piso era incluso de madera.

Tn se quedó quieta sin mover ni siquiera un dedo del vaso, y prestó más atención al rechineo que cada vez, se hacía más próximo.

Su piel se escarpeló como de costumbre cuando tenía cierto miedo de algo. Aunque, por esta vez, no era exactamente algo, sino alguien que estaba justo a sus espaldas avanzando lentamente, o al menos así lo presentía ella.

Esperó algunos segundos más, y fue ahí, cuando vio cómo aquella persona intentaba tapar su vista a como de lugar. Sin embargo, fue ella quien logró primero tomar sus manos y darle un giro casi completo sin dudarlo.

Un grito exagerado estalló contra sus oídos cuando presionó la muñeca del tipo, quien era mucho más alto y con mucho más porte, y que de no ser por ese grito, ella hubiese temido un poco más de él, pero no. Tn sin darle a esperar más, lo empujó contra la pared, separando sus pies con los de ella de forma brusca.